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Era domingo. Se habían tomado el día libre y se lo había dado a Emanuel también para que ambos pasarán tiempo con sus omegas. Emilio se encontraba viendo un programa de televisión mientras Joaquín dormia en la habitación.

El Alfa estaba tan entretenido en el programa que no olió al Omega cuando entró en la sala.

El omega había entrado en su tercer mes y medio. Su bultito se notaba más y Emilio había estado besándolo siempre que podía y hablándole al bebé. Joaquín se había embobado más con su Alfa.

El omega apareció en el campo visual de Emilio, con sus ojitos dilatados.

Y jodidamente necesitado.

-Hola, girasol- el mayor trató de quitarlo de enfrente para no perderse nada del programa. Joaquín no le respondió si no que se subió al regazo del rizado -Wow, Joaco.

Joaquín se inclinó para besar los labios de su Alfa, tomando las manos de él y colocándolas en su cadera pidiéndole que apreté. Jadeo cuando Emilio lo hizo.

-Amor- murmuró Emilio, siendo otra vez interrumpido por los labios de Joaquín.

El chiquillo se empezó a mover en círculos encima del Alfa, gimió al sentir el lubricante empezando a tomar su camino para salir de él. Mordió el labio del Alfa un poco.

El aroma de Joaquín olía a excitación, el ambiente en la habitación se volvió pesado, envolviendo a ambos en una pequeña burbuja. Emilio gruñó cuando sintió a su pequeño dar un brinco en su regazo.

-Espera, Joaco. Cuidado con el bebé- Emilio besó la mejilla de Joaquín.

-Mmm- Joaquín chilló tratando de quitar la camisa de Emilio.

-Bebé, espera- murmuró el Alfa, ayudando a quitar su camisa -Mi vida, espera. ¿Qué pasa?

-Alfa, estoy caliente- respondió
-Alfa, por favor- lloriqueo.

Emilio sabia que eran las hormonas del embarazo, había estado investigando para ayudar a su bonito en todo lo posible y además sabía que tenía que ser por eso ya que por lo general cuando su chico quería tener sexo, empezaban primero con mimos.

-Bien- lo tomó de los muslos y lo recostó con suavidad en el sofá, las piernas de Joaquín quedando en sus hombros.

El omega se removió. Emilio besó sus piernas bajándolas con cuidado de sus hombros. Joaco se quejó.

-Emi...

El Alfa tomó las rodillas de Joaquín y abrió sus piernas un poco rudo, sacando un jadeo de éste. Se subió encima de él cuidando de no aplastarlo o incomodarlo. Con su lengua delineó los labios de Joaquín para luego chupar el inferior y por último tomar un beso rudo.

El omega gimió, cuando sintió la lengua de sus Alfa encontrarse con la suya, y por si fuese poco Emilio la chupo. Él, volvió a gemir.

Emilio se separó del beso. Quitó la camisa que el ruloso llevaba puesta, una camisa de él por cierto, lo dejó en bóxer y medias, pasó la mano por todo el torso de su chiquillo y suspiró.

-Eres tan precioso- se inclinó para dejar un besito en el vientre del omega,y otro más y otro -Muy precioso.

-Alfa...

-Shhh, relájate. Yo te haré sentir muy bien, mi amor.

Emilio se volvió a inclinar solo que está vez un poco más arriba. Dejó un beso en las clavículas de Joaquín, su segundo hogar.

-Jodidamente hermoso, pequeña flor- delineó con la lengua la clavicula de su Omega, bajó un poco más hasta llegar a un pezón, lo lamió, sopló aire haciendo a Joaquín arquearse -Tan dócil.

Su lengua contorneo el borde de la areola y luego succionó, hasta dejarlo erecto.

-Tan sumiso.

Joaquín mantenía los ojos cerrados y una respiración irregular, el lubricante saliendo de su entrada y goteando en la camisa de Emilio ya que el Alfa la había puesto debajo de él.

El rizado se dirigió al otro pezón.

-Siendo tan bonito- succionó. Joaquín soltó un gemido largo y agudo -Llevándome a la gloria.

Bajó de nuevo al vientre de su Amor y dejó tres besos en él.

-Te ves tan hermoso llevando mi cachorro- alagó el Alfa. Emilio bajó el bóxer de Joaquín, dejando ver la erección del pequeño pene del Omega-¿Te gusta llevar mi cachorro?

Joaquín gimió. Pero gruñó al no tener una respuesta.

-Responde.

-Si, amo llevar a tu cachorro. Alfa, por favor- susurró Joaquin, ido en su propio placer.

-Buen y bonito omega- el Alfa se levantó para quitar lo faltante de su ropa, dejando a la vista su erección. Joaquín volvió a gemir.

-Voy a probarte tan bien.

Joaquín sostuvo con sus manitas la mata de rizos de Emilio para empujarlo hacia abajo.

-Omega desesperado.

Emilio se hizo paso entre las piernas de Joaquín, dejandolas dobladas a cada lado de su cabeza. Tomó con ambas manos las mejillas traseras de su pequeño Omega y dejó a la vista el agujero que goteaba lubricante.

Lamió desde la parte baja hasta la entrada, Joaquín se removió inquieto por la ola de placer. El mayor hizo el proceso de nuevo causando un gemido agudo y alto, demasiado alto de el Omega.

-Al...¡OH!, Alfa- lloriqueo.

Emilio se levantó, demasiado cegado ya por el placer de tomar a su omega y hacerlo suyo ya, beso los labios de Joaquín en un tierno beso y se introdujo lento en su entrada.

-Mmm...

-Shh, no te muevas te puedo lastimar- recordó Emi. Joaco asintió con los ojos cerrados, sus pequeños ricitos pegándose a su frente -¿Me puedo mover?

-Si, si, por favor- rogó Joaquin y su alfa solo sonrió.

El Alfa se movió con delicadeza tratando de encontrar un ritmo placentero para ambos, cuando encontró el ritmo quiso ir un poco más rápido.

Joaquín era un lío de gemidos, era ruidoso y joder Emilio amaba eso.

-¡AH, DIOS!- gritó el omega cuando Emilio encontró su punto dulce
-Oh-uh. Emilio, oh cariño más...

El Alfa trató de acelerar el movimiento sin se tan brusco.

-Oh, Emi, por dios ¡si!- Joaquín sollozaba de placer al ser bien atendido por su Alfa -¡OH, Baby!

Emilio sonrió, se inclinó para succionar un pezón.

-¡Mmm!, Alfa- llamó. Emilio alzó una ceja, incapaz de hablar por las estocadas que daba en su bebé -Beso.

Emilio acudió a su petición y lo beso suave. Jugó con los pezones del Omega y él terminó corriéndose.
Unas estocadas más y Emilio se corrió en su interior, su nudo sin formarse debido a que Joaco, ahora, estaba embarazado. Se volteó, dejando al omega encima de él.

-Gracias- agradeció el pequeño, pero caliente Omega.

Emilio frunció el ceño.

-No me agradezcas por tomarte, Omega.

-No. Gracias por escogerme a mi- Emilio sonrió, dejando un beso su mejilla.

-Te escogería una y mil veces, mi amor. Es está vida y en las otras siempre eres mi bebe.




























































































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Hola cariños. Cómo están?

_¡Feliz día del libro! ✨

_Vamos a hacer capítulo doble por el día que tanto amo 😼

Les quiero 🖤

Baby [Emiliaco-omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora