e r e s t u || Hwang Hyunjin

•one•

Mi alarma sonó por toda la habitación logrando hacerme despertar, me levanté de mi cama con algo de esfuerzo y me pare, me cambie de ropa y salí de la habitación.

–Buen día _____– Al salir me encontré con mi compañero de vida ordenando la casa como siempre, es muy, muy ordenado.

–Buen día Lino– Fui hasta el y lo abraze depositando un beso en su mejilla.

–Ya te vas verdad?– Me miro y yo asentí tomando mi rompevientos colgado en la puerta mientras me ponía mis tenis –Ve con cuidado, si puedes, no olvides traer el alimento para Soonie, Doongie y Dori–

–Claro, regreso en una hora– Salí de casa con mi botella de agua y comencé a correr, me gusta mucho correr, y era un hábito el correr una hora por la mañana, suelo recorrer el puente más cercano a casa, ya tengo una ruta en realidad. Solo no debo olvidar la comida para los gatos o Minho me matará.

Vivo con Minho desde hace 4 años, es la persona que más quiero en este mundo y muchas personas se sorprenden por eso, digamos que ambos somos algo.. especiales? Bueno, en realidad somos muy diferentes según otras personas. Minho suele ser bastante reservado y no tiene paredes ni silenciadores para decir lo que opina, cosa que cuando recién lo conocía me molestaba, porque en situaciones que necesitaba la verdad siempre recurría a Minho y no me gustaba que me dijera la verdad aunque era lo que necesitaba.
Conozco a Minho desde hace 10 años o más, nuestras madres eran inseparables, aunque en realidad nunca nos presentaron, nos conocimos en la escuela de niños cuando regrese de Alemania, nuestras madres lo ven como "destino romántico" pero para nosotros no es nada romántico, solo una buena coincidencia, con el pasar del tiempo y sin darnos cuenta nos hicimos más cercanos, no nos dimos cuenta, en realidad no nos soportabamos. Estar juntos era pelea segura pero después nos conocimos y llegamos a lo que somos ahora, Minho para mí es como mi compañero de vida, es como un hermano, un mejor amigo, una madre, un padre, un abuelo (tiene actitudes de abuelo), lo es todo para mí.

Salí de mis pensamientos mañaneros que se resumían en ponerme nostálgica al recordar cosas del pasado y al darme cuenta ya llevaba más de 30 minutos corriendo. Llegué a la veterinaria a la que llevamos a los tres gatos y compré el alimento para ellos, salí de la veterinaria, tome agua, metí en alimento en la pequeña mochila que llevaba y seguí corriendo lo que quedaba regreso a casa terminando con mi hora.

–Estoy en casa– Abrí la puerta del departamento y dejé mis tenis en el suelo –Traje la comida–

–Genial, no la olvidaste– Minho se acerco a mí, le di la comida y la sirvió en cantidades iguales a los tres gatos, quieres comieron enseguida.

–Ya desayunaste?– Mire a mi amigo quien negó.

–Te estaba esperando–

–Bien– Sonreí. Rara vez tenía detalles como esos.

Me metí a bañar mientras Lino preparaba el desayuno y después de cambiarme desayunamos juntos, el día inicio perfectamente.