Teenagers -Ultima Generación-

Capítulo 1 -Natalia- (parte 4)

Jean tuvo que irse a casa, pues su madre necesitaba su ayuda. Empecé a revisar las cajas a ver si encontraba una pista o algo que me ayudara a entender todo lo que estaba pasando; pero no había nada.

Lo que sí me llamó la atención era que en todas las cajas había una foto de un hombre con 7 niños; los niños parecían de unos 14 años, y detrás de cada foto había una letra. Uno de los niños se parecía a George; era extraño porque él nunca me dijo que tenía familia.

Metí las fotos en una mochila que tenía a mi lado y seguí buscando. Revisé las demás cajas que faltaban y en una de ellas había una libreta con el nombre Reginal Hargreeves en la portada; me sonaba familiar ese nombre, pero no recordaba de dónde.

Tome la libreta y cuando estaba a punto de abrirla tocan la puerta. Me asuste un poco ya que no esperaba a nadie y menos a esas horas, eran casi la 1 de la mañana. Me dirigí a la puerta y la abrí, era un hombre

N: buenas noches, necesita algo

No me respondió; pero si me dio una gran patada en el estómago. Sentí como se me fue el aire por un instante; el hombre entró y cerró la puerta, se acercó y me lanzó hacia la mesa; me levanté lo más rápido que pude y empezamos a pelear...

Sentía que no podía más, que un golpe más e iba a morir. No tenía idea de lo que quería el hombre; no sabía si su misión era matarme a golpes o dormirme y luego llevarme a un lugar muy lejano.

Me tomó del cuello y me lanzó al suelo; tome lo más cercano y lo golpeé en la cabeza, me pare tome la mochila y corrí a la cocina. Abrí la llave del gas y tome una caja de fósforos George a veces tenía gasolina en la cocina la busque hasta que la encontré.

La eché por toda la cocina e iba ir hasta la sala, pero el hombre ya venía. Le lance el tanque y le callo un poco de gasolina encima; salí por la puerta de atrás y antes de salir corriendo encendí el fósforo y lo lance, luego salí corriendo.

Pude escuchar como exploto la casa, pero no me detuve y seguí corriendo. Lo único que me quedaba de todo lo que había en la casa era lo que tenía en la mochila; y siendo sincera no era mucho. Corrí hasta llegar a una estación de autobuses, me senté saqué el celular y marque a Jean.

*Llamada*

J: ¿hola?

N: Jean soy yo, Natalia

J: ¿Qué pasa porque llamas tan tarde?

N: necesito que vengas por mi

J: ¿está todo bien?

N: solo ven a buscarme en la estación Greyhound por favor

J: Está bien, voy para allá.

*Fin de la llamada*

Me dolía todo el cuerpo, no podía respirar y tenía sangre. Lo raro fue que derepente el dolor y la sangre desaparecieron y fue como si nunca hubiera pasado nada....

Detective: un momento. Hasta ahí es suficiente, continuaremos luego

N: bien, como quieras

Detective: traigan a la otra chica....