My Life, My Rules//TaeKook

Del odio al amor solo hay un paso.

—Bueno familia, ya son casi las siete en punto, preparen la merienda y sus billeteras, que está noche si o si nos ganamos un viaje todo pagado. —Hablo el hombre parado sobre la mesa.

—¿Podrias calmarte un poco? Que vergüenza Daniel. —Cubrio su rostro tirando de la pierna de su esposo, mientras los demás sólo reían

—Es el único momento de las reuniones en que realmente estoy emocionado y quieres cortarme el espíritu —La miro con indignación. —Cuanta hipocresía.

—Oh, Jungkook, que bueno que bajas, ven con nosotros. —Llamo emocionada su prima mientras arreglaba las cosas en la mesa

—¿Que está pasando?

—¿Ya lo olvidaste? Es sábado por la noche con la familia, vamos a jugar juegos de mesa. —Explico su hermana.

—Juego para las niñas, nosotros venimos por las apuestas, ¿cierto tío? —Los primos de Jungkook y su padre hicieron un extraño saludo entre todos.

—Yo... Gracias, de verdad, pero paso por esta vez.

—Jungkook, te dije que no podías faltarnos una vez más a nuestras noches de juegos.

—Es que no puedo porque... —Miro hacia todos lados buscando alguna alternativa, se odiaba por lo que iba a decir. —No puedo dejar plantado a Taehyung.

—Asi que tienes otra cita con él...

Todos se quedaron mirándose entre sí, sabían que Jungkook ahora tenía una relación que mantener, y si eran consientes de que ese echo era algo bastante milagroso, no permitiría que Gukk dejara pasar oportunidades como citas con su novio.

—Hubieras empezado por ahí cariño, cuídense mucho.

Sorprendentemente su tía los últimos días estuvo bastante amable con él, cosa en verdad extraña, pero era agradable y le facilitaba las cosas a si mismo.

—Bueno... Solo iré a arreglarme y me iré, disfruten su noche de juego.

Corrió de regreso a su habitación azotando la puerta del nerviosismo; no tenía idea de que hacer, no planeaba molestar a Jimin estando de vacaciones, con sus problemas personales en ese momento, solo le quedaba la alternativa de vestirse bien e irse de casa por un par de horas, nadie iba a saber si había estado solo o no... Pero no le agradaba el echo de estar solo tanto tiempo.

Pero siempre podía irse y regresar poco después diciendo que Taehyung lo había plantado, pero eso significaría darle una mala racha, y a él nadie lo plantaba... No quería continuar molestando a Taehyung pero necesitaba a alguien.

Finalmente se decidió a llamarle.

—Hola... Tae... ¿Cómo estás?

—Hola Gukk, Estoy bien, ¿Y tu? ¿Pasó algo?

—No, digo, estoy bien, solo quería saber si estás ocupado.

—Bueno, estoy terminando mi turno en el restaurante, ¿Porqué? ¿Necesitas otro favor de tu novio postizo?

—No, no podría seguir pidiéndote favores....

—Te dije que no era ningún problema, dime si necesitas algo, insisto.

—Realmente quisiera dejar de involucrarte en estas cosas... Perdón.

—Descuida, no me molesta, ¿Es otra cena?

—En realidad, solo quería huir de otra de sus noches de juegos y dije que tú y yo teníamos planes para esta noche... Pero no importa, si tienes algo más que hacer no tienes que aceptar.