Otra vez juntos

362 28 0
                                    

Era el, era Carl.

No sabía que hacer, estaba paralizada viéndolo, sentía que me iba a desmayar. Derrepente una corriente eléctrica se apodera de mi cuerpo haciendo que reaccionará y corriera hasta él, lo abracé, era como en mi sueño, sentí sus brazos rodiarme la cimtura, se inclinó y me agarró las piernas elevandome. En ese momento sentí como si mi alma volviera a mi cuerpo, sentí demasiadas cosas inexplicables.

Pero como podía estar vivo?

- Esto es realmente bonito.- Dijo en un hilo de voz Maggie. Haciendome acordar nuestro primer beso es esa pequeña iglesia.

- Esto no es un sueño verdad?.- Dije todavía con el miedo. Carl negó en mi hombro.

- Pero, como?.- Dijo Glenn sin entender como había sobrevivido. Yo tampoco entendía.

- Te extrañé.- Susurró Carl en mi oído.- No sabes cuanto.

- Yo también te extrañé amor.- Dije con toda la felicidad del mundo. Lo abracé más fuerte, sentí el calor de su cuerpo contra el mío, ese calor que ya desde hace tiempo necesitaba.

Pasaron unos minutos, nos tranquilizamos todos y contamos que fue lo que pasó exactamente después de que nos separaramos.

- Y así fue como llegamos.- Terminó de contar Rosita nuestra historia.

- Les tengo un regalo.- Dije soltandome de los brazos de Carl para buscar mi mochila donde estaban el montón de chocolates que guardé.- Todos suyos.- Dije volteando la mochila en la cama.- Y para la mamá gansa le tengo esto.- Dije secando el chocolate con maní. Vi como brillaron los ojos de Rick al ver el gran chocolate que le estaba dando.

- Gracias Ígor.- Dijo Rick. Lo miré raro al oir el apodo de Daryl.- Te queda bien.- Dijo con gracia mirando el sombrero encima de mi cabeza.

- Te queda mejor que a mi.- Dijo Carl.

- Toma.- Dije dándoselo.

- No, ahora es tuyo.- Dijo Carl.

- Carl Grimes no es Carl Grimes sin el sombrero de Sheriff.- Dije poniéndoselo.

- Maya y Camila?.- Preguntó Michonne.

- No sé, pensé que estaban con ustedes.- Dije sin interés.

- No vieron a Gabriel?.- Preguntó Sasha. Negamos.

- Y ahora que?.- Preguntó Tara.- Digo, a donde vamos?.

- Vamos a recuperar lo que es nuestro.- Dijo Rick. Todos lo miramos.- Recuperemos Alexandria.

- Así será, la horda no pudo haberse quedado ahí durante estas 2 semanas que pasaron.- Dijo Abraham.

- En todo caso de que la horda siga ahí necesitaríamos de la gente del santuario para acabar con ella.- Dijo Carol.

- Igual somos pocos.- Dije.- Hoy hablaré en la noche con mi padre y veré lo que pueda hacer.

- Esta bien.- Dijo Daryl.

Habíamos pasado todo el día hablando, me sentía de nuevo completa, sentí que estaba en mi hogar, no sentía dolor ni vacío. A pesar de que Alexandria hubiese caído, estábamos feliz de volver a estar juntos, otra vez.

- Amor, vamos a caminar.- Dijo Carl agarrandome la mano y saliendo de el departamento por decirlo así.

Se paró enfrente mío y me besó, era un beso que demostraba muchas cosas, amor, ternura y poco a poco deseo. Me separé al sentir la mano de Carl bajando lentamente por mi espalda baja.

- Amor, estamos en medio de un pasillo.- Dije riéndome.

- Lo siento.- Dijo Carl sonrojado.- Es incómodo besarte en frente de todos ellos.- Me volvió a besar. Me separé otra vez.

- Carl, comiste estos días?.- Pregunté preocupada por el estado en cuál estaba. Él miró al piso y negó. Pegué nuestras frentes.

- Es que... Todo era tan difícil, pensé que te había perdido y mi cabeza me estaba recordando siempre que no cumplí mi promesa de cuidarte.- Dijo él con los ojos cerrados. Lo besé en la frente y lo abracé.

- Siempre me cuidas Carl y te recuerdo que me puedo cuidar yo solita.- Dije.

- Eso lo sé, se que eres fuerte pero igual quiero mantenerte sana y salva.- Abrió sus hermosos ojos azules que tanto extrañaba.

- Te amo y gracias por eso.- Dije. Escuché un silbido muy particular y muy conocido. Seguí la melodía de ese silbido.

- Toda una Salvadora.- Dijo mi padre. Sonreí ante eso.- Tenemos que hablar pequeña.

- Si señor, nos vemos más tarde.- Dije despidiendome de Carl. Él me agarró del brazo y me acercó a el.

- Yo también te amo.- Me susurró al oído.

- Chico, 2 metros de distancia.- Dijo mi padre.

- Si señor.- Dijo Carl con gracia y entró al departamento.

- De que querías hablar?.- Pregunté.

- Vamos a fuera.- Dijo encaminandose a las escaleras. Bajamos y salimos del santuario.- Toma.- Dijo dándome un papel. Lo abrí y era una foto, una linda foto familiar dónde se encontraba mi padre y mi madre embarazada. Miré a mi padre y el tenía una sonrisa leve.- Ves esa estrella?.- Preguntó señalando una estrella, era la que más brillaba.

- Si, que tiene?.- Pregunté con curiosidad.

- Siempre he pensado que esa es tu madre, la estrella que más brilla, hasta cuando ella estaba viva pensaba eso.- Dijo con melancolía.- Esa foto la saqué en una consulta para ver si ibas a ser niña o niño. Ahora es tuya.

- Gracias papá.- Dije abrazandolo.- Se que mi madre estaría tan feliz de volver a verte.

- Si.- Dijo en susurro.

- Papá quería preguntarte algo importante.- Dije ganandome su atención.- Queremos recuperar Alexandia, pero hay una posiblidad que este todavía la horda, claramente no toda pero si una alta cantidad.- Hice una pausa.- Quería preguntar si nos ayudarías a acabar con ellos.- Terminé de decir con miedo a ser rechazada.

- Necesitaremos armas, muchas balas.- Dijo pensándolo.

- En Alexandria teníamos una armería, si llegamos a ella podemos acabarlos, necesitamos gente.- Dije.

- Conozco a varias comunidades.- Dijo. Lo miré sorprendida.- Tal vez Hilltop y el Reino puedan ayudar con gente.- Me quedé paralizada al escuchar el nombre "Hilltop".- Conozco otra comunidad que puede ayudar con las armas.- Hizo una pausa.- Si, les ayudaremos.- Terminó de decir.

"Otra vez"

Y fue el peor error que cometí (Carl Grimes Y Tu) 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora