This isn't so cliche (Seongsang) [En mejora]

13.

⚠️Advertencia: tema sensible.
•Lenguaje explícito.

Seonghwa debe admitir que no odia tanto al menor como creía, habían pasado una tarde bastante amena. Bueno al menos no habían tenido ninguna discusión y pudieron adelantar sus obligaciones.

Decide ir detrás de Yeosang para acompañarlo ya que la zona puede ser algo sola a esas horas.

Obviamente sin que se de cuenta de que lo sigue, va tras él. Se descuida unos segundos porque le entra una llamada a su celular, mira de reojo que es Chan pero finalmente deja que suene para contestar luego.

Cuándo otra vez dirige su vista hacia el pelinegro, puede ver como un tipo tres veces más alto y musculoso que él y Kang juntos, le pone un pañuelo blanco dejándolo inconsciente y se lo lleva.

A pesar del shock en el que acaba de quedar, automáticamente llama a la policía. Por un momento pensó en irse de una vez tras ellos, pero está claro que ni en sus sueños él solo podría con ese sujeto.

Está más que preocupado por lo que le pueda hacer. Mira hacia todas partes rogando para que la policía llegue rápido y no le pase nada malo a Yeosang.

Siente que se va a quedar sin dedos de tanto tronarselos por el nerviosismo hasta que de lejos puede divisar y oír las sirenas de las patrullas.

Rápidamente les hace señas y les explica toda la situación y hacia dónde se fueron por lo que emprenden con velocidad al lugar.

—Resiste— se susurra para si mismo asustado.

[🌿]

El más alto comienza a quitar el suéter del pelinegro y empieza a besarlo por todas partes. Ataca su cuello, su torso y sus pezones.

Llena de besos, chupones y lamidas su pecho jugando con sus dos pezones haciendo que quiera más de ese pequeño indefenso.

El lugar se inunda de sollozos por parte Yeosang y gruñidos por parte de su agresor por la exitación del momento.

Baja su pantalón dejándolo solo en bóxers

—Hmm... Mira como me pones— dice frotándose su erección —tienes cuerpo de una perra, como muero por tenerte

El menor pone cara de asco sin dejar de llorar y forcejea nuevamente pero ya no le quedan fuerzas para pelear. Se siente tan débil, frágil, vulnerable, asqueado e impuro.

Siente como esas horribles manos comienzan a bajar su bóxer liberando su miembro que no ha tenido ninguna reacción al contacto

—Verás que te haré despertar rápido, lindo

Dicho esto masajea su miembro para luego metérselo a la boca y comenzar a succionarlo rápidamente.

Yeosang llora demasiado mordiendo fuertemente su labio para no soltar ninguna clase de sonido. Tanta es la fuerza que ejerce mordiendo que se parte el labio haciendo que sangre.

Se odiaba tanto en ese instante, odiaba que su cuerpo reaccionara ante las asquerosas acciones que le estaban realizando

—Veo que te pusiste duro... Hmmm... Al final todos resultan siendo unas putas. Así me gusta, que cooperes— seguía lamiendo —ahora quiero que gimas para mí

No obtiene nada más que no sean lágrimas y sollozos

—¡QUE GIMAS PARA MÍ TE DIJE!— grita propinandole una cachetada.

Una maldita pesadilla que parece no terminar y desearía tanto dejar de ser consciente para no tener que vivir esta humillación

—Con que te vas a poner difícil nuevamente, eso solo me prende más...

Seguía succionando y lamiendo hasta que sintió que no podía más con su exitación. Así que se saca el miembro de su boca mirándolo con superioridad.

Se levanta bajando sus propios pantalones y sacando su erección para luego levantar a Yeosang y posicionarlo.

Estuvo a punto de rozar su entrada cuándo

—¡MANOS ARRIBA!

Suelta al menor dejándolo caer por el susto

—¡VISTASE, MANOS DETRÁS DE LA CABEZA Y LUEGO AL SUELO!

Suelta una risa

—¡AL SUELO DIJE!

Hace caso arreglando su ropa para luego tirarse al piso con las manos en la cabeza.

Los oficiales van hacia él apuntándole y lo esposan

—Nadie dijo que sería mí último intento, lo haré mío hasta que se desmaye del dolor— espeta riendo con burla.

—El único dolor que vas a pasar es en la cárcel, imbécil— suelta Seonghwa matándolo con la mirada.

—Un minuto más y lo hago mío, espero que para la próxima lo cuides mejor— suelta con una voz que le repugna.

Park cierra fuertemente los ojos intentando mantener la calma y no perder la cordura.

Sacan de ahí al agresor mentiendolo a una patrulla que se va inmediatamente para llevarlo a la comisaría.

El mayor va hasta dónde los policías que tienen a Yeosang llorando y se parte en dos al verlo tan destruido, desnudo, lleno de moretones

—¿Pueden traer una manta por favor?

Los policías asienten y se dirigen a buscarlas.

El menor se acurruca a él llorando a más no poder y puede sentir como tiembla todo su cuerpo. Parecía tan frágil que sentía que con cualquier movimiento lo podía romper.

Le traen la manta que pidió y con suma delicadeza cubre su cuerpo

—S-Seongh-hwa...

Es lo último que pronuncia antes de cerrar sus ojos y caer desmayado

—Yeo, Yeosang despierta— lo sacude un poco intentando que despierte y se pone nervioso imaginando lo peor —¡Ayúdenme está inconsciente!— grita.

Llaman automáticamente a una ambulancia y antes de que esta llegue recogen todas las pertenencias del menor para lograr identificarlo y llamar a sus padres.

Se puede ver a los paramédicos llegando en poco tiempo con una camilla y pasan cuidadosamente el cuerpo inconsciente del chico y poniéndole una bolsa de suero.

Van hasta afuera para encaminarse hacia el hospital urgentemente.

Seonghwa no se ha despegado un solo segundo de la camilla mientras está al pendiente de cada movimiento que realizan con él.

Dejan que vaya en la ambulancia también con él al ser su único acompañante.

Dentro de esta mira su débil cuerpo y se acerca comenzando a acariciar sus negros cabellos y dejando suaves toques en su delicada cara

—Perdóname por no llegar a tiempo— susurra.