Investigación.
Es imposible no sentir añoranza cada que recorro las ahora solitarias calles del pueblo.
Las cosas no son lo que eran antes, bastaron un par de meses para que todo cambiara y ahora todos se miran con recelo, con duda y desconfianza, incluso yo los veo con desconfianza.
Pero las personas no son tontas, al menos la mayoría no se traga el cuento de que las muertes se deben a intoxicaciones, aunque las pruebas indiquen eso, algunos están comenzando a pensar que esto ha sido algo provocado.
Y yo estoy empezando a creerlo.
Por otra parte, la muerte de mi vecina ha ido de boca en boca, las personas no paran de hacer especulaciones y la radio es un factor que no ayuda ya que solo corrobora la teoría de intoxicaciones.
Las autoridades solo piden que aguardemos, ellos no quieren entregar el cuerpo hasta hacerle más análisis y encontrar pruebas, conociéndolos, estos procesos se toman su tiempo, ya que a los cadáveres que se han encontrado no se les ha sepultado, pero tampoco los han entregado, supongo que los retienen como evidencia y después los creman.
La comisaría de Camdreith no es muy grande, pero cuenta con lo necesario al ser la única en el pueblo. En el centro del lugar hay una valla con varias capas de mugre en la cual se ve la insignia que portan los oficiales, también hay una gastada y oxidada línea que dice «Comisaría de Camdreith»
La puerta tintinea cuando la abro y de frente nos encontramos con el oficial a cargo, quien parece ocupado respondiendo las llamadas que entran a unos teléfonos de mesa.
Tiene un teléfono en cada mano e intenta responder a ambas voces, nos echa un vistazo por encima del escritorio a Dina y a mí para luego cubrir las bocinas en su pecho.
—¿En qué las puedo ayudar? —uno de los teléfonos cae sobre la mesa y el hombre comienza a balbucear por la otra línea mientras lo recoge.
—Buenas tardes oficial... —leo el nombre bordado en su uniforme— ...Franco. A mí compañera y a mí se nos fue asignado un trabajo de investigación sobre el pueblo, necesitamos dar detalles sobre los sitios que más admiremos.
El oficial nos mira con un poco de duda reflejado en su rostro y hace una pausa en la que cuelga uno de los teléfonos.
—No creo que sea posible —responde—, los demás oficiales no se encuentran disponibles para darles un recorrido...
—No nos tomara mucho tiempo —se apresura a decir Dina—, nosotras sabremos qué hacer.
No se ve muy convencido, pero luego nos indica el camino con las manos y nosotras nos escabullimos antes de que cambie de opinión.
Pasamos el corredor hasta encontrar las casillas, este vendría siendo el pequeño espacio que se le otorga a cada oficial, están divididas con lo que creo que es anime o un cartón muy grueso y viéndolo desde otro ángulo: damos pena, el pueblo da lastima con sus pocos recursos.
Seguimos de largo buscando algún cuarto o pasillo que de directo con la información, estamos buscamos planillas con historiales, o puede que encontremos una de esas cajas con evidencia que tienden a usar en las películas, esto es lo que a Dina se le ocurrió anoche.
Nos detenemos al encontrar tres estantes con la información de cada habitante. El primero contiene la información personal de los habitantes, el segundo registra el número de abastecimientos con los que contamos, y el tercero redacta las actas de las personas que entran y salen del pueblo.
Le hago señas a Dina para que revise el primero mientras yo husmeo en el segundo. Abro el primer cajón sin poner cuidado y un sonido ronco hace eco por todo el lugar, me paralizo por un momento rogando que el oficial Franco no lo haya escuchado, luego prosigo.
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EXTINCTION
Mystery / ThrillerUn pequeño pueblo aislado de la Gran Ciudad, se ve atacado por una serie de sucesos totalmente alarmantes. Cosas extrañas empiezan a suceder, las cuales llenan de miedo a los habitantes. Nadie nunca podría imaginar que los acontecimientos por los q...