Las Encontrare. [1.0]

Capitulo 13.

Cuando bajé con Maia para desayunar, vi qué mi mamá charlaba con Scarlett.
Esperen dije ¿Scarlett? ¿qué hacía aquí? Maia enseguida la vio y su cuerpo tembló, seguro tendría miedo del regañó qué le daría Scarlett, al ver qué ni Scarlett ni mi madre notaban mi presencia tosí falsamente.

Scarlett se removió entre la silla nerviosa por nuestra discusión de ayer.
—buenos días Maia, ¿qué haces aquí?.
-preguntó seriamente.

—mamá.. Lu... Luis ayer no fue por mí y yo me vine con Daniel un rato pero me quedé dormida.
-Dijo mi hija nerviosa.

—Maia no mientas, hoy quieras o no te irás a dormir con él.

–No seas tan dura con ella.
-dije un poco molesto, no me agradaba que mi hija conviviera con ese tipo.

—Daniel no te metas por favor.

—Eh... creó qué yo los dejo.
-dijo mi mamá qué observa la escena desde su silla, algo nerviosa.
—Maia vamos para qué tu mamá y mi hijo arreglen las cosas.
-Maia soló asintió y ambas salieron fuera de mi apartamento.

–Yo me voy, a las 5 ㏘ vengo por mi hija.

—NUESTRA hija.
-Scarlett soltó un bufido y salió dando un portazo a la puerta.

MAIA.

Con mi abuela salimos al parque, me compro un helado y me contó anécdotas de cuando papá era un bebé, según mi abuela era una "albóndiga con patas" pasamos el día entre risas, se sentía bien tener una abuela.

—¿porque tu mamá ésta molesta contigo?.
-dijo Cecilia captando mi atención. 

-suspire.

—por que dormí en casa de Daniel y me escape de la casa de su prometido.

—¿Scarlett se va a casar?.
-dijo sorprendida.

—sí, en un mes y medio.
Dije cabizbaja.

—¿tú quieres qué se casé?

—No, yo quiero qué vuelva con mi papá, pero ella dice qué el no, nos quiere, aunque yo sé que si.

—Él si las quiere Maia, sólo qué...-se quedó callada un rato.—olvidalo

—¿Qué? ¿es solo que?.
-dije insistiendo

—nada, ¿vamos a casa?

—esta bien..
-dije rindiendome.

Nos fuimos a casa de mi papá, como a las 5:15 ㏘ llego mamá por mi, para llevarme con mal bicho.

—quiero qué te portes bien, ¿oíste bien Maia?

—No.

Cenamos los 3 juntos, cuando mamá se fue nos quedamos los dos solos, esperaba que si mamá y Luis se llegaban a casar nos quedáramos en nuestro departamento, al menos el nuestro tenia vida en cambio este tenia colores aburridos igual que su habitante.

Iba pasando por la habitación de Luis, cuando escuche que estaba hablando por teléfono y no era con mamá.

—Me encantaría irme ahora mismo Ashley, pero tengo qué cuidar a la estúpida hija de Scarlett.
-pero ¿quién se cree esté idiota? Acá el único estúpido es él.—sí ella ésta cayendo, pero llegó Daniel y me inventó una mentira qué ni ella se creé.-¿ahora a qué se refería esté cara de bicho?.—ahora tengo qué ver si esa niña malcriada ya se durmió, el próximo Jueves Inventaré un viaje de negocios, adiós te amo.-cortó y yo me fui lo más rápido qué pude a mi habitación. 

DANIEL.

Scarlett y yo habíamos arreglado las cosas, hoy volvía Maia a casa y Scarlett estaba muy contenta.

Tocaron el timbre y enseguida se levanto a abrirlo.

—mi niña, ¡te extrañe!.
-Sonreí al ver cómo la llenaba de besos y abrazos.

—Yo igual mamá.-la abrazo.—quiero ir a ver a Daniel mami.-salí de la cocina para ir a abrazarla también.

—no será necesario.
Dije riendo levemente.

—¡Daniel! No creí que estarías aquí.
-Dijo abrazandome.

—arregle las cosas con tu mamá.-respondí con una sonrisa.

—¿Enserio? Oh, ¡tengo algo qué contarte! ¿me acompañas a mi habitación?.
-mire a Scarlett ella asintió.

—vallan, mientras yo preparo la comida.

Tome a Maia en brazos y subimos a la habitación.

—te tengo que contar algo sobre Luis..

-seguro ya lo aceptó cómo su papá.

—no quiero saber nada sobre él.
-dije un poco molesto.

—yo tampoco pero tiene que ver con mamá.

—¿le hizo algo?

—No, ayer qué pasaba por la habitación de Luis lo escuche hablar con una tal Ashley, me parece.-no creó qué sea la misma Ashley de los Ángeles.—el punto es qué la trataba con cierto cariño y le dijo que la amaba, también dijo qué inventaría un viaje de negocios el próximo.-trato de recordar.—¿jueves? Sí, el próximo Jueves.

—ésto es muy grave Mai.

—¿no me crees verdad?

—sí, pero eso significa que ese imbécil engaña a tu mamá.

—si, el también te mencionó a ti.

—¿a mí?.-pregunté confundido.

—sí, dijo que tu habías llegado.
-definitivamente era la misma Ashley.