MI MATE ES UNA VIROLOGA

Cap. 38 (¿Por qué perdiste el control?)

Niniel Pov:

Y ya llego ese día, he tratado de retrasarlo lo más que pude, pero Ryan y Selene son los líderes de una manada, deben volver

Niniel: ¿Estás seguro? –le pregunté a Ryan nuevamente, quién tenía a una Selene dormida en sus brazos

Ryan: vamos –asintió

Puse mi mano en su hombro y nos transporte a la sala de la casa de Ryan, el no perdió tiempo y fue a dejarla a la habitación mientras yo me limite a sentarme en el mueble

Ya solo estaba esperando, no tardaran mucho en notar nuestra presencia, y tal y como pensé la primera en aparecer fue Rubí quién me miro de forma inquisitiva, detrás de ella venía Linnea, su mate, hermano y la familia de Ryan

Rubí: ¿Cómo está Selene? –se apresuró en preguntar y yo alce mi ceja

Niniel: ¿Te interesa siquiera su bienestar? –solté con una tranquilidad que sinceramente no sé de donde saque –Solo les pedí una cosa, solo una –miré a los presentes en la sala –que dejaran a Selene descansar, porque no podía tener emociones fuertes, ni siquiera les impedí acercarse del todo, solo sería hasta que se recuperara, pero no, les valió mierda su salud y ahora que te quede claro Rubí Hamilton –me levante y puse mis manos en mi espalda –tú atravesaste a Selene con una espada, mataste a 2 de sus hijos y como si eso no te hubiese bastado fuiste por el tercero, casi matándola a ella en muchas... demasiadas ocasiones

Rubí: No me faltes al respeto, soy tu princesa –murmuró y yo sonreí con sorna, sin poder evitarlo –además fue un accidente, y-yo perdí el control –tartamudeo un poco al final

Niniel: ¿Y por qué perdiste el control, protectora del día? –borré la sonrisa de mi rostro --¿fue mucho poder para ti? ¿No pudiste controlarlo? –No dijo nada, solo apretó los labios y aparto la mirada --¿No eras lo que querías? ¿No buscaste aumentar tu poder a toda costa? ¿No querías ser más poderosa que Selene? –No respondió y yo continúe --¿qué pasa? ¿Te cortaron la lengua? –ladee un poco la cabeza

Rubí: Tú... --dijo enojada, pero se detuvo, al parecer sin saber que decir

Niniel: No fue un accidente, no hagas pensar a todos que si lo fue, Tú lo sabes, yo lo sé, Selene lo sabe y Eridian también –murmuré e incluso escuché como dejaba de respirar –tus instintos te guiaron a hacerlo ¿cierto? Todo lo que hiciste para incrementar tu poder fue inútil, lo único que lograbas era cederle de tu poder a tus instintos y tus instintos sabían que era imposible que fueras más poderosa que Selene, si querías llegar a serlo ella debería de dejar de existir, pero todo cambio con su embarazo, por eso reaccionaste tan mal, ahora esos cachorros también serían herederos del poder de Selene, y lo serían mucho más porque su padre es un Alpha de linaje puro y uno de ellos sería futuro rey de los dragones –susurré e hice una pausa para lamer mis labios y mirarla fijamente

Niniel: las ganas de ser el ser más poderoso te hicieron olvidar muchas cosas, número uno y la más importante, si quieres tener más poder del que naturalmente te pertenece debes de dar algo a cambio, algo muy, muy, muy valioso, el precio es un Alma, y no cualquier Alma, es el Alma de tu primogénito –señale su estómago –número 2, el día nunca será más poderoso que la noche, número 3, si la noche falta todo el universo lo sufriría, además te olvidaste de un pequeñísimo detalle, Yo soy la noche, Selene es protectora de la noche porque es mi jinete, y hay muchas otras más, de las que estoy segura no tuviste en consideración ninguna

Me acerqué unos cuantos pasos y me detuve cuando Linnea la puso a su espalda y tomó postura defensiva

Linnea: Aléjate de mí jinete –dijo en un rugido

Niniel: qué curioso, es lo mismo que yo le dije a ella ¿y lo hizo? –en mis manos crecían bolas de fuego que aumentaban cada vez más su tamaño

Me había dado cuenta de que Ryan estaba a mi lado y tenía sus garras y colmillos fuera

Selene: ¿Ryan? ¿Qué sucede? –resonó su suave voz por toda la sala

Deshice las bolas de fuego y me gire encontrándome con Selene que se tachaba los ojos y soltaba un bostezo

Niniel: ¿Qué haces aquí? ¿Deberías de estar descasando? –me encamine hacia ella

Miré a Ryan brevemente quién me asintió

Niniel: vamos Sele –la abracé por los hombros y ella se dejó guiar devuelta a la habitación

La ayude a acostarse y la arrope mientras ella me miraba

Niniel: Ryan estará bien, solo es una pequeña discusión –aclare y ella asintió un poco

Selene: ¿te quedas conmigo? –preguntó

Niniel: claro que sí, tu duerme tranquila, que yo te cuido –le susurre y ella asintió cerrando los ojos