El profesor Couffaine llegó a ducharse a casa. Se desnudó por completo y se situó bajo el chorro de agua tibia. Sus pensamientos más profundos lo atormentaban pero el recuerdo no tan lejano de la señorita Tsurugi en su escritorio ahuyentaban aquellos miedos que surgían al estar en aquella casa.
Suspiró y salió de la ducha. Envolvió sus caderas con una toalla blanca limpia y pasó una mano sobre su cabello húmedo. Miró los rasguños del día viernes por la noche y la marca purpura que estaba en la cavidad de su cuello, justo debajo de su oreja. Kagami sabía perfectamente su punto débil.
Colocó unos pantalones de mezclilla rectos y una camisa blanca con un patrón de rayas verticales color rosa, dejando los primeros botones libres. Sacó un sombrero y se lo colocó junto a sus anillos y su cadena de plata con un dije de cruz.
Salió de su hogar y pasó a buscar a Kagami. Quien lo esperaba en el lobby del edificio. Sus ojos se encontraron y la joven se acercó a él para envolver sus brazos en su cuello.
-Te ves guapo-Susurró sobre sus labios.
-No más que tú, señorita Tsurugi.
Kagami dio una pequeña carcajada y enterró su rostro en el cuello de Couffaine. Aspiró el aroma de su perfume casi recién puesto y depositó un beso.
-¿Vamos?
-¿A qué hora es la cena?-Kagami entrelazó sus dedos con los de Luka mientras caminaban por las calles de París hasta el estacionamiento del carro de Couffaine.
-Ana ya la está preparando-Kagami frunció el ceño-No quiero compartirte aún.
-¿A qué te refieres?
-Siento que estamos en nuestra luna de miel.
-Tu forma sutil de decir que solo nos juntamos a tener sexo.
-No quiero que pienses que solo te busco para eso-Kagami permaneció en silencio. Quería seguir escuchando lo que él sentía y pensaba sobre ellos-Gami...
-¿Qué?
-De verdad no lo estoy haciendo.
Kagami parpadeó rápido y quedó mirando los ojos celestes de su amante. El tacto de sus dedos se alejó. Luka abrió caballerosamente la puerta de su vehículo y esperó que la joven estuviera a gusto dentro de la cabina.
Kagami miró a Luka rodear el vehículo.
-¿A qué viene esa mira sorprendida?
-Te ves distinto... Nunca te había visto tan relajado.
Couffaine rió.
-¿Te gusta?
-Si, es una faceta que no había visto en ti.-Susurró y dirigió su mirada a la carretera. La última vez que había estado en su casa fue cuando se metió en su cama y no precisamente para dormir. Fue cuando lo que apenas comenzaba terminó por su culpa. Había malinterpretado todo.
-Hay varias cosas que aún no conoces de mí.
-Touché.
Couffaine sonrió. Buscó con su mano derecha la mano de Kagami y la entrelazó. No la soltó hasta que llegaron a su casa.
-Había olvidado lo hermosa que es-Jadeó Kagami bajándose del vehículo con la ayuda de Luka.
El profesor Couffaine se sintió alagado por sus palabras. La escoltó hasta la entrada de la casa donde amablemente Ana, la señora del aseo, le tomó su chaqueta de cuero y su bolso para guardarlo. Detrás de ella, Luka caminaba con las manos entrelazadas en su espalda.
.¿Tiene terraza?-Luka asintió.
-Vamos...-Ofreció-Te llevo.
Kagami lo siguió por los pasillos hasta un ventanal de dos correderas. Se mordió el labio por la magnitud del jardín frente a sus ojos. La terraza estaba amueblada y tenía un pequeño fogón de piedra apto para fogatas. Era el espacio ideal para compartir con familia y amigos ya que lo rodeaban sillas. Frente a esta una piscina temperada y un jacuzzi.
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생명을 건넜다 (Vidas cruzadas) © COMPLETO
FanfictionLuka Couffaine, es un enigmático y atractivo profesor con especialidad en literatura inglesa, es un hombre poco orgulloso de su pasado aunque consciente del prestigio que ha conseguido. Cuando la virtuosa señorita Tsurugi gana un cupo para el curso...