CAPÍTULO 9: LA TRISTEZA DE MISAKI

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Kirishima ingresa nuevamente al hotel y se dirige a la habitación 610 donde se encuentra su jefe, al salir del ascensor se encuentra con Kenji Asami, le hace una reverencia y abre la puerta de la habitación, enciende la luz y ve a Ayaca gimiendo de placer con otro hombre, los enamorados ni se percatan de él, por lo que Kirishima da la vuelta, sale y cierra la puerta. Desconcertado toma su celular y llama a su jefe.

Asami empieza a reaccionar al escuchar el tono de su celular, medio cuerdo contesta.

Asami: Hola

Kirishima: Jefe, no está en la habitación que le pedí, ¿dónde se encuentra?

Asami: Habitación 601, ven rápido

Llega un guardia seguido por la Sra. Megumi, Takahiro y Akihiko en la habitación 601, le entregan a Toudou el inhibidor. Toudou había recogido la ropa de Misaki, toma el inhibidor y le pide a Misaki que le abra la puerta del baño.

Misaki abre y Toudou entra, mira sorprendido a Misaki, está tembloroso, ojos hinchados y el cuerpo lleno de chupetes y mordeduras; lo inyecta y lo viste para que pueda salir.

Kirishima y el Sr Kenji ingresan a la habitación y quedan atónitos con la escena, Kirishima sacude su cabeza y va a la cama donde está aún su jefe, sin previo aviso lo inyecta y le acerca algo de su ropa que recogió en el trayecto.

Fuyuhiko Usami, padre de Akihiko está esperando que el médico le dé el diagnóstico de su sobrino Taiki, que se encontraba desmayado. El médico indica que mezcló alcohol con somnífero, lo cual causó el adormilamiento. El médico logra despertar a Taiki, se despide y sale. Fuyuhiko, recibe un mensaje de su hijo, indicando que lleva a Taiki a la habitación 601 de manera urgente.

Los dos se dirigen para allá.

Asami se pone la ropa, se levanta y se sienta a un lado de la cama donde puede ver a todos los presentes, Misaki sale del baño apoyado por Toudou, que lo ayuda a sentarse en un sillón. En eso llega Taiki y Fuyuhiko que no saben que está pasando.

Megumi: Misaki, mi amor, ¿dime qué pasó?

Misaki: Abuela, tuve una discusión con Taiki abajo en el salón. No sé qué le pasó pero me quiso agredir y los guardias tuvieron que someterlo. Estaba desconcertado, nervioso y con mucho miedo. En eso Hiroko se me acercó me dio un vaso con jugo que me tome y luego me llevó a caminar para tranquilizarme. Al parecer el jugo tenía algo porque me empecé a sentir mal, ella pidió una habitación para que descansará, le pedí que te llamará porque no era capaz de moverme con libertad. Ella me dijo... – sollozos – que me había dado algo para adelantar mi celo y que traería al Sr Ijuuin para que me ayudara y así Taiki me iba a dejar.

Misaki empezó a llorar en un mar de lágrimas, por lo que Asami continuo la historia

Asami: Bueno, a mí también me drogó Ayaca, mi antigua amante, Kirishima me consiguió una habitación, en el ascensor me encontré con un hombre que se veía igual de afectado que yo, chocamos al intentar salir al mismo tiempo, las tarjetas se mezclaron. Él tomó primero la tarjeta, yo recogí la que quedó y me dirigí a la habitación 601.

Todos escuchaban en silencio, atónitos y con mucho dolor en su corazón. Asami continúo.

Asami: Entre me asegure que la puerta quedará cerrada para que esa mujer no pudiera entrar, pero sentí un olor a feromonas me acerque a mirar quién estaba en mi habitación, al ver a Misaki vulnerable en la cama, traté de alejarme. El me advirtió que lo drogaron, sus feromonas me afectaron y las mías se hicieron más intensas, me di vuelta y haciendo un gran esfuerzo pude dar unos pasos para alejarme, pero las feromonas de Misaki me envolvieron y sin poder controlarme le hice el amor.

CONSTRUYENDO NUESTRA FELICIDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora