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Un gatito todo juguetón esta haciendo que él que se suponía que era su destinado, lo persiguiera por toda la gran mansión.

Miawww — maullo Saint mirando sigilosamente escondido tras un gran jarrón — ¿donde se abra metido ese tonto? — reprochó Saint, quien quería jugar un poco — ¿acaso se a dado por vencido con migo? — dijo lo último algo desanimado —

Pero de algo que no se había dado cuenta, era de que un minono un poco más oscuro que él lo estaba acechando

— ¡Te encontré gatito! — exclamó él minino más oscuro, antes de saltar sobre Saint y rodar en juego —

— Cuidado gato tonto — dijo Saint intentando le morder una oreja al otro minino — no quiero que me dejes rasguños por todo mi hermoso cuerpo, además me volverás a despeinarse la cola — chillo —

Pararon de jugar por un momento dejando a Saint de bajo del otro minino, mientras se miraban algo divertidos.

— ¿yo tengo la culpa de que te hallas metido en mi maleta? ¿Tambien tengo la culpa de que me hallas arañado la cara?... Eso dejara marca — dijo el minino acomodando le un mechón de la cabeza a Saint —

— ¡Pues mis más sentidos pésame por tu rostro! — dijo Saint, quien agachó sus orejitas y rodo sus ojos —

Él minino se hecho a reír haciendo que Saint le lanzara un sarpaso.

¿señor bigotes que haces encima de ese lindo gatito? — dijo una señora mayor, para luego levantar al señor bigotes —

— Vez hasta la señora tiene clase con este bello gatito "señor bigotes" — dijo Saint siendo solo entendido por el señor bigotes, mientras se reía exageradamente en el suelo, parando de reír cuando unas manos lo tomaron y lo alzaron —

— Muy bien niños, los llevaré a la habitación del señor Zee — dijo la señora de edad muy feliz — de seguro él señor estará contento al enteraste que él señor bigotes, hizo un amigo y que ese amigo es él gatito que estaba persiguiendo.

Al llegar a la habitación la señora de edad puso a los dos mininos en un mueble y salió en busca del señor Zee, sin saber que este ya estaba en la habitación.

— Mi nombre es Zee y como puedes ver soy un híbrido — Saint lo miro y asintió acomodando se en el mueble — ¿me puedes decir como fue que llegaste aquí? — se acercó a Saint y se sentó a su lado —

Saint lo miro y luego acostó su cabeza en sus patitas.

— mi nombre es Saint y también soy híbrido. La razón por la que termine en tu maleta fue debido a tu olor, pero creeme que dudé en meterme en la maleta al ver que eras un niño rico — aclaró Saint haciendo reír a Zee, o mejor dicho al señor Bigotes —

— ¿no tienes familia? ¿que sucedió para que te vinieras con migo? — pregunto él Señor Bigotes queriendo entender todo —

— En pocas palabras no tengo familia, mis dos padres me abandonaron y según el destino o como sea tu eres mi última esperanza — volteo a mirar una vez más a Zee y luego se bajo del mueble batiendo su esponjosa cola — así que de ahora en adelante estaré junto a ti molestando te hasta que no pueda más — dijo sin ninguna vergüenza, para luego caminar por toda la habitación —

Zee volvió a su forma humana mostrándose todo desnudo ante el invasor peludo, él cual tapó sus ojitos con sus dos patitas y con su cola le señalaba que se fuera.

— ¡ponte algo de ropa! ¿Acaso no vez que aterras a mis ojitos y perturbas mi mente no tan pura, ahora con con tigo al aire libre? — se dio la vuelta para que Zee se pudiera vestir —

Cuando Zee término de vestirse camino hacia Saint y lo cargo en sus brazos, para luego sentarse en el sofá.

— ¡¿quien te dijo que podías cargarme!? — gruño pero empezó a ronronear al sentir unas caricias propinadas por Zee —

— Parece que tendremos a un gatito gruñon y mimado en este lugar — rápidamente Saint gruño pero volvió a ronronear, aciendo que Zee riera bajosi que eres bipolar.

De repente la puerta de la habitación se abrió dejando ver a la misma señora de edad entrar al lugar.

— Señor Zee que bueno que ya pudo cojer al gatito — dijo la señora mirando a Saint en las piernas de Zee — aunque es una lastima que el señor bigotes desaparecido otra vez.




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Hola como están... Perdon por no haber actualizado pero me cortaron el Internet por culpa de mi hermano, en fin espero les halla gustado este capítulo y perdón por si hay errores de ortografía.
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Nos leemos mañana bay
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MIRRIAUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora