Capítulo 34

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Narra Mariam.

Hoy decidí salir de esa habitación que me asfixia. Si me sigo quedando encerrada en esas cuatro paredes me volveré loca, mi recuperación ha sido muy buena, ya puedo caminar por si sola, pero aun me canso y necesito la andadera para descansar, lo bueno es que hay una en mi cuarto, así que emprendo mi camino hacia el jardín que vi desde mi ventana.

Relamnete no se como llegué aquí, pero es agradable sentir la brisa de la mañana, el aroma de las flores, así que tomo asiento en una de las bancas recibiendo los rayos del sol. En estos días, han pasado muchas cosas. Daniel no ha venido a verme, Robert tampoco y mucho menos Jack. Aún no puedo creer que es mi hermano biológico y que gracias a él estoy aquí aún en este mundo.

Me pierdo en mis pensamiento. Sigo pensando en lo que él doctor John me dijo ayer, realmente nunca imagine encontrar a mi verdadera familia, yo jamás pensé que ellos me estuvieran buscando. Todo lo que escuché ayer me sirvió, pues gracias a eso, recupere la mayoría de mis recuerdos. Suspiro creo que la vida me está dando una oportunidad, el problema es que...
Mis pensamientos son interrumpidos cuando escucho la voz de una mujer.

- ¿Mariam? - escucho a la mujer y volteo a verla. Trago salíba y contengo la respiración al ver quien es. Ella al verme camina hacia mí y yo realmente no se que hacer, es ella la mujer que me trajo a este mundo, es... Es mi madre.
Ella me abraza y se sienta a un lado de mi, yo no se que decir, ni como actuar, ella parece notarlo.

- Oh lo siento, se que aún no me recuerdas, pero no lo pude evitar. - yo solo la miro, no puedo mentir sus brazos los sentí muy cálidos ¿es esto el amor de madre?
Yo solo parpadeo, no encuentro las palabras, para decirle que ya se la verdad, que ya se que ella es mi madre biológica. Intento hablar, pero un nudo se forma en mi garganta, intento aclararla hasta que puedo formular las palabras.

- yo...

- Oh, no no te preocupes yo te entiendo. - dice ella, interrumpiedome, pero yo solo niego con la cabeza y levanto mi mano para que me escuche.

- Yo... Ya se la verdad... Y la recuerdo muy bien, recuerdo casi todo. - veo como se tensa al escucharme, se lleva las manos a su rostro.

- Mariam ¿tú? - asiento con la cabeza, veo como ella empieza a llorar - Mariam yo... - la interrumpo.

- He de confesar que en un principio me sentí muy mal, pero alguien me contó toda la historia, en cierta forma eso ayudó a mis recuerdos, para que volvieran, realmente no se como vaya a ser nuestra relación después de esto, se muy bien que ustedes no me abandonaron, que me buscaron durante mucho tiempo, pero yo tengo a mi familia, tengo a mi papá, mi mamá y un hermano que me quiere mucho al igual que yo los quiero a ellos.

- No Mariam, no pienses que queremos separarte de tu familia, solo permitenos estar serca de ti, solo queremos ser parte de tu vida, no sabes la alegría que sentí cuando Jack me dijo que te había encontrado, pero esa alegría se destruyó cuando nos dijeron que estabas en coma, no podía soportar la idea de haberte encontrado y perderte de nuevo, no sabes cuanto anhele ese día, pero nunca me imagine encontarte en esas circunstancia, no sé cómo te enteraste de esto, pero quiero que sepas que entre tus dos familias te cuidamos con la esperanza de que tu despertará, me puse tan feliz cuando eso pasó, que no sabía que hacer quería correr abrazarte, besarte y decirte cuánto te quiero y cuánto esperaba este día. - yo solo la escucho, es cierto lo que ella dice, tengo dos familias, pero en este momento me falta mucho por procesar todavia. Ella me vuelve hablar, toma mis manos entre las suyas.

- Mariam, solo te pido que no nos alejes, eso no lo soportaría, te daré el tiempo que necesites, pero quiero que sepas que te amo eres mi hija, y te amo tanto como amo a tu hermano, siempre soñé con este momento y soy feliz de saber que ya sabes la verdad, nunca en mi vida me volveré a separa de ti, no de nuevo ya te perdí por muchos años, ahora solo quiero recuperar un poco de todo lo que nos perdimos. - ella no me deja hablar y me abraza. - te amo mi niña, eso nunca lo olvides. - antes de soltarme me da un beso en la frente, ella se levanta y me deja con un millón y un pensamientos en la cabeza, pude sentir sus cálido abrazo, su cálido beso.

¿Podrías Volver A Amarme?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora