Prologo 2

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BLUAGH.

Mi cuerpo da un pequeño brinco sintiendo el dolor inmenso que atraviesa mi pecho y espalda. Mi cara esta cubierta por la sangre que acabo de vomitar por lo que solo logro abrir uno de mis ojos.

Desde mi vista de cabeza solo consigo ver humo y uno que otro resto de avión, trato de usar mi olfato, pero lo único que huelo es oler la sangre que entro por esta cuando vomite. En un pequeño esfuerzo trato de mover mis brazos y piernas que están colgando de lado a lado, pero solo consigo que el dolor se extienda a todo mi cuerpo.

Vamos, muévete, muévete maldita sea, tienes que moverte.

Dándome cuenta que mis extremidades están totalmente inutilizadas por mi estado recuerdo mis colas que están colgando desde la parte baja de mi espalda, al moverlas puedo sentir como si mi estomago se partiera por la mitad lo que me hace soltar un leve gemido de dolor.

Mis colas se mueven hasta tocar el enorme trozo de metal de aluminio, rodeando el enorme trozo de metal logro sentir lo que debe ser el suelo, solo con mis colas debo medir al menos unos cinco metros.

Apretando mi mandíbula con fuerza elevo mi cuello soportando el dolor que me parte a la mitad.

-Mierda -Mascullo al ver el enorme trozo metálico de aluminio que sale de mi pecho antes de dejar que mi cabeza caiga nuevamente. Debe ser al menos un metro.

Trato de hacer uso de mis bazos y piernas, pero me es simplemente inútil. Frutado y con enojo decido envolver la parte inferior del enorme trozo de metal con mis colas para sacarme de aquí.

Debo poner todo mi esfuerzo en mis colas, pronto siento como mi cuerpo se empieza a elevar desde mi parte inferior pero apenas logro elevarme un centímetro mi cola se resbala provocando que mi cuerpo caiga con violencia.

Plugh.

Escupo más sangres que termina sobre mi rostro.

-Oh amigo eso no se ve para nada bien.

Al escuchar la leve voz abro mi ojo tratando de ver de quien proviene esta, pronto su silueta aparece por un costado. Mi mandíbula se aprieta al ver al sujeto que estaba atrapado en la caja metálica mirándome con una expresión entre asombro y asco ¿Cómo es que sigue vivo?

-De acuerdo, no te muevas solo voy a tratar de...

El metal chilla y de un momento a otro siento como todo mi peso va hacia un costado. El trozo de metal cae suavemente mientras yo simplemente cuelgo de este. Una vez acostado de medio lado en el suelo puedo ver el enorme trozo de metal que atraviesa mi pecho. Ignorando mi dolor y fatiga llevo mis manos a la punta del trozo metálico para tratar de salir de una buena vez por todas de aquí, mi cuerpo se arrastra hacia adelante hasta que la punta metálica solo sobresale de mi pecho por un par de centímetros. Agitado, molesto y sintiendo como la sangre escurre por mi espalda y pecho estiro mis colas frente a mi para enterrarlas en el suelo y usarlas de palanca para sacar de una vez por todas el trozo metálico de mi cuerpo.

Mi cuerpo entero convulsiona de dolor una vez la punta metálica sal por mi espalda.

Maldita sea. Grito en mis adentros.

Con un pequeño momento de fuerza logro ponerme bocabajo enterrando más la daga que estuvo todo este tiempo en mi pierna solo para toparme con un par de pies descalzos frente a mí. Instintivamente saco mis garras. Me importa una mierda si tengo partido el pecho o estoy dividido en dos, le atravesare la garganta, aunque sea lo último que haga.

-¿Cómo es que sigues vivo? -Dice agachándose frente a mí.

El chillido de un halcón hace eco en el lugar seguido del sonido de un par de aleteos. Obol se transforma en un lobo gris asustando al sujeto frente a mi quien prácticamente da un brinco hacia atrás.

Obol lame mi oreja diciéndome que estaré bien.

"Subelo" dice Obol.

Observo como una caja metálica aparece junto a los pies del sujeto antes de sentir su mano sobre mi hombro. Hace unos momentos le hubiera atravesado la garganta con mis garras solo al ver lo cerca que estaba su garganta de mí, pero si Obol lo trajo entonces por más que me desagrade le daré el benéfico de la duda solo esta vez.

Sin una pisca de sutiliza soy casi arrojado sobre el lomo de Obol quien a tomado su forma de lobo gigante.

-Esto es muy extraño -Escucho al sujeto casi como un susurro a lo lejos, es entonces que me doy cuenta que tengo solo un audífono.

Obol camina mientras que yo guardo lentamente mis colas para tratar de llenar el agujero el mi pecho.

-Por cierto, soy Nueve.

-Ugh -Exclamo con desagrado.









Bueno, no les voy a mentir; este final esta muuuuy adelantado ya que debería tener más contenido del que tiene hasta ahora.

En fin, solo traigo este final para ustedes (luego hare el resto) ya que e tenido muchos problemas con los que aun estoy lidiando y estos mismos no me dan la capacidad o energía para escribir.

Debo admitir que en parte la razón es que me siento algo desanimado en cuento a la saga es que a pesar de recibir un buen recibimiento por parte de ustedes no siento que está parte tuviera la misma cantidad de fans (por asi decirlo) sin mencionar que no tuvo ni una pisca de recibimiento al momento de estar disponible la de "El Diario de dos" disponible en Amazon (ya sea en físico o digital). continuare la saga aunque no estoy seguro de si la seguiré compartiendo a través de Wattpad o la dejare solo para mi las  siguientes partes.

Creo que no tengo nada más que decir asi que sin más, muchas gracias por llegar hasta aquí. 

LA INICIACIÓN DE TRES | Saga La Voluntad De Uno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora