capítulo 54

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—Ajá... ¿Y cómo se supone que hago eso? ¿Solo sale o cómo?—siguió preguntando, no sabía que lo tenía y menos iba a saber cómo activarlo.

—Bueno, por lo que se, primero tienes que querer usarlo y... emplear un tono en especifico— respondió usando aquel tono, un tono que iba entre la sugerencia y la burla, un tono que podría considerarse hasta seductor, logrando un pequeño sonrojo de parte de Thomas.

—Okey, eso suena fácil—trató de no enfocarse mucho en su propia reacción— pero... ¿No debería practicar o algo? ¿Qué pasa si lo intento y no funciona?—además, no creía haber llegado a hablar de esa forma alguna vez, sería raro hacerlo.

—Mmm...podrías practicarlo conmigo—acabó proponiendo mientras una pequeña sonrisa se asomaba por sus labios.

—No, no podría, no quiero usar mis... Poderes en ti— se detuvo un momento antes de decir "poderes", todavía le era extraño creer que los tenia.

—Hey, esta bien, es solo para practicar, además, es un ambiente controlado— contestó Connor algo nervioso, pero notablemente feliz de que Tom pensara en él —para romper el encanto, solo tienes que romper el contacto visual, en ese momento, será como si nada hubiese pasado, claro, a excepción de los cambios hechos en el subconsciente del afectado.—apoyó su mano sobre el cuello contrario, dándole una sensación de seguridad y confort casi inmediato.

—De acuerdo— dijo con un tono aún un poco dudoso, antes de mirar a los ojos a su pareja e intentar encantarlo —oye, estaba pensando y... ¿Qué te parece ir a una cita? cuando acabemos esto estarás libre ¿No?—fue la primera idea que tuvo.

A pesar de que era la primera vez que lo intentaba, le resultó bastante sencillo, como si lo hubiese hecho toda la vida, algo así como una segunda naturaleza que había estado esperando a poder florecer y mostrarse como realmente era.

Creía que no había funcionado, o eso hasta que vio como el ojo de Connor empezaba a cambiar de a poco pasando por el verde oscuro y acabando en ese característico color rosado que brillaba sobre el celeste, había funcionado, lo sentía y podía verlo en las reacciones de Connor.

Tom sonrió satisfecho antes de romper el contacto visual, sabía que había funcionado puesto que Connor normalmente hubiese respondido con alguna insinuación antes de aceptar, pero esta vez, solo se había limitado a aceptar.

—Ammm... ¿Qué...acaba de pasar?— preguntó Connor mientras parpadeaba, como si intentase volver a la realidad después de tener un sueño excepcionalmente bueno.

—Nada, solo me debes una cita— respondió sonriente antes de darle un beso en la mejilla.

Connor volvió a sonreír levemente una vez pasado el aturdimiento y le devolvió el beso esta vez en los labios, un beso lento y algo duradero pero sin segundas intenciones.

Acabaron soltando una pequeña risa y volvieron a lo suyo.

Decidieron que iban a encantar a Cami en cuanto salieran, así que repasaron su plan una vez más antes de tomar los bolsos y salir, sabían que se encontrarían a la mexicana en el camino, ya que siempre iba a despedirse de ellos cuando iban de viaje.

Como era bastante temprano, no había nadie mas que ellos y Camila en la recepción, cosa que facilitó mucho su trabajo.

—Entonces... ¿Hasta mañana?— se despidió algo desconfiada, a lo que Tom dio un respiro antes de contestarle usando el encanto.

—¿Sabes?— se tomó un segundo para tomar algo de aire y repasar sus palabras— creo que deberías dejar de desconfiar y preguntar tanto, no es asunto tuyo después de todo, como sea, hasta mañana— desde que pronuncio las primeras palabras, era claro que había funcionado.

—Si, tienes razón, no sé porque me meto, no es mi asunto ¿No?— la manera en la que su vista se había perdido y dejado su chispa de intensidad y desconfianza junto con la tonta sonrisa que adornaban su cara, denotaban que no estaba en si, que no volvería a meterse.

La pareja agradeció para sus adentros eso, Thomas cortó el contacto visual y terminaron por irse de ahí.

fueron al aeropuerto, y al pasar por la seguridad, como era costumbre ya, solo tuvieron que mostrar sus identificaciones antes de ser llevados a donde se encontraba el jet en el que viajarían.

No tardaron mucho en llegar a Svalbard, una vez ahí fueron casi directamente a casa del tío de Connor, Eliot, por suerte no se toparon con ningún oso polar adulto, solo uno bebe al cual Connor quiso acariciar.

Por primera vez en el tiempo que llevaban juntos, Tom no tardó tanto en lograr que Connor dejara al animal y siguiera con su camino, cosa que le hizo notar cuan emocionado estaba el de ojo cambiante.

Al llegar, Eliot los recibió con una pequeña sonrisa, él tendía a ser serio, así que no fue difícil imaginar que estaba feliz por ellos.

—Hola chicos— los saludo en cuanto llegaron a la casa —¿Quieren chocolate caliente o algo?—

Ambos aceptaron para entrar en calor, se notaba que Connor y Eliot querían hablar, ya que no se veían en persona hace un tiempo, bastante tiempo en realidad, pero como querían hacer ese viaje rápido, no podían darse esos lujos, no por ahora al menos.

Lamentablemente, Eliot no podría ayudarlos a conseguir el dichoso cristal debido a que era alérgico a este, por lo cual, solo les indico donde conseguirlo y les dijo que contaban con el si tenían algún problema con alguna otra cosa.

Para su suerte, no tuvieron problemas al conseguir el cristal, además de que los científicos que vivían en la zona todavía no eran conscientes del poder de este, probablemente gracias a Eliot, así que podrían llevárselo y a nadie le importaría realmente.

Justo cuando Iban camino al aeropuerto, recibieron un mensaje de Claudia, la prima de Connor, avisándoles que ya tenían los dos materiales faltantes, de modo que solo tenían que ir a buscarlos.

Durante el viaje, Connor no pudo dejar de mirar a su pareja, pensando que después de esto podrían estar juntos para siempre, no tendría que preocuparse de un día despertar y no ver a su amado albino a su lado.

Y sonrió, sonrió como nunca porque sabía que ya no habría problemas, no tendría que preocuparse porque Tom envejeciera mientras él se quedaba igual, no tendría que pensar en una mañana sin sus besos, ni una noche sin sus brazos rodeándolo.

White Demon (Cancelada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora