𝓣𝓲𝓵 𝓚𝓲𝓷𝓰𝓭𝓸𝓶 𝓒𝓸𝓶𝓮 [Farfa×Rich]

V

— ¿Conseguiste algo?— Sili le preguntó tan pronto como entró al refugio.

— No. El chico estaba demasiado borracho— respondió simple— ¿Me perdí de algo?

— Nah. De hecho, conozco alguien que puede ayudarte a convencer a ese humano— Sili lo miró adormilado.

— ¿En serio?— le preguntó curioso.

— Si. Vamos— Sili se levantó de un salto.

— ¿A dónde vamos?— Shadoune se levantó del sofá.

— Vamos a visitar a una vieja amiga mía— Sili respondió sin ganas mientras les indicaba que lo siguieran.

    Sili caminaba arrastrando sus pies por la acera. A pesar de parecer alguien que no tenía demasiado interés por nada, Sili paseaba por las calles como si fuera su casa.

— ¿Vienes mucho por aquí?— le  preguntó curioso.

— Solo cuando necesito cambiar de aire— Sili respondió simple— ¿Y ustedes por qué querían venir aquí?

— Vamos a demostrarle a los demás que somos capaces de conseguir almas— Shadoune le interrumpió entusiasta.

— ¡Ah! Por más que sean los mejores de  esa cárcel, si no vienen de una familia prestigiosa no conseguirán nada— Sili les explicó irritado— Supongo que eso explica porque ustedes no sabían realmente nada de aquí.

— Debes ser de una familia realmente importante si vienes muchas veces aquí— Shadoune estaba impresionado.

— Nah— sintió la mentira en su hablar pero no le reprochó nada— Todo lo que sé, me lo enseñó mi padre. Yo no estudié allí.

— ¿Y por qué estabas allí cuando estábamos por venir aquí?

— Simple, en esa sala se abren tantos portales que es imposible llevar un registro exacto— Sili parecía estar experimentado en el tema— Si no quieres ser rastreado, ese es mejor lugar. 

   Tan pronto como Sili terminó de hablar, se paró frente a una alcantarilla en una zona bastante aislada. Observó a sus alrededores y les indicó a ambos que se adentrasen mientras él vigilaba que nadie los descubra. Mientras bajaba por las escaleras, sintió como atravesó una barrera que impedía que los humanos pasasen por el sitio. Observó la pequeña ciudad subterránea con asombro, miles de criaturas mágicas de todo tipo circulaban ruidosamente.

— Bienvenidos a El Subsuelo. Un punto de encuentro para todo tipo de criaturas mágicas. Eso sí, cuidado con los duendes que son un poco traviesos— Sili les advirtió.

— ¡Wow! Es como si fuera un planeta totalmente diferente a la Tierra— Shadoune contemplaba el lugar entusiasmado.

— Bueno, podrías considerarlo así. Si algún día no tienes refugio, puedes venir aquí— Sili se encogió de hombros y comenzó a caminar— Vamos a buscar a mi amiga y luego pueden recorrer un poco.

   Comenzó a caminar mientras observaba los distintos productos que ofrecía cada puesto. El pasillo parecía una feria y todos los vendedores intentaban convencerlo de comprar algo. Se acercó a un puesto vacío que le llamó la atención y de la nada apareció un cerdo.

— ¿Quieres ver unos trucos de magia?— el cerdo le susurró— Soy el mejor mago que podrás encontrar aquí.

— ¿Kaky?— Sili se acercó a ambos— ¿Sabés dónde se encuentra Mayichi?

— ¡Sili!— el cerdo gritó de entusiasmo— No sé dónde está, creo que se encuentra haciendo un encargo especial pero siempre le puedes preguntar a su gato.