9.- "¿Escape?"

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Era de tarde y había mucha humedad en el ambiente, nuestra decisión de escapar en ése preciso instante fué apresurada y muy arriesgada, pero no me importó, solo quería irme de ahí, quería sacarnos a ambos de ése lugar, el campamento era algo grande, estaba cercado y habían varios vagones y campañas, nos escabullimos entre las sombras con mucho cuidado, el sol se estaba poniendo, oscureciendo así la zona, eso nos ayudaba, pues teníamos que salir de ahí antes de que se enteraran de nuestra ausencia, claramente nunca jamás volveríamos a tener otra oportunidad como ésta.

Kon parecía seguir algo confundido pero por su mirada pude comprender que estaría dispuesto a ayudarme, lo cual me sirvió bastante, pues en un punto crucial habían dos guardias vigilando, aquél cruce era necesario para llegar a la reja más alejada y desprotegida, así que nos pusimos de acuerdo e ideamos un pequeño plan, tiramos una piedra para que se acercaran a nuestra localización, al estar ellos ahí entre los dos nos abalanzamos sobre ellos golpeándolos en la nuca y durmiéndolos con una de mis famosas palmadas, al estar el área despejada, con mucho cuidamos trepamos la reja, ésta por supuesto tenía alambres de púas encima, así que con la mayor precaución retiré aquellas púas, aunque fuera cuidadoso no pide evitar llevarme algunas heridas, pero no me importó pues la libertad estaba cerca y podía sentir su llamado, ayudé a Kon a subir, esa fue la parte más complicada pues él era realmente torpe y no sabía escalar, aquello realmente nos quitó mucho tiempo, el tiempo suficiente como para que se enteraran de nuestra huída, pero nosotros ya teníamos la ventaja, pues ya estábamos fuera del lugar.

Corrimos y corrimos tan rápido como podíamos los dos, realmente en nuestro estado físico actual no era recomendable exigir demasiado a nuestro organismo, aquellos días casi en ayunas claramente habían surtido efecto en ambos, estábamos cansados pero eso no nos impedía seguir corriendo, podía oír a la distancia el sonido de los perros que venían detrás de nosotros rastreándonos, era algo inquietante, la adrenalina volvió a apoderarse de mí ser y nos dió otra ventaja, parecía ser que Kon también experimentaba aquella sensación.

Seguimos por un rato, aquellos canes se escuchaban más y más cerca casi pisándonos los talones... Hasta que llegamos a un callejón sin salida, lo que nos privaba de nuestra libertad ahora, era una gigantesca cascada, no había salida.

Otra vez pude sentir aquello que me paralizó aquella oscura noche, miedo e impotencia a saber que nunca sería libre de nuevo, seguido de eso llegaron aquellos sujetos en sus abarrotados carruajes y su líder increíblemente rojo de ira bajó de el transporte y se dirigió hacía nosotros.

-¡¡¡¡¡¿A dónde diablos creen que van?!!!!!- se acercó más y más con un arma real.

Ambos nos quedamos atentos a sus movimientos pensando en cómo podríamos salir de esa situación si tal vez era posible.

Entonces el sujeto armado me dió un fuerte golpe con el arma y me levantó por el cuello, el golpe me aturdió bastante fuerte dejándome mareado.

-¡¡¡¡¡Ven aquí pequeña perra, NECESITO DE TU SANGRE PARA VOLVERME RICO!!!!!

Kon se abalanzó sobre aquél hombre mordiéndole fuertemente la mano con la que sujetaba a Nobi, haciendo que aquél hombre lo soltara bruscamente en el suelo, no tardó mucho en liberarse del agarre de aquél chico golpeándole el abdomen fuertemente tirándolo al suelo, se veía mucho más enojado ahora, tanto así que absolutamente nadie de su propio grupo se atrevido a asercarse ni para ayudarle o para detenerlo, el era realmente un "monstruo".

Entonces el sujeto volvió a agarrar su arma apuntando al jóven tendido en el piso.

-Tu no me sirves mocoso, de hecho tenía pensado hace mucho tiempo terminar contigo, no tengo temperamento para los pequeños come mierdas como tú.

El hombre cargó el arma y justamente cuando estaba a punto de disparar, Nobi se levantó torpemente, se quitó la capucha, revelando sus flameantes llamas y sacando a relucir sus verdaderas características, arrojó una llameante ola de poder a aquél ser humano que más bien parecía ser una bestia.

Todos se quedaron boquiabiertos sin mover un solo músculo, y Kon solo se le quedó viendo, con una mirada en blanco, no sabía cómo reaccionar, no sabía en qué pensar ahora mismo tenía un desorden en su cabeza, pero antes de que pudiera formular algo para decir o en cómo actuar, el sujeto casi derrotado ordenó atraparlos, al estar completamente rodeados y Nobi seguir aturdido por el fuerte golpe, decidió hacer una locura, tomó a Kon de la mano casi a la fuerza y agarrándose de un tronco que iba flotando en el extenso río que dirigía al inmenso vacío, calleron por la cascada, haciendo que el enemigo desconociera el paradero de ambos, volviéndolos libres "una vez más".











*Aquí no hay imagen, me dió hueva hacerla xd pero créanme que en el siguiente episodio si va a haber téganme paciencia ;m;*

*Pero bueno hasta la próxima*

Un Mundo De BestiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora