Capítulo #24

3K 212 63
                                    

—¡Madre mía! ¿Puede llegar ya el puto sábado? —grita Danielle mirando al cielo con desesperación—. Tía... Que te haya contestado a la historia nos da mucha información en esta historia. Quiero decir... ¡Ni yo te hubiera respondido a esa foto de mierda! Ella no tenía por qué hacerlo y lo ha hecho. ¿No has pensado que estaba esperando con ansias un momento así contigo?

—A ver, me cuesta un poco creer que quisiera ir a tomar una cerveza conmigo.

—¡Pero te ha respondido sin tener por qué! —da una palmada delante de mi cara para hacerme espabilar—. ¿No crees que es un poco raro?

—Es... excitante —respondo con una divertida sonrisa.

—Tú vives excitada desde que la conociste.

Le doy un cariñoso empujón seguido de un abrazo. Estoy emocionada y muy feliz en este momento, no lo puedo camuflar.

—¡Qué fuerte, te la vas a tirar, no me lo creo!

—¡Danielle! —digo mirándola fijamente.

—Sarah, ¿estás nerviosa? Porque yo si —dice de manera divertida—. Si quieres algún consejo dímelo, no te avergüences. Acostarte con una de cuarenta funciona igual, supongo.

—Qué responsabilidad —susurro empezando a notar el calor por todo mi cuerpo—. Ella tendrá mucha más experiencia que yo, si realmente llegamos tan lejos, no la puedo decepcionar. De verdad que es una gran responsabilidad.

—Como te pongas a pensar que no vas a estar a la altura, entonces realmente no estarás a la altura —explica Danielle.

—No quiero hablar más de esto, me estoy poniendo histérica.

—Déjate llevar. Simplemente déjate llevar —me mira con una maléfica sonrisa—. Además, por lo poco que la vi aquel día tiene pinta de que es ella la que llevará las riendas.

Alzo las cejas sorprendida de escuchar esto. La verdad es que yo pienso lo mismo. Bridget tiene toda la pinta de ser la dominante. Y me encanta pensarlo.

—Si ves que el ambiente está ardiendo y no se lanza, hazlo tú. Porque te juro por tu madre —me señala con el dedo—, que ella está esperando a que tú lo hagas. No encuentro otra explicación a todos sus actos.

Suspiro quedando pensativa. Supongo que Danielle tiene razón. Siempre la tiene. Esta conversación me está empezando a poner muy nerviosa, quiero cambiar de tema pero parece que mi amiga está demasiado emocionada con lo que va a pasar el sábado.

—Tía, ponte guapa. Yo de ti iría preparando ya la ropa. Y piensa antes de ir, temas de conversación para hablarle.

Sonrió de lado y la miro.

—Joder, ¿también tengo que llevar temas de conversación pensados?

—Es para que no te quedes en blanco y te bloquees.

—No te preocupes tanto por mi.

—Yo solo quiero que folleis —dice bajando la voz.

—Danielleeee —le digo riñéndole.

La conversación con mi amiga no se basa en otra cosa que no sea Bridget. Ella no para de darme consejos e incluso comienza a hablarme de posturas sexuales. Realmente me está poniendo de los nervios porque no dejo de imaginar cómo será mi encuentro con Bridget.

—Y los besos... —sigue diciendo—. Los besos son muy importantes, Sarah. Tu siempre de menos a más. Haz que se muera por que le comas la boca con todas tus ganas.

Me llevo las manos a la cara y suspiro con fuerza. No aguanto ni un minuto más escuchando a Danielle hablando así. Sobre todo porque... me estoy poniendo muy cachonda.

Llámalo DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora