Capítulo 03.- Demonios

48 4 4
                                    

- Los demonios son criaturas que salieron desde la profundidad de la Tierra, han estado encerrados por siglos esperando que su amo despierte del profundo sueño que lo atormenta.
- O al menos eso es lo que pudo rescatar Daniel de un lugar al que llamaban Rusia hace unos años, cuando aún era un simple cazador.
¿Por qué siento que conozco esa historia? es como si la hubiera escuchado antes.
- Para nuestra desgracia, esta es la última sede que le queda a la raza humana. Al menos, ya tenemos armas para salvarnos, el problema es: el instructivo.
- De todas maneras, tenemos que estar preparados para cuando Kei despierte.
- Entonces, ¿Dos humanos tienen que derrotar a un demonio jefe y liberar a los demás para poder vivir en paz? - A pesar de que me suena lo que acaban de decir, pregunto de todas formas en una manera irónica y sin mucha importancia.
- Bueno...- Daniel empieza a mirar al suelo, cuando de repente, entra un joven de estatura promedio, tez pálida y cabello castaño.
- Disculpe, Comandante, ¿me mandó llamar?
- Sí, justo a tiempo. Lena, te presento a Jack Hudson. Jack, ella es Lena.
- Es todo un placer, señorita White.
- Hola.
- Lena, a sugerencia de Daniel, te asigné un Alix.
- ¿Qué es un Alix?
- Pertenecen a la tercera jerarquía de nuestra civilización, son los encargados de buscar a más personas en el exterior e información que nos ayude a salir adelante, y de ser necesario, protegerse de los demonios.
- Es un honor que me hayan elegido para acompañarla, estoy a su disposición.
El chico es apuesto, es delgado y viste igual que la mayoría de personas de este lugar, solo que tiene una franja amarilla en el brazo derecho.
- Bien, eso sería todo para ambos, él contestará a todas tus preguntas. Si necesitas algo, búscame. Me retiro. - Daniel se pone en marcha a salir de la habitación, pero regresa a decir una última cosa antes de poner ambos pies fuera del lugar - Ah, y por cierto, ten cuidado con ella. - le guiña el ojo a Jack y se va.
El Alix se pone nervioso al escuchar lo que dijo y evita hacer contacto visual conmigo.
- Soldado, lleve a la señorita a su respectivo dormitorio, después prepárense para salir al campo y comenzar con la expedición.
- A sus órdenes, señora. Sígame por favor. Como verá, este es el nivel 6, y se preguntará el motivo de su nombre, es por las habilidades que se encuentran aquí, tanto laboratorio como el territorio de los Comandantes.
- ¿Qué es eso de allá? - pregunto mientras veo a través de la pared de cristal el laboratorio que tengo a un costado.
- ¿Qué?, ¿Eso?, Ah, es mercurio. Un metal que al parecer, es lo único que realmente puede dañar, herir o matar a un demonio, no sabemos porqué, pero agradecemos la información que venía en los diarios que encontró el comandante Blake. Así que nuestros científicos se aseguran de que sea puro y proporcionarnos dos armas diferentes a los soldados, así como las suyas. Un arma de fuego y un arma blanca. Y por acá está el ascensor que lleva a cada uno de los seis niveles, a los lados están las escaleras de emergencia.
- ¿Hablas de esto? - Señalo lo que traigo en la correa.
- Sí, justamente. También la katana que trae a un lado, que por cierto, jamás había visto una de cerca. Es increíble.
Observo con detalle como manipulan el Mercurio para crear todas esas armas mientras se abren las enormes puertas de acero del ascensor.
Las paredes de vidrio de los laboratorios hacen que me percate de una persona. Es un hombre que pasa detrás de mí, todo se pone en cámara lenta. Viste una camisa y pantalón blanco, botas y cinturón negro con una chamarra café. Lleva un arma idéntica a la mía en el muslo izquierdo pero, no veo su rostro...
¿Qué es esto?, ¿Por qué tengo ganas de llorar?, es un nudo en la garganta que me prohíbe hablar y me paraliza por un momento...
