Capítulo 06

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Por la mañana, lo primero que hizo fue verificar el estado de Kai, algunas lágrimas se habían secado en sus mejillas, aclarando sus sospechas.

Había despertado durante la madrugada, y Kai le daba la espalda, pero pudo oír claramente cómo había dejado escapar un débil sollozo, y sólo atinó a abrazarla por sobre los hombros, pegándola a su pecho y fingiendo seguir dormido. Quería darle confort, sí, pero también quería que se desahogara en algo que claramente no quería contarle, pues preguntó varias veces durante la tarde y no recibió respuesta.

Ahora la veía dormir, los rayos del sol reflejaban en su rostro, así que colocó su mano por encima de este para evitar que se despertara.

-Te cansarás- murmuró somnolienta

-Oh, estás despierta- sonrió sin bajar la mano- parece que fallé

-Sí- se incorporó- fallaste miserablemente- agregó con gracia antes de bajar los pies y quedar sentada al filo del colchón

Se estremeció al sentir el frio suelo y se planteó la idea de volver a la cama, pero definitivamente debía asistir a clases hoy, aunque tampoco le hiciera mucha gracia. Esperaba que lo que había pasado ayer sólo fuese un sueño, un extraño, lindo y con final doloroso, sueño.

-Buenos días a ti también- se quejó el otro cuando la chica tomó una toalla del perchero y se dirigió al baño- ¿Sabes? Me siento usado, como si sólo hubieses...- y paró de hablar cuando la puerta se cerró y dio paso casi enseguida al sonido de la ducha

[...]

-¿Te sientes bien?

-Por supuesto- colocó un poco de bálsamo en sus labios mientras se miraba en el espejo, hizo un gesto con los mismo y después se dirigió a él- no era necesario que me trajeras

-Estoy de buen humor

-¡Woah! Tan servicial- bajó del auto y dio la vuelta a este para quedar del lado de la ventanilla del conductor- gracias, ten cuidado al volver a casa

-Eres una novia muy extraña, ¿Sabes?

-Supongo

-Cualquier otra le hubiese dado un beso por lo menos a su novio por ser tan considerado, o no sé, un premio

Kai sonrió ante esto y apoyó ambas manos en la puerta, ya que Raiden seguía dentro del auto, tuvo que sacar un poco la cabeza para verla mejor.

-¿Qué eres? ¿Un cachorro? Dame algo de crédito, eres mi primer novio- golpeó levemente su cabeza con el nudillo del dedo índice- aunque claro, puedes irte cuando quieras, pero sé que no quieres, y haces bien. Te veo más tarde, ca-ri-ño

Y con toda la elegancia que desprendía desde que la conoció, la vio caminar hacia la entrada del edificio, la había molestado un poco, sólo para verificar su estado. Le costaba creer que esta Kai fuese la misma que parecía haber perdido un poquito de color ayer.

[...]

-Hola, Kai

-Hola

Intentó responder amable sin siquiera molestarse en recordar su nombre, estaba segura de haber intercambiado un par de palabras con ella en las gradas durante un partido de basquetbol, es una chica que gustaba de Takahiro, así que sabía que su saludo no era por cortesía.

-¿Esperas a Takahiro?- preguntó la otra, sí, aquí estaban las verdaderas intenciones, por alguna razón( y culpaba a Takahiro por esto), algunas personas pensaban que él y Kai podrían haber tenido algo más que una amistad- o tal vez a Raiden

-Dudo que alguno venga a una clase de segundo año

Mentiría si dijera que su comportamiento no le irritaba, ¿Desde cuándo se creía con el derecho de hablarle por el nombre? Si Kai recordase el de ella, la llamaría por su apellido.

Siempre Baboo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora