9. Esmeralda

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Buenas buenas gente!!! ¿Cómo los trata la semana?

Espero que muy bien ❤️❤️. Hoy les traigo un nuevo capi que espero disfruten mucho oWo jejejeje también quiero felicitar a Ashvia y Dayana, que ganaron el pequeño concurso de la semana pasada, primer y segundo puesto respectivamente :D :D

bueno, no los molesto más y a leer

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Lo que tenía pensado Noruega para esa noche era muy diferente a lo que Colombia se esperaba, pero no menos divertido claro. El plan era sencillo, tan sencillo que dejaría por el piso la reputación del nórdico.

Ir a cine, ese era el plan de ese jueves, una actividad cotidiana pero que ninguno de ellos hacia hace rato, claro que no iban a una sala cualquiera, Noruega se había encargado de reservar dos entradas en uno de los cinemas más lindos de la ciudad, en la sala VIP. Si, era un poco presumido, sobretodo porque iban a la función de estreno, pero es que Noruega quería hacer algo diferente con su rubio, por lo que todo el esfuerzo había valido la pena.

Es que la sonrisa de Colombia al ver el lugar no tenía precio, el moreno casi le salta encima de la alegría al ver la fachada del lugar junto a las luces de neón, mientras agarraba fuerte su mano y lo obligaba a entrar. Todo estaba bellamente decorado y ambos disfrutaron de una amena charla mientras compraban las palomitas y todo lo necesario para esa función. Fue gracias a México que Noruega sabia del gusto del colombiano por las películas de acción y con ayuda del mismo, organizaron aquella cita (menos la parte de la ropa, esa si había sido su idea). Claro que no fue fácil convencer al rubio para que lo dejara pagar todo, aunque había ido con poco efectivo, a Colombia no le parecía justo que el castaño pagara todo, pero Noruega era un hombre preparado y con un suave "es una orden" Colombia se quedó callado.

Era una cita, un momento para convivir sin sexo de por medio y disfrutar del séptimo arte, pero ambos eran un par de idiotas, por lo que mientras la película se desarrollaba tranquila en aquella sala oscura, ambos países se comían a besos.

-Ya basta –Susurro Colombia cuando el beso se terminó, escondiendo su cara en el cuello del castaño, tratando de callar los suaves gemidos, había esperado un año por esa película y en serio quería verla, pero era difícil resistirse a las manos de Noruega, que se pasaban traviesas debajo de su falda, buscando su entrada.

-Entonces deja de tocarme- Noruega regaño con una sonrisa, el rubio se quejaba, pero sus manos se movían inquietas, desabrochando su pantalón mientras sus labios besaban su piel con hambre.

Como toda respuesta, Colombia mordió su cuello, haciéndolo temblar, le gustaba cuando el rubio era tan atrevido, y aunque él también quería ver la película, no pudo resistirse y agarrando al rubio de la cintura, lo acomodo en sus piernas, dejando que Colombia apoyara los pies en los reposa brazos, levantando aquella linda falda. Sus manos actuaron solas, una fue directo a la boca del rubio, para callar sus sensuales gemidos y la otra se escabullo dentro la ropa interior de encaje, disfrutando de la humedad de la zona, buscando lubricar sus dedos para ir por el premio mayor.

Era una posición incómoda, a pesar de que sus asientos eran el doble de anchos que los de una sala común, si alguno de los acomodadores se atrevida a subir al VIP y alumbrarlos, posiblemente tendrían que pagar una multa por exhibicionistas, pero no importa, lo estaban disfrutando, su piel se cargaba de electricidad cada que se rozaban, activando esa pecaminosa necesidad de estar juntos, ese deseo de perderse en los labios del otro hasta que no quedara aire. Con algo de dificultad, Colombia llevo una de sus manos detrás de su cuerpo, haciendo lo mismo que el nórdico de colar su diestra entre la apretada ropa interior y masajear el miembro de su pareja, si no tenía cuidado podía romperse un tendón, pero predominaba el deseo, por lo que dejo que sus dedos jugaran con aquel tronco mientras su otra mano obligaba a Noruega juntar sus labios.

Mientras sean tus ManosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora