capítulo 8

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Harry respira, no se preocupa demasiado por lo que pueda pensar su madre de él y lo que sea que lo está atormentando y de lo que ella no tiene idea, y se dedica a buscar ropa para ponerse y poder salir. Considera que es una buena idea la que ha dado su abuela, especialmente porque él tampoco tiene demasiadas ganas de comer puré de papa y porque cree que la distracción de una muchedumbre considerada podría hacerle bien para no pensar tanto en sus sueños y en Louis, de quien gracias al cielo no ha vuelto a saber nada desde la fiesta porque tal vez, y quizás, ha estado creando todas estas excusas para no verse con ninguno de los tres chicos cada vez que lo han invitado a juntarse con ellos.

No han sido cosas oficiales, nada demasiado ostentoso, salidas al parque cercano o al centro comercial que no tienen tanta importancia y que no le da porque de todas formas no tiene cabeza para ello. Harry siempre se disculpa por el rechazo, y cada uno de ellos le asegura que no pasa nada, que para la próxima será, y continúan hablando como si nada aun cuando Harry sabe durar horas sin contestar o es increíblemente inconsistente manteniendo la conversación.

No es su intención ser de esa manera, jura por el cielo que en serio no quiere ser así, pero es algo que se le escapa de las manos y tiene que estar constantemente recordándoselo para no sufrir ningún tipo de ataque de ansiedad, el cual se siente cada vez más cerca y en serio espera que no suceda por culpa de esta miserable situación que todavía no termina de comprender.

Se pasa la lengua por los labios deseando por milésima vez que las cosas fueran distintas y se dedica a buscar la ropa que se pondrá para salir y su prenda interior, tan solo para dirigirse al baño y cerrar la puerta con rapidez antes de que a Gary se le ocurra querer hacerle compañía. Se desviste en silencio y sin fijarse demasiado en sus cicatrices, se mete en la ducha y enciende el grifo, dejando que la lluvia artificial le caiga en la cabeza, obligándolo a cerrar los ojos, cosa que no resulta demasiado bien porque tiene las imágenes de sus sueños detrás de los párpados.

Se echa hacia atrás, lejos del agua, y se pasa las manos por los rizos para apartárselos de la cara y poder respirar. El corazón empieza a latirle en alguna parte del cuello y le toma todo un segundo el estabilizarse mucho antes de siquiera llegar a alterarse de verdad, y no lo comprende, no entiende por qué le pasa esto ahora, porque le sucede siquiera cuando ha tomado sus pastillas a la hora que le corresponde y han debido hacer efecto justo antes de caer dormido.

Debería de sentirse tranquilo, aliviado incluso, sus medicamentos son para hacerlo sentir mejor y ahora mismo, y últimamente, se ha estado percibiendo a sí mismo como todo lo contrario, como antes de haber recibido ayuda, como cuando estaba terriblemente sólo en su situación y no veía ninguna salida diferente a la constantemente estuvo en su mente.

Respira como puede, y logra hacerlo sin que le tiemble el cuerpo, y se dice a sí mismo que tiene que tranquilizarse porque debe ir a cenar con su mamá y su abuela y tener una vida normal porque es lo único que le queda.

Así que se dedica a ducharse, y no piensa en absoluto, y logra asear su cuerpo y darse un shampoo en el cabello, y termina en un santiamén que resulta en un alivio porque al final ha sido un buen baño. Se seca el cuerpo tan pronto cierra el grifo y agarra su toalla, se cepilla los dientes cuando la siesta le ha dejado un mal sabor en la lengua y se va rápidamente a su habitación en donde se viste y se termina de arreglar.

Se distrae con su teléfono justo cuando se sube los pantalones, y ve el mensaje de Niall en donde le envía esta imagen que le parece increíblemente divertida y llega a reírse en silencio por ella. Le responde con emoticones que representan la gracia que le hace y cuando ve que no le contesta dentro de dos minutos se sale de la aplicación de mensajería y termina de vestirse.

Queda listo en un instante, se guarda el móvil y la billetera prácticamente vacía y sale del cuarto para bajar las escaleras después de apagar la luz y el abanico. Se reúne con su familia en la sala, el par de mujeres se han cambiado de ropa y están igual de listas para marchar.

Misted ✦ larry au! | ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora