Se esfuma tu amor

Capitulo 7. Mudanzas

Se quedó pensativo, sin decirme nada Yakov estaba en la puerta observando en silencio - Soy Yuuri Katsuki, tengo 23 años, ciego desde hace 6, perdi la vista en un accidente donde murio mi hermana y padre, enseño en un centro para débiles visuales, desde hace varios años y... sere tu omega.

Un chico silencioso, un hombre perdido entre recuerdos, entre desilusiones, un niño temeroso de la vida, un solitario más en este mundo, el era como yo, no solo compartíamos la desgracia de que nuestras parejas se fugaran juntas, también compartíamos la soledad, ella nos abrazaba, era parte de nosotros, puedes dejar de sentirte tan solo en el mundo, cuando encuentras a alguien como tu?.

Fue dado de alta del hospital, fui por su perro, mi departamento era de un buen tamaño, la habitación que le di, era para visitas imprevistas, el llegando, caminaba por las habitaciones, un paso a la vez, tratando de memorizar donde estaban las cosas, no debia de mover nada de lugar, tire todo lo que pudiera hacerlo tropezar, mi vida cambiaba con su sola presencia, me amoldaba a el, y el no me pedía nada a cambio, era un chico que no pedia demasiado, sentirse acompañado era suficiente para que el pudiera estar en paz.

Fui por su cosas a su pequeño y modesto hogar, todos sus vecinos me miraban con curiosidad, mientras Yakov y yo sacabamos todo, su ropa, y demas objetos que guardaba celosamente, entre ellos, varios trofeos, diversos reconocimientos, y varios videos en cajas llenas de polvo, algunas fotos el lucia diversos trajes con bordados brillantes, no tenia que deducir nada, debio tener una vida que dejó atras, tras perder la vision.

Cada caja fue puesta en mi garaje, aquellos dvd's llamaban mi atención, los puse en mi lap top mientras el dormia, cual fue mi sorpresa de verlo bailar, sus piernas danzaban al compas de la música, el cerraba sus ojos, mientras las notas musicales lo acompañaban, I Have Nothing se escuchaba de fondo, mientras el parecía no tocar el piso, sus manos eran una expresión mas para que el expresará el amor, al final era elevado por los aires, cayendo en los brazos de aquel chico, ahora entendia porque no podía deshacerse de ellos.

- Hola... Tu tampoco puedes dormir? - me dijo, mientras caminaba hacia mi, la musica se escuchaba por las bocinas, mi cara se sonrojó, estaba seguro que el se habia dado cuenta de que habia tomado el atrevimiento de ver sus cosas - Lo conocí en la academia de danza, era mi compañero, mi pareja, en todos los sentidos - sonreia con un aire de tristeza - Tenia 15 años cuando lo conocí, el era 2 años mayor que yo, mi familia lo adoraba, era mi pareja destinada, me sentia soñado, tenia tantos anhelos, hasta que tuve aquel accidente automovilístico, sali disparado del cristal trasero por no llevar cinturón de seguridad, 1 mes sin poder salir, lastime mis ojos por los cristales, el no se apartó de mi, pense que era amor, pero era lástima sabes? - bufo con una mueca de desespero - seguia a mi lado, pero deje de bailar, el me marcó pero de qué sirvió?, estar rodeado de tantos omegas atractivos, es obvio que el me dejaría tarde o temprano, un omega como yo terminaría siendo deshechado tarde que temprano.

- Escucha Yuuri - me levanté para sentarme a su lado - no digas eso, no lo menciones, no te hagas menos jamás, el error fue suyo, no tuyo entendiste?, el fue el que se equivoco, no tu, jamas vuelvas a referirte asi de ti, oíste?.

- Porqué eres tan bueno conmigo?.

- Ya te lo dije, somos compañeros de dolor.

- Gracias, de verdad gracias - movio sus manos hacia mi hombro, tanteando torpemente, posando con temor sus dedos en mi rostro, al ver que no lo apartaba de mi, tocaba cada uno de mis rasgos, uno a uno, hacia muchos gestos, varios de sorpresa - Eres atractivo?.

- Porqué lo dices?.

- Debes serlo, siento que es asi.

- Soy un tipo ordinario, deberiamos ir a dormir, es tarde - me sonrió, me ofrecí a llevarlo a su habitación pero el no me dejó, en la oscuridad de mi habitación, me sentia aun mas cansado, mi cama estaba vacia, recordando aquellos dias en los que una melena rubia era lo primero que veia al despertar.

Mi lobo volvía a golpear mi pecho, golpes tan fuertes, que me hacian quejarme, me senté tratando de respirar profundo, aun el aroma a jazmin seguía presente en aquella fría habitación, soy un hombre lamentable, miré mi celular las 4 am, y no habia podido cerrar los ojos, caminé hacia la cocina, pasando por su habitación, escuchando sollozos apenas audibles, que me hacían sentir aun más ansioso, abri la puerta para ver algo que rompio mi corazón, sentado en la esquina de la habitación hecho una bolita, llorando tapando su boca, tratando de ahogar sus lamentos, di unos pasos hacia el asustandolo - Ven... - le ayude a levantarse, cargandolo hacia la cama - si quieres llorar haslo, no te reprimas entendiste?.

Apreto sus puños jalandome de mi ropa, dejando salir sus lamentos, para el tambien la noche era fria, llena de recuerdos, dolorosos, el tambien sufria de soledad, me acomode a su lado, tape nuestros cuerpos, brindandonos calor, quedandonos dormidos, dos seres llenos de melancolía, tu seras mi medicina, yo sere tu consuelo.