La Chica De Túnicas Oscuras. (Koga x ___)

Una ligera sospecha

—¡Vamos Kaede, ya casi comienza!

—¡Itsuki espérame!

La chica vestida de negro corría hacia el bosque con una pequeña niña detrás de ella, ambas soltaban risas juguetonas como si acabaran de hacer una gran travesura.

El cielo ya se encontraba oscuro, las estrellas brillaban y destellaban como diamantes en todo su esplendor; justo dentro de toda la arboleada, había una figura vestida de blanco y rojo.

Itsuki rio divertida —¡Que puntual!

Kaede salió desde un costado de Itsuki —¡Hermana!

Kikyo miró a la mayor con una ligera mueca de reproche, Itsuki frunció los labios en forma de puchero como respuesta.

—No puedes decir que soy impuntual— Comenzó a caminar —¡Llegué dos minutos antes!

Kikyo relajo un poco más su expresión —¿Cómo sabes que no florecerán antes?

—Porque las estudie, ¡dah!— Hizo una pausa —Además, esto solo pasa cada diez años, ¡No me lo perdería por nada en el mundo!

Las tres se adentraron más en el bosque, donde, escondida entre un montón de naturaleza, había una cueva cuya única entrada era pequeña, pero lo suficientemente grande como para que pasara una persona a la vez.

La primera en cruzar fue Itsuki, luego Kaede y al final Kikyo. Faltaba poco para la medianoche.

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Después de terminar sus actividades, ___ se había detenido a descansar en la casa de la anciana Kaede y aprovecho para seguir estudiando el libro de Itsuki.

La primera vez que había traído el cuaderno por supuesto que lo había reconocido, Itsuki siempre lo cargaba todo el tiempo así que no fue muy difícil de reconocer, por fin después de más de cincuenta años supo en donde había terminado.

—Anciana Kaede ¿Puedo hacerle una pregunta?

—¿De qué se trata?

—¿Sabe si Itsuki tenía un hermano?

Su rostro era de confusión —¿Un hermano?, nunca lo mencionó...¿Dónde escuchaste eso?

—Está en el libro— ___ se sentó a un lado de Kaede para que pudiese ver el libro también, la forma en que lo hizo y en cómo le hablaba daba la sensación de que era una niña pequeña mostrándole algo a su abuela.

El libro tenía algunas notas pequeñas en las esquinas y orillas, había varias hojas donde decía frases como 'a mi hermano le hubiese gustado' o 'a mi hermano le interesaba mucho esto', tan tenues, pasando desapercibidas si no se les prestaba atención. Si ella no tenía un hermano en realidad, debió tener algún mejor amigo a quien quisiera hasta el punto de considerarlo como tal.

—No recuerdo que mencionara a un hermano...

—Humm

—¿Por qué no le preguntas a Inuyasha?, tal vez el recuerde más cosas que yo

—Le preguntaré cuando regrese...Oh, por cierto— ___ busco entre las páginas rápidamente y se detuvo justo en una página en específico —Estas flores...'Capullos de Hada', florecen hoy ¿Cierto?

Los recuerdos abrumaron la cabeza de la anciana Kaede, se vio de nuevo como una niña pequeña e inocente que siempre corría detrás de su hermana y de su amiga que también consideraba como tal, el dibujo era tan exacto, incluso juraba que si estiraba la mano podría sacar aquella flor del papel; una sonrisa melancólica se trazó en su rostro