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ALLISON DAVIS

Me levanté por el ruido en la planta baja. Mire mi teléfono 1:37pm y volví a ver el mensaje que dejó Zayn anoche, agité mi cabeza y me levanta para refrescarme la cara, lave mis dientes y baje a ver qué era todo ese ruido.

— Ya se despertó la niña de la casa — era la voz de Zayn que me vio mientras ayudaba a mi madre a mover unos muebles, le saque la lengua como niña pequeña.

— Buenos días, amor — dijo mi madre. Seguido pase a saludar a Alexis que estaba comiendo en la mesa.

— ¿Comerás ahora? — me pregunta

— No, más tarde ¿por qué?

— Para que me acompañaras a buscar unas cosas a mi casa, ¿puedes?

— Si, claro — le sonreí. Ella se levanta y sube. Zayn se acerca a mi

— ¿Vendrás a ayudar o te quedarás ahí? — el sudor empapo todo su cabello y la camiseta negra que traía.

— No puedes con nada de veras — me levanté y fui a ayudar un poco. Después de veinte mini no pude seguir y tuve que sentarme.

— De veras que no puedes con nada — me repite Zayn burlándose de mi.

— Púdrete — le enseñe el dedo mayor. Subí a tomar una ducha para acompañar a Alexis.

Todo parece seguir normal entre Zayn y yo, lo que me pone aún más nerviosa. Me cambie y baje.

— Vamos. ¡Mamá venimos en un rato! — grite para que me escuchase, de inmediato Zayn baja corriendo las escaleras

— ¿A dónde van? — pregunta exhausto, Alexis ríe y dice

— A mi casa

— Ah, pensé que saldrían a comer algo. Váyanse — da la vuelta y va a la cocina, Alexis me mira

— Iremos por unas bebidas después de ahí — dice, no sé qué trama, pero no me gusta. Zayn presta atención nuevamente

— Las llevaré — al menos no tendremos que caminar y perfectamente cabíamos los tres en la moto.

Una semana más tarde

Hoy me desperté con menos ganas que nunca. Era mi cumpleaños diecinueve. Siempre he odiado este día en lo absoluto. Papá se fue justo el día que cumplí catorce así que no ha sido un buen recuerdo para mi. En fin, siempre Alexis me celebraba algo y creo que este año no va a ser la excepción.

Mamá lo ha llevado bien pero tampoco es que le guste celebrar cumpleaños igual que a mí, ella dice que es una pérdida de tiempo. Aunque aquí entre nos me siento bien cuando Alexis me celebra. Tome mi laptop para poder seguir buscando anuncios de trabajos, ya tenía experiencia en algunas cosas que había practicado antes, necesito ahorrar para poder ayudar a mamá y claro, prestarle dinero a Zayn. Encontré uno como niñera, pero a decir verdad es muy cliché, ¿qué?, ¿me enamoraré del hermano mayor? Ja.

— Allison, Alexis dice que bajé — dice mamá recostada en el marco de la puerta, lo dice algo cansada, le sonreí y se marchó. Pero antes encontré el anuncio perfecto, Marketing, trabajaría desde casa y algunas veces solo tendría que ir presencial, además era algo que me encanta y se acerca a lo que estoy estudiando. Me pagarán dos mil dólares mensuales, claro, con anterior experiencia, es el ideal. En verdad ayudar a mamá ya no puede con tantos gastos y si puedo ayudar lo haré.

— ¡Allison! — esa voz chillona me rompió los tímpanos

— ¡Voy! — cerré mi laptop y me dispuse a refrescarme el rostro, parecía muerta viviente. Antes de bajar del todo pude ver en la mesa un desayuno. — Esto es broma — dije burlándome con una sonrisa. Alexis sonreí sin parar, al lado de ella se encontraba Zayn como una momia, no se movía ni daba la más mínima expresión. Mamá se acerca a mi para tomarme de la muñeca y terminar de bajar, no me había dado cuenta que me detuve a analizarlos.

El Huésped [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora