Cap. 6

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Al dia siguinete me desperté y fui al comedor a desayunar, no sabía porque pero todos me miraban cuando entre al comedor incluso México, me senté junto a él.
-porque todos me miran?- le pregunté.
-sera por... tus pantuflas?- dijo riéndose.
No me había dado cuenta de que había salido con mis pantuflas del Rayo Mcqueen.
-mierda no me había dado cuenta! Que vergüenza...- dije tapándome la cara.
-jaja, tranquilo te vez adorable- mencionó mientras seguía riéndose.
-a‐adorable?- dije mientras me sonrojaba un poco.
-q‐quice decir ridículo! Te ves ridículo- dijo un poco avergonzado.
-mejor voy a cambiarme-dije haciéndome el tonto.

Me fui a cambiar las pantuflas y me puse mis zapatillas, como pude ser tan despistado como para salir en pantuflas? Me preguntaba a mi mismo, volví al comedor y me senté junto a México otra vez.
-ahora si- dije.
El solo se quedó callado... supongo que aún se sentía raro por decir que me veía adorable... aún que a mi... me gustó.

Cuando el terminó de comer se despidió y se fue a su clase, en ese momento apareció Rusia y se sentó conmigo al ver que México se había ido.
-estaban lindas tus pantuflas- dijo mientras se cagaba de risa.
-ja ja que gracioso- le dije con sarcasmo.
-y como te ha ido con el señor amargado- pregunto refiriéndose a México.
-bastante bien la verdad, últimamente a estado siendo más amable- dije con una sonrisa.
-seguro que solo quieres ser su amigo?- dijo a modo de broma.
-ay callate- le respondí algo sonrojado.

Cuando terminamos de comer son el timbre, así que cada uno se dirigió a su clase. Una vez que termine mi clase de nuevo me junté con Rusia de nuevo durante el receso.
-hola- me dijo.
-hola- respondí.
-como te fue en clase?- pregunto.
-lo mismo de siempre, solo escribir y escribir- respondí.
-las clases son muy aburridas- dijo.
-si a veces son muy aburridas-

Nos pasamos todo el receso conversando y cuando sonó el timbre me fui a mi clase un poco entusiasmado ya que me tocaba con México.
-hola- le dije mientras me sentaba.
-hola Rayo Mcqueen- dijo entre risas.
-no me digas asi- le respondí un poco avergonzado.
-prefieres que te llame el pantuflas?- dijo riéndose aún más.
-eres un idiota- le dije siguiéndole el juego.

El sonrió y no dijo nada más. Unas horas más tarde terminó la clase y nos fuimos a almorzar, cuando terminamos fuimos a nuestra última clase y luego terminamos el día. No pasó nada muy interesante en ese corto periodo de tiempo... pero no podía dejar de pensar en cuando México dijo que me veía adorable... cada vez que pensaba en eso inconscientemente soltaba una pequeña risita...

En Busca De Tu Corazón // FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora