Paris
— ¡¿Paris quieres acompañarnos a desayunar...? ¡Paris, cubrete el trasero ahora mismo! — Dijo su madre al abrir la puerta mientras se aferra del picaporte con los ojos muy abiertos al — Dios, creo que tú ya desayunaste Paris, pero no exactamente comida, sino otra cosa —
Paris soltó un gritó de horror, se pasó las manos por el cabello y tomó su almohada para cubrirse los senos desnudos, pero su madre solo asintió con la cabeza, desvió la mirada y soltó un suspiro.
— Creó que no vas a desayunar, mejor nos vamos nosotras....— Dijo su madre intentando cerrar la puerta, pero una rubia cabellera y la chillona voz de una niña los asustaron, Christian se cayó de la cama mientras se cubre la entrepierna con un peluche en forma de corazón, pero al verlo así sus hermanas soltaron carcajadas escandalosas.
— ¡Paris está desnuda! — Dijo Mila con la cara roja de la burla — Y tiene senos de abuelita —
Paris les arrojó una serie de almohadas a sus hermanas llena de molestia y coraje porqué si tan solo sus hermanos o su padre escuchan todo el griterío que tienen en su habitación se volverán locos, pero London, esa rubia con un cerebro macabro, entrecerro los ojos y la miró vengativamente.
— Esta es la hora de mi venganza Paris, por fin me vengare por aquella vez que me arrojaste por las escaleras para ser hija única — Su madre intentó cubrirle la boca, pero London soltó un fuerte grito con el rostro llenó de burla — ¡Papá, Paris tiene a un chico desnudo en su cama y creo que es el hijo de la reina! Jesús..., ¿Andre tiempo se verá así de bien desnudo? Porqué bueno, son prácticamente iguales —
En cuanto escucho el grito de su hermana, se levantó de la cama y corrió por toda su habitación buscando su ropa por todo el piso, pero está tan adormilada y asustada al escuchar la voz de su padre mientras se acerca por el pasillo, que está confundida y no deja de golpearse con las cosas, así que fulminó con la mirada a sus hermanas.
— ¡Está me la pagarán, mocosas sucias! — Gritó con rabia y voz adormilada, pero Mila sonrió y se cruzó de brazos al igual qué London.
— Si claro, somos dos contra una, ya no nos harás llorar Paris. Además estoy con London y ella tiene un bisturí y es la consentida de...— Mila se quedó callada y habló en voz baja — Hola papi —
Rápidamente su madre cerró la puerta detrás de ellas, quedándose todas en la habitación con un principe que luce sumamente avergonzado.
— ¿Sucede algo con Paris? — Preguntó su padre junto a la puerta, pero su madre respondió con tranquilidad.
— Vete William, son cosas de chicas, en un momento bajamos
Pero London, esa condenada rubia con ropa de doctora, camino hasta Christian y le acercó la ropa para que ese rubio pudiera cambiarse.
— ¿Crees que tu hermano desnudo también se vea igual que tú? — Dijo con burla lanzándole la camisa — Diablos, tambien lo pondré en una situación incómoda, veremos si tu hermano es más listo que tú —
Christian sonrió de lado, es un príncipe desvergonzado acostumbrado a escaparse de las ventanas, así que se puso la ropa y caminó hasta ella para tomarse el atrevimiento de besarla hasta dejarle las mejillas rojas, cuando por fin la dejó sin alimento, miró a London.
— Me temo que mi hermano es listo para las cirugías, no para escapar, si lo arrojas de la ventana lo matas — Christian se acercó a la ventana y sonrió antes de bajar con destreza — Me temo que yo tengo más experiencia bajando por las ventanas, adiós Paris —
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Una Rosa De París (Saga Las Perfumistas Parte 3)
RomanceParis Bellerose es una exitosa abogada de Londres y aunque todos creen que es un témpano de hielo, por dentro es tan delicada como una rosa, es experta en sanar los llantos de sus hermanas con tequila, de correr las novias a sus hermanos a golpes...