Capítulo 6 Reescrito✔

16.7K 839 27
                                    

April Stones

Voy de camino al trabajo no entiendo porque razón me siento tan nerviosa es como si algo fuera a pasar, desde esta mañana eh estado así y no entiendo la razón.

— Hola Nate— saludo.

Nate es el encargado del bar, el dueño nunca nadie lo ha visto solo Nate.

— Hola April, que bueno que llegas hoy vas atender en la barra por que Hanna se reportó enferma— me dice.

Yo bufo, Hanna siempre pone la misma excusa.

— Esta bien.

— Se lo estás pensando y te entiendo, pero no puedo hace nada por qué ella fue contratada por el mismo jefe, así que anda a la barra que ya vamos abrir.

Asiento y camino hacia la barra.

Media hora después de estar sirviendo tragos, y escuchado varias historia de los diferente clientes que eh atendiendo, empiezo a ponerme inquieta de nuevo no se por que me pasa esto, mi corazón se acelera y siento un cosquilleo extraño en mi vientre.

Veo hacia la puerta y esta entrando un hombre como de 27 años, omg es hermoso mide como 1.80 tiene el cuerpo bien trabajado, cabello negro y esos ojos..... diablos sus ojos son hermosos.

No, no señor April tu tiene ojos solo para Jack así que calmate. ¡Ay por dios! viene hacia acá.

— Hola, ¿qué que van ah querer?, ¿un vodka? ¿una cerveza? ¿un tequila?— y todo eso salio de mi boca sin sentido alguno, y es que cuando me pongo nerviosa tiendo a hablar mucho, no entiendo por qué estoy tan nerviosa.

Ya cállate

— Tres cerveza, por favor— ordena, yo asiento y le guiño el ojo.

¿Le acabo de guiñar el ojo? ¡¿Que mierda me pasa?!

Tiene una voz ronca, pero hermosa de verdad que yo me estoy volviendo loca.

—Enseguida —digo y le guiñó el ojo.

O le guiñe el ojo de nuevo o se me activo un tip nervioso. Calmate April pueda que no se haya dado de cuenta.

— Aquí tienen sus cervezas— las dejo sobre la barra y ellos las toman.

— Oye hermosa, ¿Cómo te llamas?— pregunta el rubio con coquetería.

El pelinegro suelta un ¿gruñido?

— April, ¿y tú?— pregunto confundida.

Es raro que los cliente sean amables así que bueno hay que aprovechar y además no se ven que sean malas personas.

El rubio me estiende su manos y habla;

— Mucho gusto, April, yo soy James— yo le estrecho la mano y sonrió.

El tercer chico el de los ojos de colores diferentes hace a un lado a James.

— Y yo soy Connor mucho gusto, pequeña— al igual que con James, estrecho la mano de Connor a modo de saludo y le dedico una sonrisa amable.

— El gusto es mío, Connor.

— Y este ogro de aqui— señala al hombre que me pone los pelos de puntas— tranquila es inofensivo, es Adam nuestro jefe y mejor amigo.

No puedo evitar reír y el ogro digo, Adam enfoca su mira en mí....bueno creo que no había dejado de mirarme.

— Un gusta conocerte también a tí, Adam— le guiño el ojo, y voy a atender a los demás cliente.

Después de un rato decido que es mejor irme me siento rara estoy nerviosa, las piernas me tiemblan y la mirada del tal Adam sobre mí me está dando miedo.

No puedo estar aquí le voy a decir ha Nate que se me presento una emergencia familiar.

—Nate, necesito irme se me presento un problema familiar— miento

— Oh, ¿necesitas algo?— pregunta con preocupación.

— No Nate, está bien yo solo debo irme.

— Esta bien, pero corre niña que estas pálida de la preocupación— exclama y corro a recojer mis cosas.

Si supiera que no es por la preocupación es por los nervios que me causa el chico que esta en la barra. Busco mis cosas y me voy a mi casa.

******


Dos hora después estoy en casa, acostada en mi cama, pensando en el tal Adam y no es que mi casa quede muy lejos del bar en realidad solo esta a dos cuadras de mi casa.

Escucho que tocan la ventana y voy abrir por que eso solo lo hacen Brad y Jane, abro la ventana y abro los ojos con asombro cuando veo a el chico del bar allí parado, retrocedo y él me agarra por las cintura enterrando su cara en mi cuello.

— Mía— exclama y siento como inhala en mi cuello, causando que me estremesca.

—Yo no soy tuya, alejate de mi quítate— le digo, tratado de quitar sus manos de mi cintura, pero me es imposible— ¿que haces en mi casa, maldito loco? Quítate.

— Eres mia, y vendrás conmigo— habla en susurro.

— Claro que no im....

En ese momento  una chica aparece de la nada dice unas palabras que son intendibles para mi y todo se vuelve negro.

____________________________________

Hola, espero estén bien😇

Recuerden seguirme en instagram: @Guillerby_rodriguez20

Siempre Fuiste Tú.©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora