Ocho meses han transcurrido desde que el tiempo comenzó a tejer un nuevo relato en la vida de Camille. Vivir su «cuento de hadas» junto a Gabriel, mientras aguardan con anhelo la llegada de su bebé, parece un sueño encantado, pero bajo la superficie...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Eso no te concierne y la verdad es que tengo mucho trabajo por hacer, ¿podrías firmar el documento? —demandó mirándome con esos ojos en los que me perdí tantas veces, los ojos que tantas noches me miraban mientras le hacía el amor.
—No has respondido a mi pregunta, Camille. —insistí mirándola a los ojos.
Sé que está nerviosa y necesito una esperanza, necesito saber si todavía hay alguna posibilidad para nosotros después de todo lo que pasó.
—¿Qué es lo quieres, Gabriel? ¿Te estás burlando de mí? Necesito que firmes el documento para poder sacar a mi hijo del país, por favor. —se puso de pie y se lo agradecí en secreto, porque me permite admirarla, se ve hermosa con su traje de trabajo y su cabello rubio suelto.
—No me estoy burlando de ti, Camille. Solo me aseguro de que puedas cuidar al bebé mientras trabajas, porque yo podría...
—¡No necesito nada de ti, Gabriel! ¿Por qué te cuesta tanto entenderlo? ¡Por favor firma el maldito papel! —demandó muy molesta.
Su actitud me dolió mucho porque quiero ayudarla, quiero estar con ella y el bebé, aunque no sea mío necesito tenerlos cerca.
—Está bien, aunque esta no será la última vez que hablemos de esto. —firmé el documento y luego me levanté.
—No, no será la última vez, porque pronto tendremos que sentarnos a hablar de nuestro divorcio. —afirmó seriamente, lo cual me sorprendió mucho, tuve que disimularlo y sonreí burlón antes de contestarle.
—Eso es lo que piensas, nos vemos luego, ángel. —sentencié y salí de la oficina, afuera encontré a los jóvenes que trabajan con ella, seguí con mi «acto» frente a ellos y me alejé.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
