Ya han pasado varios días desde que Kagome y yo llegamos aquí, a ella le tomó algo de tiempo acostumbrarse pero yo no tuve muchos problemas. La gente de la aldea ha sido muy buena, durante estos días nos hemos quedado con la anciana Kaede; como Kagome estaba herida no podía hacer nada más que descansar, en cuanto a mi, no quise quedarme sin hacer nada asi que ayude a reconstruir algunas casas e hice un poco de trabajo de campo con algunas de las mujeres de la aldea.
Por fortuna Inuyasha se ha comportado mucho más dócil desde aquel día, sigue siendo un poco distante con nosotras pero creo que es solo cuestión de tiempo para que tan siquiera tolere estar cerca nuestro.
Pasaron muchas cosas, Kagome fue secuestrada por unos bandidos que querían la perla, una cosa llevó a la otra y en un intento de recuperarla de un cuervo que se la había tragado; la perla se rompió en varios fragmentos que dejaron una estela de luz en el cielo como miles de estrellas fugaces.
Si no supiera lo que eso implicaba, definitivamente hubiese pensado que era una vista completamente hermosa, pero las cosas no eran así.
¿Mencioné el incidente con una Yokai que manipulaba cabellos?
Lastimaron a la anciana Kaede así que durante ese tiempo le ayude a sanar y a llevarla a un lugar lejos de todo ese embrollo mientras Inuyashsa buscaba a Kagome, que según él; había regresado a su país de origen.
Pero ella no habría sido capaz de irse y dejarme aquí varada, ¿Verdad?
¡Pues fue algo así!
Pero gracias a eso descubrimos que podíamos ir y venir por el pozo, así que no todo es tan malo. Además la anciana Kaede resultó ser más fuerte de lo que parece, ¡Se recuperó de sus heridas en cuestión de días!
Me la paso mas tiempo por aca asi que traje algunos de mis libros conmigo para seguir estudiando, unos cuantos botiquines, y ropa.
Últimamente he estado practicando con el arco junto con Kagome, mi puntería aún no es muy buena pero ya no es tan mala como cuando intenté dispararle a Inuyasha, me he ganado la confianza suficiente como para ir a los alrededores del bosque por mi cuenta.
''Por aquí es bastante tranquilo, es muy diferente de la ciudad. No entiendo por que Kagome se queja tanto''
Escuché unos ruidos detrás de unos arbustos, parecía que lo ocasionaba algún animal pequeño de al menos el mismo tamaño que un pájaro, me asomé con cuidado, el hecho de que una criatura sea pequeña no quiere decir que no me pueda hacer daño.
Lo que pensaba no estaba tan lejos de la realidad, parecía ser un pájaro; pero no lo era.
Partes de su piel parecían ser escamas y tenía una cola alargada que terminaba en plumas, no tengo que ser una sabionda para darme cuenta de que era un Yokai, este al verme se sobresaltó y pensé por un segundo que ma atacaría, hasta que lo vi más detenidamente.
Una de sus alas sangraba y su cola se encontraba atascada por una roca que la aplastaba desde en medio, los extraños sonidos que emitia no eran de furia, eran de dolor.
''Oh no, ¿Que hago?, el pobre está lastimado, obviamente tengo que ayudarlo...pero es un Yokai, no se si despues de liberarlo me atacara...''
Me debatía mentalmente, aun no conocia nada de esta epoca, no tenia conocimiento sobre espiritus y demonios como la anciana Kaede, así que no sabia que pasaria despues de que lo ayudara.
Pero por otro lado, es una criatura viva, no muy diferente a un perro o un gato callejero con la pata lastimada; claramente se retorcía de dolor y probablemente moriría si se quedaba aquí.
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La Chica De Túnicas Oscuras. (Koga x ___)
FanfictionLa vida da muchos giros inesperados, tu verdadero hogar puede estar en donde menos te lo esperas. Tu familia puede estar fuera de tu casa. Los demonios pueden ser mas compasivos que los humanos. Y la persona indicada a veces puede ser el que menos...