Chapter 29

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Regresar a tu vida despues de que casi la pierdes es dificil, las cosas en el Distrito 2 se han vuelto dificiles. Hay demasiados Agentes de la Paz que se niegan a dejar las armas, mucha gente que sigue venerando al difunto Snow, protestas, marchas, golpes, insultos. Es como si la guerra en el Distrito 2 nunca hubiera terminado, pero para eso está Gale aquí, para hacer retroceder a los habitantes que meses antes intentó enterrar vivos.

Morgan y yo tratamos de mantener un perfil bajo despues de estar tanto tiempo apoyando a la rebelion asi que solo salimos de casa para lo necesario. Todo vuelve a la normalidad en cuestión de un par de dias y las tropas del Distrito 13 se van a casa.

Retomamos nuestras vidas poco a poco, yo cocino mientras ella pinta cuadros sobre los atardeceres. Morgan y yo nos volvemos a acercar poco a poco. Sigue habiendo momentos en que se agarra al respaldo de una silla y se aferra a ella hasta que acaba el flashback, y yo me despierto a veces gritando por culpa de las pesadillas con mutos y niños perdidos. Sin embargo, sus brazos están ahí para consolarme y, al cabo de un tiempo, también sus labios.

Finnick manda una carta una vez cada mes informandonos sobre lo que sucede alrededor de Panem: La madre de Katniss entrena a las mujeres para que sean enfermeras y puedan atender a los hospitales por toda la nacion. Beetee sigue trabajando para el Capitolio mejorando varias cosas referenteas a la seguridad de Panem. En el Distrito 12 Haymitch, Peeta y Katniss encuentran paz, mi ebrio favorito cría ganzos cuando no esta borracho, Peeta se la pasa horneando y Katniss sale a cazar todas las mañanas. De Johanna no se sabe mucho, solo que está viva, escondida en algun rincón del Distrito 7. Finnick nos sorpende con la noticia del embarazo de Annie, parece que todo va bien.

Nunca falta el momento en el que recuerdo las pérdidas: Greg, Brumer, Mags, Wiress, Brutus, Boggs, Castor... La lista de vueltas y más vueltas, muchos muertos y pocos vivos para recordarlo asi que me propongo algo a futuro. La escritura de este libro en el que hare que las personas no olviden errores pasados para poderlos evitar a futuro, me ayuda como terapia. Cuando le conté mi idea a Finnick, se mostró entusiasmado, tanto que alsiguiente dia, me mando una caja llena de hojas de pergamino.

La página comienza con la imagen de la persona, una foto si la encontramos o, si no, un boceto o un dibujo de Morgan. Después, con la mejor caligrafía de la que soy capaz, anoto todos los detalles que sería un crimen no recordar. Sellamos las hojas con agua salada y prometemos vivir bien para hacer que sus muertes no hayan sido en vano.

Finnick despues se une a nosotras y contribuye con nueve años de tributos a los que se vio obligado a ayudar como mentor. Cada vez añadimos menos cosas: un antiguo recuerdo que aparece de repente, una muerte que inunda nuestros pensamientos, y pequeños trocitos de felicidad, como la foto del hijo recién nacido de Finnick y Annie o la foto de mi boda con Morgan.

Hay varias veces cuando las pesadillas no le dejan recordar con claridad entonces ella comienza a preguntarme cosas sobre nuestra antigua vida y sobre lo que ambas sufrimos en la Arena o la guerra.

Así que, después, cuando me susurra:

-Me amas. ¿Real o no?

Yo respondo:

-Real.

Hunger Games: The Singing of the MockingjayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora