ROMPIENDO TUS REGLAS

CAPÍTULO 12 "VETE"

Vi a Gael sangrando demasiado y me asuste, me acerque para ayudarlo, pero sé hizo a un lado y me miró con demasiada irá.
Se levantó y entró a la escuela.
Sono la campana de inicio de clases y no sabía, si ir con Gael, entrar a clases, o buscar a Damián.

-¿Entraras a clases?. -Preguntó Melissa.

-No lo sé... -Dije dudosa. -Ya se, entrá por mí y entrega mi proyecto, por favor.

-Claro, le inventare una excusa a la maestra, pero ¿A dónde iras?. -Preguntó nerviosa.

-No se... Pensaré bien con quien de los dos ir.

-Suerte.

Melissa se fue corriendo y yo pensé a donde y más bien, con quien irme.

Narra Gael
Entre al baño y mientras me lavaba el rostro, escuché a alguien entrar y cerrar con seguro la puerta. Vi de reojo a una chica, pero no me gire y seguí lavandome.

-Esta vez si te dieron duro. -Dijo la chica al lado mío.

Me gire y vi que la chica era, nada más ni nada menos que Cynthia, me sorprendió verla, pero no le dí importancia.

-¿Qué quieres?. -Pregunté fastidiado.

-Darte respuestas al comportamiento de tu novia.

-Claro. ¿Tú que vas a saber?.

-Más que tú, y eso que eres su novio...

-Ya largate. -Dije molesto.

-Okey. Entonces quedate con la duda de con quien se acuesta Elisa después de clases.

Al oír eso me gire y la vi que se iba, corrí a ella y le cerré la puerta para impedir que se fuera.

-¿Quién es el bastardo?. -Pregunté en voz baja y amenazante.

-Te lo diré. Pero debemos vengarnos de ambos.

-¿Debemos?. -Frunci el ceño.

-Creeme, a mí me interesa acabar con ellos, al igual que a ti.

Narra Damián
Enrique me dejó en mi departamento y le pedí que se fuera.
Me quedé solo, y me dolía horrible el cuerpo. 
Fui al refrigerador y saqué una bolsa de hielo, me recosté en el sofa y puse el hielo en mi rostro.

Me relaje un poco y en eso escuché que alguien tocó la puerta. Me moleste y decidí no ir a abrir, pero insistieron.

-¡Váyanse!. -Grite molesto.

Después de gritar, tocaron más fuerte y me enfureció más, y no tuve más alternativa que abrir.
Al abrir vi a Elisa y rode los ojos. No tenía planeado verla y menos que viniera a tener sexo.
Entre y me volví a recostar en el sofa, tape mi cara con mi antebrazo y no la voltee a ver.

-¿Cómo te sientes?. -Pregunto mientras se acercaba a mí.

-Si vienes a tener sexo, no estoy de humor. Me haría bien que te fueras.

-No vine a follar, vine a ver como estas y a ayudarte.

-No necesito de tu ayuda. Necesito que te vayas. -Dije en voz alta.

Elisa me ignoró y se puso de rodilla a mi lado. Vi de reojo que sacó alcohol, algodón y más cosas de primeros auxilio de su bolsa.

-Siéntate, te tengo que desinfectar la herida. -Dijo sería.

No respondí, solo obedecí y mire como tomaba alcohol en algodón y comenzó a limpiar mis heridas.
No hablamos nada y solo deje que terminará.

Acabó de hacerlo y guardo sus cosas.

-Sabés... Fue lindo que me defendieras de Gael. -Dijo con una sonrisa en su rostro.

-¿En serio crees que te defendí?. -Frunci el ceño. -Me defendí a mí, no iba a permitir que un idiota me pusiera una mano encima.

Elisa se molesto y se puso de pie, seguido de eso me dio un golpe en el ojo, me dolió horrible y me levante de golpe.

-¡¿Qué demonios te pasa?!. -Grite molesto.

La miré fijamente y no se intimido en lo más mínimo.

-Una vez te lo dije, y te lo vuelvo a repetir. No te tengo miedo. -Dijo sin quitarme la mirada de encima.

-Bien, entonces, largate y no regreses más. -Dije molesto.

-¿Estas seguro de lo que estas diciendo?. -Pregunto con la voz cortada.

-Claro. Aquí no pasa nada si te vas.

No dijo más y tomó sus cosas y se fue. Cerró la puerta de un golpe y supuse que se había molestado más de lo que yo creí.
Me volví a recostar en el sofa y me quedé dormido.

Narra Elisa
Salí rápido del departamento de Damián, creí que saldria a buscarme, pero no fue así.