- ¿Señorita White?, entre por favor.
Ingreso al ascensor de cristal y solo miro de reojo a aquel chico con cabello negro y ondulado. Al cerrar las puertas metálicas, no estoy segura si aquel chico hizo lo mismo de mirarme, solo intento controlarme y poner atención a lo que dice Jack mientras descendemos.
- Como verá, aquí es el nivel 5, área de combate y entrenamiento. En el nivel 4 está la cocina, el comedor y el área recreativa para la educación de nuestros niños. Nivel 3, enfermería.
- Es... Impresionante. - desde arriba todo es muy bello y tan pequeño, quién diría que en un simple lugar podrían haber tantas cosas. Los niveles son como bodegas gigantes, tienen un arco en el techo y luces potentes que iluminan todo el lugar, aunque me llama la atención aquella cabellera cobriza, es Iva. Al vernos descender, me saluda de lejos con una pequeña sonrisa, no imagino lo que debío pasar al haber escuchado lo que sucedió con ella.
- Y nivel 2, el nivel 1 es una granja artificial que tenemos para conseguir nuestra comida. Por aquí, señorita. - El ascensor se abre, cada habitación tiene iniciales y una lista de los números de registro de cada residente de la habitación. Jack comenta que todos tienen que dormir de dos a seis personas por lugar, ahorrar espacio es algo muy importante, mi habitación se encuentra al fondo, pero solo hay una cama. - Debido a que tiene una especie de advertencia, me indicaron que le asignara un dormitorio exclusivo para usted y con algunas herramientas de localización para sus expediciones.
Dave es el que nos recibe en aquella puerta corrediza con una pequeña ventana en ella, a pesar de su forma de actuar, no puede evitar sentir temor al hablarme.
- Señorita White, permítame presentarle a la mano derecha del Comandante, Dave James.
- ¿Cómo está? - Dave carraspea al terminar de hablar y extiende su mano hacia mí.
Volteo a ver a Jack para que me diga qué tengo que hacer, señala el gesto y la acepto con la mirada fija en Dave.
- ¿Se puede saber por qué me separan de los demás?
- Porque usted es peligrosa, señorita, debemos cuidar nuestra arma nuclear y el bienestar de nuestros civiles.
El chiste le pareció muy gracioso a ambos, aunque para mí resultó un tanto molesto. Solo dirijo mi mirada una vez más a ese tal Dave James y comprenda lo que está provocando. Al percatarse, para de sonreír inmediatamente, mientras, Jack se reincorporó para lucir serio y borrar la sonrisa de su rostro.
Entro a la habitación y tiene una especie de luz naranja al fondo, creo que las paredes son de un tono beige, se asemeja mucho al gris. No tiene ventana alguna, solo la de la puerta.
la cama es blanca, hay un tipo de mesa pequeña al lado y un estante enfrente. En el, están algunos aparatos que me proporcionaron para cuando salga de la sede.
- Señorita, le hago entrega de su equipo de expedición, un localizador que deberá encender al salir, daga provisional con correa, binoculares normales y de visión nocturna y una reserva de alimentos empaquetados de tres días. Si necesita modificar algo, puede ir al nivel 5 y solicitarlos. Los baños están separados unos de otros, el de mujeres es el de la derecha, ahí encontrará duchas al fondo. El itinerario está en la mesa e información y sus artículos personales se encuentran en el compartimiento que está justo al lado de la puerta.
Una especie de cajón se abre al hacer contacto con él, está tan bien disimulado, que ni siquiera se notan las aberturas.
- Su expedición es en veinte minutos, así que ambos prepárense para salir. Avisaré a los superiores que ya está instalada, señorita. Con permiso. - Dave toma rumbo a la puerta y se marcha.
- Bueno, dejo que se adapte un poco y nos vemos en el Nivel 6 más tarde, avíseme si necesita algo.
- Gracias, Jack. - asiente con la cabeza y sale de mi habitación.

Hasta que el futuro nos separeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora