"Donde esta LeeGi"...
JiMin sabía perfectamente que YoonGi, prefiere el café antes que el té.
"LeeLee...- Su cuerpo se desplomó apenas entrado a la casa ajena y abrazando como si lo último que hiciera en su vida a la pequeña que apenas lo escuchó corrió como nunca."
Por eso... en esa noche cuando llegó a su cocina, dudó en si sacar el tarro de café o las cajas llenas de té verde.
"GiGi... - La niña, renovando lágrimas pareto tan fuerte como pudo la chaqueta color verde militar de su hermano mientras en su pecho deshacía la angustia de por fin tenerlo cerca - Ella... ella me apretó muy fuerte... y me.. me aventó al piso. - Cerró sus ojos sintiendo las manos de su hermano pasar una y otra vez por su espalda.
"Ya... no paso nada LeeLee... estoy aquí.. - El mayor cerró sus ojos aguantando la ganas de llorar cada que su hermana hipaba - Todo ya sucedió... estoy aquí."
Y, aunque hubiera preferido preguntarle a YoonGi que preferiría... concluyó que en esa noche fría con gran intención en sollozar agua de nube, era mucho mejor calmar un poco su alma con un té caliente.
"MinMin llegó... - De inmediato YoonGi paralizó y abrió los ojos sin mover aun ni un músculo - Y... Y.. ella sacó un cuchillo, GiGi... - Otra sobredosis de adrenalina se inyectó en sus venas para salir un poco del resguardo para LeeGi y la miró, con los ojos cristalinos y la nariz roja.
"Que?..."
"Mi mamá le apuntó con el... - Más lágrimas salieron para ser olvidadas por unas nuevas - "Y... salimos de ahí... antes que mi mamá-."
Pero cuando llegó a la sala para ver a un YoonGi con una LeeGi en su regazo dormida mientras él descansaba en el respaldo de la sala... sabía que esto iba más de calmar nervios con solo un té.
"Shhh... ya no hables pequeña... todo ya pasó.. - Y al momento en que la vivió a abrazar, sus ojos viajaron al JiMin que está a dos metros de ellos, con la respiración acelerada y el cabello despeinado. Aunque eso le dio la certeza de que él estaba bien, no pudo dejar de ignorar las manchas rojizas en las mejillas de este así como en su frente."
JiMin.. entre el silencio eterno y nudos mentales por parte de los dos... Sonrió tranquilo pero aún con el corazón comprimido y le extendió de forma sutil la taza de té preparada para él.
YoonGi, aun con la cabeza de LeeGi en su pecho y sus brazos enredados en ella; suspiro cansado y de forma casi imposible... pudo poner el cuerpo de la pequeña en el resto del sillón para acomodarla y que durmiera bien.
JiMin fue a un lado del sillón donde estaba el individual y cuando el mayor recibió la taza, de inmediato tomó de la suya disfrutando de las hierbas relajantes y del vapor aromatizado.
El si era de Tés...
Y, aunque el ambiente era demasiado cómodo y a la vez tenso para iniciar una conversación, los dos sabían que nadie se iba a ir a la cama sin antes hablar tan siquiera un poco de lo ocurrido.
Ya sea por necesidad de aclarar dudas, ya sea por el deseo de descargar sus emociones con el otro.
Así que, cuando YoonGi llevó el agua hirviendo a su boca y sintió el sabor amargo de ella... cuando bajó la cabeza derrotado con los codos en sus rodillas y sus dedos quemados por la taza caliente... sabía que era el momento.
- ¿Un.... cuchillo?...
Hizo pausa en cada palabra... como si no congeniaran, como si fiera imposible creerlo.
JiMin apretó su taza en su mano y pasó saliva mirando expectante al que no le veía, al que solo mantenía su mirada en el piso y su rostro denotaba pura tristeza y preocupación.
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ʜᴀɴᴀʜᴀᴋɪ-ᴍ.ʏɢ~ᴘ.ᴊᴍ
FanfictionYoonGi, un estudiante de universidad donde se encontraba en su último año. Aunque no lo pareciera él no era como los demás...tenia una enfermedad muy extraña donde no podía experimentar ningún tipo de emoción o sentimiento. Pero ese no era el proble...