Cap. 34 (tienes que volver)

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Vi a Ryan quién tenía un extraño brillo en la mirada, que no pude descifrar y antes de que pudiera reaccionar me abrazó, mi cuerpo se tensó y se puso alerta, no lo pude evitar

Ryan: vuelve por favor, Sele, quiero estar para ti y para el cachorro –susurro y sentí su caricia en mi cabello, pero mi cuerpo seguía tenso

Selene: no puedo, tengo que volver al lugar donde eh estado –dije y sentí como me apretó más contra el

Ryan: Sele, por favor, me volveré loco si te vuelves a ir a no sé dónde, no me sigas alejando –en su voz se escuchaba su suplica y aunque quisiera no podía ignorar eso

Me separé de él y busqué con mi mirada a Niniel, quién estaba un poco alejada de nosotros para darnos nuestro espacio, ella me sonrió maternalmente y asintió con la cabeza, mi vista volvió a Ryan, quién acariciaba distraídamente mi vientre abultado

En cuanto le di una respuesta afirmativa, él se apresuró en ayudarme a ponerme de pie y acomodo un poco mejor la manta sobre mis hombros, mientras me abrazaba por los hombros y me atraía a su cuerpo, Niniel se acercó y coloco una mano sobre los hombros de cada quién y nos transportó, a la sala de la casa de Ryan, todos estaban en la sala, pero no miré a nadie

Me concentre en la punzada de dolor que apareció en mi vientre, pero no es por él bebe, es por mi herida que aún no sana

Niniel: apártate un poco –le dijo a Ryan y me ayudo a sentarme en un sofá, para luego agacharse frente a mí y tomar mi rostro entre sus manos

De inmediato comencé a sentir alivio a la vez que me daba más energía, un suspiro tembloroso salió de mis manos y fue cuando me di cuenta de mis mejillas húmedas

Niniel: fue una mala idea venir, es mejor volver, meditar te ayudara a sanar más rápido, mi energía está dejando de ayudarte –escuché que dijo, pero no abrí los ojos, estaba muy cansada

Selene: no aguantare otra transportación –dije en un susurro y su agarre en mi rostro se volvió un poco más fuerte o yo me debilito cada vez más, no tengo idea, escuché que hablaba, pero no la pude entender, luego todo se volvió negro


Niniel Pov:

Niniel: Selene –dije dándole golpecitos en la mejilla, pero ella no reacciono

Rubí: ¿Qué le sucede? –preguntó detrás de mi

Niniel: no te acerques –bramé alzando mi mano en su dirección

Recosté a Sele en el sofá y puse mis manos en la herida que tenía en su panza, no levante el vestido por que se cuánto odia que la vean, suspire mientras dejaba mi parte de mi energía fluir a ella

En mis manos se formó una nebulosa morada que luego se adentraba a su cuerpo, mi cuerpo se iba cansando poco a poco, pero no lo suficiente para detenerme, las puntas de mis dedos cosquilleaban levemente

Sentí una mano sobre las mías y abrí los ojos, Selene aún tenía los ojos cerrados, pero su mano derecha apretaba suavemente la mía, sabía que significaba, debía detenerme o si no sobrecargaría su cuerpo con energía que no soportaría, su cuerpo aún esta débil, no soportaría mucha energía, puede ser peligroso para ella y el bebé, por eso solo le doy pequeñas cantidades, cuando sé que las necesita y hoy lo he hecho 2 veces y le he dado más de la que acostumbramos, solemos hacerlo solo cuando ella lo necesita y suelen ser cantidades más pequeñas que la que le di hoy

Su suave agarre en mi mano perdió presión y cayo a su costado, aparte un poco el cabello de su rostro y miré a Ryan

Niniel: necesita dormir –solo dije eso y él entendió, la tomó en sus brazos y se dirigió con ella a la que supongo es su habitación

Sentía la mirada de todos sobre mí, pero me limite a sentarme en el sofá con la espalda y barbilla erguida mientras los miraba a todos analizándolos silenciosamente

Mi mirada pareció incomodarlos, pero no me importo en lo más mínimo

Ethan: ¿Qué sucede con Selene? ¿Qué fue lo que ocurrió? –preguntó el hermano de Rubí y mi completa mirada cayó sobre él, haciéndolo encogerse en su sitio

Niniel: no recibo ordenes, ni contesto preguntas que no sean de mi jinete –mi voz sonó más aterradora de lo que pretendía, pero no me disculpe por ello 

MI MATE ES UNA VIROLOGADonde viven las historias. Descúbrelo ahora