-¿Y bien?...-Pregunto tentativo disfrutando de su timidez.
-Yo... director Santillana...-Me intimida con su mirada y parece que lo disfruta.-Quiero disculparme por lo que sucedió en el restaurante...-Elevo una ceja seriamente y el me ve sin expresió...
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─Que hermosa...─Murmuro ronco mientras la beso apasionadamente.
─Ben yo debo decirte algo...─Hablo entre labios y el niega sonriente
─Ya no hay nada que me detenga hacerte mía señorita Santillana...─Quito su vestidito rosa y cae al suelo, y tiene unas nenas pequeñitas las cuales tomo en mis manos suavemente.─Son hermosas...─Ambos reímos mientras las toco suavecito, lamí su puntita viendola a los ojos y se muerde los labios provocándome.
─Ah! Ben eso es muy rico...─Quito su camisa y abro el botón sacando su pantalón y un Calvin Klein blanco está a mi vista. Rozo su elástico entre dedos y lo bajo lentamente mientras besa mi cuello, y su enorme miembro lo tomo en mis manos y froto suavemente.
─Ah! Muñequita... Mi amigo te ha estado esperando de hace mucho tiempo...─La acuesto despacito en la cama y me posiciono entre sus piernas, froto su clítoris con mi lengua y gime apretándome con sus piernas mi cabeza. Seguí frotando más y más metiendo un dedo en su abertura y jadea aferrada de las sábanas. Solté sus pliegues y me posiciono para entrar en ella.
—Ben espera...—Detuve su penetración.—¿Colocaste un preservativo?—Pregunté en un hilo de voz.
—Joder lo olvidé...—Me levanté de un salto y me puse a buscar uno, abrí todos los cajones y no había nada.—No puede ser posible...—Froté mi rostro molesto.
—¿No tienes?—Me tapo con la sábana un poco y me mira de reojo.
—Lo olvidé...—Suspiro molesto calmando las ganas de ¡Hacerla mía! ¡JODERRRR!
—Ven...—Me ve un segundo y después se giró hacia mí caminando como un perrito regañado.—Eso era lo que quería preguntarte antes de que nos calentaramos...—Reí frotando sus mejillas.
—Lo siento...—Puse mi cabeza en sus piernas y acaricia mi espalda.
—¿Te apetece dormir conmigo?—Pregunto sonriente y el asiente sin verme.—Mañana iré a Hawaii, ¿deseas venir?—Me ve inmediatamente con una sonrisa.
—Por supuesto que iré...—Beso sus labios suavemente y la acurruco en mis brazos para dormir desnudos o eso creo.—Déjame hacerte algo delicioso...—Abro sus piernas y empecé a chupar su sexo devorándolo por todas partes. Mi hermosa empieza a gritar en toda la habitación por sus orgasmos.—Estás deliciosa...—Le dí un último beso en su clítoris y se muerde los labios. Está toda sudadita y sonrojada.
—Ahora me toca a mí hacerte algo rico...—Lo acuesto abriendo sus piernas y agarro mi cabello a un lado y el lo toma en sus manos. Su pene en mi boca comencé a chuparlo de arriba a abajo lentamente y profundo, se escucha hermoso mientras jadea ronco soltando gruñidos de excitación por mis chupes en su puntita. Succiono suavemente y sigo lamiendo, froté con mis manos y su semillita sale, chupo su punta y soltó un gemido ronco, lamo más y más mientras palpita en mi boca.—Que rico...—Le dí un besito en su puntita.
