Saga Venganza y Amor. Amor convertido en venganza. Volumen 2

La duda se confirma

Lisa y Carol despiertan maniatadas en un par de sillas, y con los ojos y la boca tapados. Nada se escucha a su alrededor, solo su respiración acelerada mientras desorientadas comienzan a revolverse en las sillas. David tiene encerradas a ambas en el sótano de casa de su primo Eduard.

  —¿Quieres explicarme qué vamos a hacer ahora? —Pregunta Eduard nervioso dando vueltas por la sala de su casa.— ¡El plan era que solo nos llevaríamos a Carol! ¿Y ahora tenemos a dos mujeres secuestradas?

  —¡Tranquilízate! Aunque el plan no ha salido como esperábamos aún podemos solucionarlo.

  —¡Como!

  —De momento haremos lo mismo que planeamos con Carol, le obligaremos a llamar a su familia para que les diga que se ha ido unos días para oensar. Con eso ganaremos tiempo.— David se se sienta relajado en el sofá.

  —¿Y crees que nos lo van a poner fácil? Son capaces de decir algo en cualquier momento.

  —Bueno...—Sonrie David.— hay formas de mantenerlas en silencio.

Eduard que sabe de lo que es capaz su primo y de las tácticas que es capaz de hacer para que las cosas salgan como el quiere.

Sofía se ha levantado temprano. Hoy Fabián vuelve a la empresa y una sensación de inquietud y nerviosismo la tiene inquieta.

  —Buenos días. —Dice Rosaline al ver a Sofía desayunando en la cocina.— Hoy has madrugado bastante. Estás nerviosa, ¿Verdad?

  —Hoy es un día importante, tenemos que demostrar a Pharrell que cumplimos con lo que nos ha pedido.

  —¿Quieres que te acompañe?

  —Gracias, pero no hace falta. ¡Me voy que quiero llegar temprano!

Sofía coge un bollo de los que Melissa dejo preparados sobre la mesa, su bolso y da un beso a su madre antes de marcharse. Rosaline que la observa sonríe mientras se sorprende del voraz apetito que su hija tiene últimamente.

Pharrell también se ha levantado temprano, pero hoy se encuentra más cansado de lo habitúal. Sus músculos parece que se resienten y todo le cuesta más que de costumbre. Algo tan simple como vestirse le está costando demasiado. Parece que su enfermedad está comenzando a avanzar sin remedio. Cuando Marcus llega a la habitación de Pharrell no puede creerse que todavía no esté listo. Pharrell es de los primeros en estar siempre vestido y presentable.

  —¿Te has quedado dormido? —Pregunta sonriendo. — ¿Como es posible que aún estés así?

Pharrell intenta ponerse de pie, pero inmediatamente cae al suelo perdiendo el equilibrio.

  —¡Pharrell! —Exclama Marcus llenado en su ayuda.—¿Que te ocurre? ¿Estás bien?

  —¡Si! —Responde algo aturdido.— Es solo un pequeño mareo. Se me pasará cuando coma algo.

Pharrell todavía no le ha dicho nada a Marcus de su condición. No quiere preocuparlo. Marcus es como un hijo para el, y necesita que en estos momentos este al cien por cien por y para la compañía. Cuando el negocio este finalizado, entonces podrá dejar la empresa en manos de Marcus y preocuparse por su salud.

Fabián ha llamado a Claudia antes de llegar a la compañía. Quiere que este delante cuando exponga sus condiciones para volver a Alquer. 
Cuando Sofía llega a la empresa no puede disimular su nerviosismo. Dando vueltas por la empresa busca desesperada a Carol. Pero su secretaria todavía no ha llegado a la compañía. Cuando ser dirige a la recepcionista para que se ponga en contacto con Carol se encuentra con Fabián de frente: