Sentimientos Ocultos [Naruto Shippuden] ✔

Capítulo 3

Mis piernas suplican piedad a gritos, pidiéndome que pare a descansar aunque sea por un minuto. Mis pulmones se resienten ante la falta de aire y la cabeza me da vueltas, pero sé que si paro ahora, entonces mi cuerpo se negará a continuar tras el descanso, el recorrido hacia mi destino se hará más arduo, por eso ignoro los quejidos y continúo corriendo sin descanso.

A mi alrededor no se escucha nada más que el sonido de mi respiración entrecortada, el de mis torpes zancadas en las ramas de los árboles que se abren paso ante mí y el de mi katana tintineando en su saya, atada hábilmente mediante el sageo al obi que mantiene cerrado mi haori.

Sigo todo lo cerca que puedo al cuervo, que sigue batiendo sus suaves alas siguiendo un camino que solo él conoce, guiándome sin dudar, esperándome cuando la distancia que nos separa se hace tan extensa que corro peligro de perderlo de vista. 

La certeza va creciendo en mi interior y con ella la impaciencia. Quiero verlo una última vez. Quiero tener la oportunidad de despedirme.

-------- ≪ °✾° ≫ --------

—¿Quieres? —Mi pregunta logró devolverlo a la realidad. 

Mi mano le ofrecía una jugosa fruta, mi favorita, de una bolsa repleta de esa misma que había comprado hacía un rato para darme un festín.

—¿Un melocotón? —inquirió, tomando el fruto que le tendía.

—Es un albaricoque —corregí con la acostumbrada sonrisa esbozada en mi cara—. Se parecen, pero son diferentes —explicaba mientras le daba un buen mordisco a otra pieza de fruta que había sacado de la bolsa de papel que llevaba abrazada a mi cuerpo—. Por eso soy Kyōka —añadí con la boca llena. 

Itachi apartó su mirada del albaricoque para observarme con curiosidad, antes de preguntar.

—Entonces, ¿solo te gustan porque tu nombre significa flor de albaricoque? —inquirió extrañado, frunciendo ligeramente el ceño.

Me reí con ganas, tanto por su pregunta como por su expresión, mientras me acercaba con calma a la sombra que ofrecía un árbol para protegerme del sol de verano.

—No. Mi nombre significa flor de albaricoque porque me gustan los albaricoques. —Me senté en el suelo mientras él continuaba mirándome, aún más confundido que antes.

Hacía ya varios meses que habíamos comenzado a hablarnos y desde aquel día en el que habíamos pasado toda una tarde entrenando juntos hasta el cansancio, ambos habíamos comenzado a acudir casi sin pensar al lugar que habíamos utilizado como campo de entrenamiento.

Había veces en las que no coincidíamos, ya fuera porque Itachi tenía que hacer alguna misión o porque mis amigos me secuestraban para pasar tiempo conmigo, pero los momentos que compartíamos eran siempre entretenidos. 

Cuando no intentaba competir con él, aun a sabiendas de que me sería imposible ganarle en absolutamente nada, disfrutaba viendo el movimiento de los kunai en sus manos antes de que los lanzara. De vez en cuando trataba de molestarlo de alguna forma solo para observar sus reacciones, pero tenía tanta paciencia conmigo que al final era él quien acababa riendo ante mi frustración.

A veces, cuando intentaba imitar su forma de agarrar y lanzar las diferente armas ninja, me corregía con calma y yo lo escuchaba atentamente, sumiéndome en el placer de escuchar su apacible y calmada voz.

Todo en él era delicadeza: sus gestos, su rostro y la forma en la que su pelo lo enmarcaba, sus sonrisas, su voz, incluso sus prolongados silencios.

Una vez me preguntó:

—¿Por qué quieres ser una kunoichi?

Lo miré directamente a los ojos, antes de responder sin dudar.

—Quiero ser libre, y para ello tengo que ser fuerte.

Tras unos segundos una de sus cálidas sonrisas se abrió paso a la superficie, para regalármela únicamente a mí.

Ahora no estoy tan segura de mi respuesta. ¿Realmente ser fuerte otorga libertad? Itachi era fuerte, pero aun así nunca pudo ser libre.

➻❃ ➻❃ ➻❃ ➻❃ ➻❃ ➻❃

El nombre de Kyōka se compone de los kanjis 杏(albaricoque) y 花(flor).

Si tenéis alguna duda sobre lo que sea, no dudéis en preguntar y yo encantada os responderé.

Besitos ( ˘ ³˘)♥