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Abrí mis ojos de un solo golpe, mi respiración era agitada y un leve dolor de cabeza se hacía presente, coloque mi mano en el pecho y suspiré intentado controlar mi respiración. Ese sueño de nuevo, aunque dudaba que fuera un sueño, era más que todo un bello recuerdo. Uno que lo que parecía adoraba tenerlo en mi mente.

Ya era algo normal a estás alturas de mi vida, pero aún así no quitaba el hecho de que fuera un completo misterio. Un misterio que quería descubrir si o si, aunque dudaba si algún día podría hacerlo. Ya era normal.

Gire mi vista hacia la puerta de mi habitación, por ella entro mi padre como siempre con su semblante serio. Había olvidado por completo el hecho de que mi hermana estaría en unas horas aquí. Tome postura y le sonreí.

—Ire por tu hermana—hablo mi padre.

—Esta bien—sonreí—Tendré todo listo.

—Si...Bueno, ya sabes no salgas y no le abras a nadie—me advirtió como era de constumbre. 

—Si, no te preocupes papá—y salió dejándome sola.

Llevaba más de cinco años sin ver a mi hermana mayor, la última vez que la Vi fue en víspera de navidad, apenas éramos unas niñas. Bella tenía cinco años y yo cuatro, en ese entonces éramos muy cercanas, las mejores amigas que podían existir en el mundo. Sin embargo luego de esos días perdimos contacto absoluto, papá me decía que la madre de Bella se había mudado de ciudad y era mucho más difícil vernos.

Cabe aclarar una pequeña cosa, Bella y yo no somos hermanas de sangre, sin embargo Charlie nos crío como tal. Mi pasado no es algo que me guste recordar, pero tampoco es el hecho de que no me guste porque gracias a el llegué a los brazos de una persona que siempre estuvo para mí, sin importar las consecuencias.

Mis padres eran mejores amigos de Charlie y en ese momento la madre de Bella, un día como era de esperarse mis padres habían decidido salir a la ciudad. En esos momentos era tiempo de lluvia y como era esperarse toda la carretera estaría en mal estado, así provocando el accidente de mis padres. En esos momentos tan solo tenía unos cuantos meses de edad, por suerte Charlie estaba de turno por esa zona, el ayudo a mi padre y a mi. Mi madre ya estaba muerta cuando el llegó, sin embargo mi padre murió un día después de haber ingresado al hospital. Yo había quedado en coma.

Había muchas posibilidades de que yo muriera, sin embargo eso nunca pasó, me salvaron. Desde ese día fui a vivir con la familia Swan, aunque las cosas nunca fueron perfectas. Charlie y la mamá de Bella se separón, así ella llevándose a mi hermana y yo quedándome con Charlie. El decía que estaba bien, aunque podía notar en sus ojos que eso era una mentira, y por mucho tiempo me culpe de eso, sin embargo el siempre me decía que no era mi culpa, ellos ya contaban con problemas mucho más antes que yo llegara a su vida.

A los meses de yo pasar a ser la hija de Charlie, me adoptó así yo llevando su apellido y ante los ojos de la Ley,  siendo su hija. Desde ese día el prometió protegerme, por una simple razón. Razón que nunca llegue a entender luego de unos años.

Mi vida nunca fue como la de una chica normal, no podía tener el lujo de ser una chica normal, salir de compras, tener amigos, tener novio, no podía asistir a una escuela normal. No podía ser una chica normal. Por mucho tiempo le reclamé, no fue hasta que cuando cumplí los doce años el me confesó mi fea realidad. Siempre supe que no era normal, nada en mi era normal en realidad pero nunca me imaginé que fuera eso...Desde ese día lo entendí y comprendí las palabras de mi padre.

El solo me protegía de todas esas personas que su única ilusión era hacerme daño, así encerrandome en las cuatro paredes de mi habitación. Nadie más sabía nuestro secreto, nisiquiera mi hermana todo eso era con tal de protegerla, a ella y a mi. Todo era por una buena causa.

~Sweet Lie~(Jasper Cullen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora