MI MATE ES UNA VIROLOGA

Cap. 44 (Volví)

Ryan: ¿A dónde me llevas? –preguntó y yo sonreí

Selene: ahora tú eres el que está ansioso por saber ¿Qué se siente? –solté una carcajada

Ryan: me siento extasiado la verdad –se cruzó de brazos en el asiento

Selene: ¿Por qué eres tan guapo? –pregunté en un suspiro mientras lo observaba

Él le quitó la atención al paisaje que observaba desde la ventana del taxi y me miro mientras sonreía

Ryan: ¿crees que soy guapo? –preguntó, se escuchaba extasiado

Selene: eres demasiado guapo para mi gusto –hice una mueca, alargue mi mano y despeine su cabello, pero eso solo le dio un aire más sexi y salvaje --¿no puedes solo verte mal? –gruñí

Ignore su risa, y miré el cuello alto de su suéter

Alargue mi mano y lo estire, tratando de cubrir su rostro, solo le llego un poco más arriba de la nariz, así que luego le acomode la capucha, pero era igual de malo, se veía misterioso y peligroso, de ese tipo de peligro que estás dispuesto a correr con tal de tener su atención, y a él obviamente, pero eso era mejor a nada

Selene: listo, de ahora en adelante cubrirás tu rostro siempre –lo señale

Ryan: ¿por qué? –preguntó, la diversión se filtraba en su voz

Selene: para que nadie te miré obvio –miré mis uñas de manera distraída –no quiero tener que comenzar a degollar a cada chica que te mire –le di una sonrisa angelical y él soltó una carcajada

Ryan: pero yo solo tengo ojos para ti –puso el cuello de su suéter en el lugar en el que debe estar, su cuello, no cubriendo la mitad de su rostro

Selene: lo se cariño pero las chicas no tendrán ojos para mí, los tendrán para ti –aseguré volviendo a estirar el cuello de su suéter

Ryan: entonces tu deberías de estar igual, muchos hombre te miran todo el tiempo –se quejó volviendo a descubrir su rostro y sacándose la capucha

Selene: pero no es justo –me cruce de brazos –tu solo debes de dar una mirada e intimidas a todos los hombres, pero yo no inspiro miedo

Ryan: no, inspiras ternura –me apretó los cachetes y yo lo miré mal –no de hecho cuando pones esa mirada sí da miedito –aseguró y yo sonreí satisfecha

Miré al frente y por el espejo vi al taxista sonreír tiernamente por nuestra escena

XXX: son una pareja muy bonita –habló el señor taxista

Ryan: cierto que sí –sonrío abrazándome por los hombros

XXX: sí, su relación parece ser muy sólida –aseguró –y mira que tengo experiencia con eso, llevo 50 años con la misma mujer

Observe por el espejo como sus ojos brillaron cuando menciono su matrimonio

Selene: eso es mucho tiempo –sonreí enternecida

XXX: Sí lo es, los mejores 50 años de mi vida –aseguró –y ustedes ¿Cuánto tiempo tienen juntos? –curioseó

Ryan: hace un año –contestó por mí y yo sonreí

Hace un año el me reclamo como su mate y yo lo amenace con castrarlo si se acercaba a esa chica de la cual ni siquiera recuerdo el nombre

XXX: ¿piensan casarse algún día? ¿Formar una familia?

Miré a Ryan, quién también me miraba sonriendo, aunque sé que el también esperaba mi respuesta

Selene: no tenemos prisa, todo pasara cuando deba pasar --sonreí

XXX: eso es bueno, al menos ustedes están listo, pueden hacerlo cuando sea que deseen –aseguro deteniendo el auto –llegamos

Selene: fue un gusto conocerlo –le pague

Ryan y yo nos despedimos y él observo a su alrededor, era una residencia de personas con dinero, con mucho dinero

Ryan: ¿Me presentaras a alguien? –preguntó confundido

Selene: no –dije secando el sudor de mis manos en mi abrigo

Hacía mucho tiempo no me ponía nerviosa, bueno, hace mucho tiempo que no me pongo nerviosa por algo que no sea Ryan y sus ataques de coquetería

Tomé su mano y nos guié a la última casa, me paré frente a la puerta y solté un suspiro tembloroso

Mamá, papá, volví a casa, al fin volví

Selene: esta es –carraspee incomoda cuando mi voz salió aguda –esta es la casa en la que crecí –dije finalmente, metí mi mano izquierda en mi bolsillo y saque la llave –no había vuelto desde esa noche –abrí la puerta y lo deje pasar primero

Tras un suspiro entré y cerré la puerta detrás de mí

Ryan paseaba por la sala observando todo con curiosidad, tomó un cuadro entre sus manos y sonrió mirándolo, me acerqué a él a paso lento y observe porque sonreía

Era una foto mía con 5 años, sonreía ampliamente, mostrando con orgullo los agujeros de mis 4 dientes faltantes

Ryan: eras una niña muy adorable –aseguró y me miro --¿puedo quedármela? Por favor –puso cara de cachorro abandonado

Tomé la foto de sus manos y el deje devuelta en la repisa

Selene: tengo esa misma foto en alguno de mis muchos álbumes –sonreí un poco y miré la escalera –pero olvide donde están, sé que en mi habitación, pero no recuerdo exactamente donde –tomé su mano y subí las largas escaleras llevándolo conmigo

Me detuve al final del pasillo, abrí la puerta y lo deje pasar

Ryan: linda habitación –se burló y yo sonreí

Selene: la odiaba –asegure –pero papá se esforzó mucho decorándola, así que fingía que me gustaba –le guiñe un ojo viendo la habitación pintada de un rosa chillón y con princesitas por todos lados

Me acerqué a la cómoda de la cama y la iba abrir para ver si los álbumes estaban ahí, pero recordé donde estaban

Me dirigí al armario y lo abrí, me agache y aparte la ropa, divise una caja de madera y la tomé sacudiéndola