Capítulo 34

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La vida de los vengadores cada vez era más caótica, y ahora tenían que sumarle los problemas internos. Todos se encontraban en la sala del complejo, mientras escuchaban la imparable discusión entre Sam y el coronel Rhodes. Gaia simplemente cerraba los ojos con cansancio, tanto desastre entre ellos la estaba mareando.

-El Secretario Ross ganó la medalla de honor del congreso, es una más de las que tienes, Sam- dijo el coronel.

-Bien, digamos que aceptamos, ¿Cuánto tiempo crees que tardaran en estar vigilándonos como si fuéramos unos criminales?- preguntó Falcon.

-Por favor ya cállense- se quejó la ojiazul, llamando la atención de ambos- en realidad no importa cuantas medallas tenga-

-¿Disculpa?- preguntó el coronel, claramente molesto por las palabras de la ojiazul.

-¿De qué sirven las medallas si lo que haces está mal?-preguntó la joven.

-Las medallas se ganan con buen mérito- espetó el moreno.

-Dígame coronel, ¿Cuántas medallas tenía el Sargento maestre?- el filo en sus palabras enojó a Rhodes, quien no contestó- después de todo lo que hemos visto, ¿en serio creen que es buena idea ponernos en manos del gobierno?-

-Gaia tiene razón- mencionó Sam- los gobiernos tienen intereses propios, ¿y si en algún momento intentan anteponer sus deseos a algo que realmente necesite nuestra atención?-

-Pero creo que estamos de acuerdo en que hay personas que necesitan supervisión... o que necesitamos- comentó Banner.

-Quienes deberían estar en supervisión son los mismos gobiernos, ¿Cuántas guerras no han empezado solo por creer merecer la gloria?- sentenció la joven.

-Gaia, lo que estás diciendo es demasiado peligroso- se quejó el coronel.

-¿A caso me equivoco?- preguntó con seriedad.

-Tony, me extraña que aun no hayas dicho nada- mencionó Natasha, intentando alejar el conflicto entre los vengadores.

-Es porque ya decidió- murmuró Steve.

-Me conoces muy bien- respondió el millonario, quien se dirigió a la cocina a servirse un poco de café- tengo jaqueca, y ninguno de ustedes ayuda- murmuró, para después mostrar una fotografía- él es Charles Spencer... estudió ingeniería, con un trabajo tranquilo. Pero recibió un contrato interesante, pero primero prefirió irse de voluntario, adivinen donde... Sokovia-sentenció- y nosotros le echamos encima un edificio entero-

Los presentes apartaron la mirada ante las crudas palabras del millonario, que para ese punto se mostraba más que molesto. Gaia no entendía a qué iba todo ese discurso, por lo que nuevamente dejó que su poder esparcirse, encontrando la raíz de todo, haciéndola enojar.

-Necesitamos que nos controlen- mencionó Tony- no importa que se necesite, entraré en ello. Si no dejamos limitaciones después será difícil distinguirnos de los malos-

-Tony, si muere alguien a tu cargo no te rindes- mencionó el capitán.

-Nadie se ha rendido-

-Lo hacemos si no nos responsabilizamos de nuestros actos, y este documento solo transfiere la culpa- comentó Steve, notándose realmente enojado.

-Steve, eso es demasiado arrogante- comentó el coronel- son las naciones unidas, no SHIELD o HYDRA-

-Gaia ya lo ha dicho, ellos tienen motivaciones personales que llegan a alterarse- Steve estaba completamente de acuerdo con su novia, y eso la hacía sentir tranquila.

Mystic: Angel FallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora