Solo un error. PT.1

98 8 1
                                    

—Koo encerio, solo invitalo, dudo mucho que ustedes vayan a matarse con pasar un solo día juntos. —Menciono posando su dedo índice frente a su sostro. 

—¿Tengo que hacerlo?... No, no me respondas, ni siquiera se porque siempre te hago la misma estúpida pregunta sabiendo la respuesta. Lo pensaré, no te prometo nada.

El azabache algo despeinado se levanto de su escritorio abriendo su armario para empezar a cambiar su vestimenta, después de todo tenía la confianza suficiente para estar semi desnudo frente a su amigo, de echo el era el único que lo había y podía, verlo de esa forma.

—Creí que habías estado yendo al gimnasio, pero tú pancita sigue ahí. —Solto una risita al ver el abdomen blando de su amigo.

En ciertas ocasiones pudo observarlo con una musculatura envidiable, que lo hacía olvidar que era un doncel, pero lo cierto es que su genética no le permitía permanecer de esa forma por mucho tiempo.

Podría pasar días enteros en el gimnasio, pero tan pronto dejaba de ir, su cuerpo regresaba a su estado natural, de apariencia blanda y "femenina"

Habían días en los que adoraba su cintura y le gustaba verse con ropa ajustada, pero también habían días en los que prefería usar ropa ancha y ocultar su cuerpo para no verse tan blando.

—Hace apenas unos días fuí, pero es inútil, no logro mantener mi condición física estable. —Bufo terminando de arreglar su uniforme acomodando su corbata. Estaba frustrado, talvez era su ego queriendo ocultar lo que era en realidad, pero por más que quisiera, no resultaba.

—Supongo que-

—Chicos ya están... ¿Jimin porque sigues en pijama? y tu aún no estás peinado. —Destaco las fallas en su presentación. —Los quiero en 5 en el comedor desayunando, y no estoy jugando.

—Si señora. —Dijeron con temor a unisolo, la madre de Jungkook era una mujer muy agradable y hasta podría ser sobrenatural la felicidad que mantenía, pero al momento de enfadarse su ira era el doble de su optimismo.

Ambos terminaron de prepararse, y acatando las órdenes de la dueña de la casa, desayunaron las delicias que había preparado y se marcharon directamente hasta su instituto.


—Entonces... ¿Lo invitaras a salir? —Dudoso cuestionó con su ceño fruncido. Para cualquiera que escuchará al peliteñido pensaría que eran disparates, y seguramente sería rechazado al instante como en un principio.

—Por milésima vez, si, lo invitaré, créeme o no, ya está todo planeado.

—Pero el te odia.

—Del odio al-

—Del odio al amor solo hay un paso, lo se Romeo —Recito con pesadez, era un verso que se tenía memorizado al derecho y al revés, por ser la única frase que repetía una y otra vez su mejor amigo. —Deberías conseguirte una nueva frase, esa ya está muy gastada. Por ti mismo. ¿Encerio estas seguro que aceptara?

—No quiero presumir —Claro que quería —Pero Jungkook me dio una chance con el, así que dudo que vaya a rechazarme. —Era consciente de que el chico no había dicho nada directamente, pero el lo interpretó así.

—El nunca dijo eso. —Solto dándole un golpe de realismo a Taehyung, tenía razón, pero no lo convencerla fácilmente.

—En todo caso tengo la opción de arrodillarme hasta que acepte.

—¿En que momento perdiste la cabeza y caíste por Jungkook? —Ni siquiera el creía que fuera posible que alguien conquistará al llanero solitario, aunque estaba feliz por él, seguía temeroso de que le rompieran el corazón, esta vez encerio. —Pero te apoyare, adelante tigre, ve por él.

My Life, My Rules//TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora