Mía Selene Stone, guapa, inteligente, rica, exitosa, segura de si misma, desconfiada Y dedicada, ella tiene todo lo que podrías desear, pero no es feliz, le falta algo, carga un enorme peso y la culpa no la deja dormir bien, ella solo quiere consegu...
Tengo hambre, mucha hambre, debo tener unas 24 horas aquí, y antes de venir no desayune nada, me acerco a los 5 pacientes y voy chequeando sus signos vitales y si tienen algún síntoma nuevo, 3 de ellos ya están inconsciente y los medicamentes no le bajan la fiebre, por lo que recurriré a mis conocimientos, a lo que me enseño la tía Sharon de las plantas medicinales, tal vez funcione, no pierdo nada intentándolo
Termino de escribir en la Tablet, bien, los lobos tienen una gran conexión con la naturaleza, puede que encuentre la cura en alguna planta, necesitare examinar e investigar unas cuantas, creo que Karim podría ser de ayuda, me quite la bata y los guantes y emprendí mi viaje a la mansión, algunas personas me miraban y sonreían mientras hacían una leve reverencia, creo que saben que soy la mate del Alpha, entre a la casa, todo estaba en silencio, una chica me vio y se acercó rápidamente
XXX: luna ¿la puedo ayudar en algo? –preguntó amable
Selene: quiero saber dónde está mi cuarto y bueno, muero de hambre –hablé y bostecé
XXX: claro Luna sígame –me dijo y comenzó a guiarme
Me llevó al segundo piso y me mostro una puerta, le agradecí y entre, me fui directamente al armario, al abrirlo estaba mi ropa junto con la de hombre, supongo que es el cuarto del Alpha
Tomé un conjunto que creo me lo regaló Rubí y me dirigí al baño, entré cerré con seguro, me desvestí y puse mi ropa en una bolsa, la cerré bien y la puse en el cesto de la ropa sucia, luego abrí la regadera y deje que el agua fría me empapara, bien, eso servirá para quitarme el sueño y eso fue lo que paso, sentí como mi cuerpo despertaba, suspire y seguí duchándome
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Salí de la ducha y me puse en conjunto, es un conjunto deportivo rosado, yo prefiero el azul, pero bueno, me puse lo tenis
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pero luego me arrepentí, dure más de 24 horas con unos botines, me quite los tenis junto a los calcetines y salí del baño con ellos en la mano, los puse al lado de la cama y me dirigí a la cocina, sip, descalza, y no saben lo bien que se siente, entré a la cocina y vi a la señora Leonora preparando algo en la cocina
Leonora: me enteré de que habías salido del laboratorio, pensé que tendrías hambre, así que te preparé algo –dijo mientras yo me sentaba en el desayunador y ella puso un plato grandísimo delante de mí y comenzó a echarle un líquido negro
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