Jungwon ve el lado positivo de las cosas. Suele ser divertido y risueño, alegre en general, su sonrisa indicaría que es un niño feliz como otro cualquiera.
Pero no es así
¿Qué cosa tan mala había hecho en su vida pasada para que le tocara sufrir en...
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Sunghoon, Park Sunghoon, la otra víctima que sobrevivió al accidente en el cual Jay estuvo involucrado, caminaba a paso firme para llegar a su salón. Captaba la atención de cada uno de los estudiantes de la escuela, nadie les había avisado que después de recuperarse de la contusión en su cabeza Sunghoon volvería a clase. Muchos ya lo habían dado por loco. Los chismes corren rápido en esa sociedad llena de víboras, así que todos tenían conocimiento de los recientes ataques de pánico y ansiedad que Sunghoon había tenido. Realmente se enteraron por Ni-ki, su padre es un psicólogo muy famoso en la ciudad, y por ende la familia Park lo contactó para trabajar el problema de su hijo mayor. A diferencia de su padre, Ni-ki aún era un niño inmaduro y en cuanto su progenitor le comentó los sucesos como dato curioso, de inmediato le contó a su mejor amigo Sunoo, y así de poco en poco el chisme llegó a toda la escuela.
"Mira sus ojos, parece que va a asesinar a alguien"
"Lo mejor es alejarse"
"Pobrecito, sufrió un gran trauma"
"Sus padres son unos irresponsables por mandar a su hijo loco a la escuela"
Los comentarios a Sunghoon le rebotaban, estaba preparado para algo así, conocía a los idiotas con los que estudiaba. A lo lejos pudo ver a Ni-ki conversando con Sunoo bastante entretenido. Sunoo se percató y tocó suavemente el hombro de Ni-ki para que se volteara, y cuando lo hizo palideció. Sus piernas temblaron. A pesar de que recibió el castigo de su vida por haber causado todo este rumor, su papá también era culpable por andar revelando secretos confidenciales de su trabajo. Pero en su mente sólo estaba presente que el estado mental de Sunghoon no era el mejor, eso le daba bastante miedo, más aún si el mayor lo veía de forma tan tenebrosa, incluso Sunoo se estaba asustando.
-Vámonos de aquí Ni-ki -y después de que el mencionado asentiera violentamente ante la propuesta de su amigo, ambos se fueron corriendo.
Los restantes alumnos presentes temían por Ni-ki, excepto a un grupo de chicos bastante conocidos por Sunghoon, el equipo de basket de la escuela.
Ellos se reían como si todo lo que estaba pasando tuviera una pizca de gracia. Sunghoon evitó mirarlos lleno de odio, solo los iba a pasar por alto sin prestarles mucha atención.
-Chicos no es gracioso, pobre Sunghoon, bastante tiene con que su mejor amigo matara a su otro mejor amigo
Sunghoon no podía creer lo que estaba escuchando, y mucho menos de la boca que provenía.
-Tienes razón Wonyoung, el verdadero culpable de todo es Jay. Merece todo lo que le está pasando
Sunghoon, detenido en el medio del pasillo, apretó sus puños con fuerza. ¿Cómo puede Sungchan decir tal sandez? Se supone que él era amigo de Jay.
-Es cierto, pobre Huening, era un buen chico. No puedo creer que me estuviera gustando Jay por tanto tiempo, buaj que asco
-No sabías que es un asesino. Tranquila, puedes salir con chicos mejores, como yo
