–¡¡PELEA, PELEA, PELEA!!
Me encontraba hablando con una chica llamada Lucy, cuando el griterío que indicaba una pelea nos interrumpió. Ambas fuimos rápidamente a ver lo que ocurría en las escaleras de la estación. Un chico rubio estaba pegándose con otros tres, lo que significaba una pelea nada justa.
–No puede ser. – Dijo Lucy.
Y sin decir nada más, Lucy salió corriendo en dirección a la calle, dejándome viendo como esos chicos se pegaban. Cuando Lucy volvió, no lo hizo sola. Venía acompañada de otra chica, un par de años mayor que ella. Supuse que esa sería su hermana, ya que me dijo que ella era la menor de cuatro hermanos: dos chicos y dos chicas.
Por las caras de preocupación de ambas, uno de los chicos de la pelea era su hermano. Otro chico, creo que de mi edad, pasó por mi lado y fue en ayuda del rubio.
–¡Edmund! – Gritó Lucy al recién incorporado.
El sonido de silbato proveniente de los guardias, provocó la huida del lugar de todos. Las tres fuimos arrastradas por la muchedumbre escaleras arriba.
–¿Qué crees que habrá pasado para que Peter se peleara con esos chicos? – Preguntó Lucy.
El ambiente que había originado la pelea estaba desapareciendo, dejando bajar las escaleras con tranquilidad. Lucy nos había presentado a Susan y a mí, y ahora estábamos buscando a los varones de la familia Pevensie.
–Ahora le preguntamos. – Le respondió Susan, pero su rostro indicaba que tenía una idea al respecto.
Lucy y Susan llegaron junto a sus hermanos, yo me quedé un poco atrás. Se sentaron en un banco los 4 y Lucy me hizo una señal para que fuera con ellos. No estaba del todo segura de ello, pero me acerqué lentamente.
–De nada, eh. – Dijo Edmund a su hermano.
–No me hacías falta. – Le respondió su hermano con molestia, levantándose del banco.
Me quedé de pie junto a Susan, Lucy se encargó de presentarme, pero Peter, el mayor, seguía con los malos humos por la pelea y seguro ni escuchó mi nombre. Todos estábamos observándolo, casi echando humo por el enfado.
–¿Por qué ha sido esta vez? – Le preguntó Susan, como si no fuera la primera pelea de su hermano.
–Me ha empujado.
–¿Y le has pegado sólo por eso? – Le pregunté asombrada.
–No, después de empujarme me ha pedido que me disculpara. – Me respondió. – Entonces le he pegado.
–¿Tanto te habría costado ignorarle? – Le preguntó Susan.
–¿Por qué tengo que hacerlo? – Dijo Peter. – ¿No estáis hartos de que os traten como a niños? – Les preguntó a sus hermanos.
Extraña pregunta, si eran niños. ¿En qué momento no lo fueron? Debía estar delirando tras la pelea, le habrían dado en la cabeza. Sí, un golpe en la cabeza lo explicaría.
–Somos niños. – Le respondió Edmund. Menos mal, este seguía teniendo la cabeza de una pieza.
Edmund era bastante guapo, incluso me parecía más guapo que su hermano, que no me gustaran los rubios sería uno de los puntos que inclinaba la balanza. Pero, ¿desde cuando me fijaba tanto en los chicos? ¿Me estaba volviendo como mis demás compañeras?
–Pues yo no siempre lo he sido. – Le dijo el rubio.
¿Cómo? O había perdido la cabeza o soñaba demasiado. Mi mirada pasó con confusión entre el mayor de los Pevensie y sus hermanos, que parecían que entendían de que hablaba.
ESTÁS LEYENDO
Witch in Narnia (Edmund Pevensie)
FanfictionTenía que estar soñando, no podía ser cierto lo que mis ojos estaban viendo, pero era real: ya no estaba en Inglaterra. Conocí a los hermanos Pevensie en la estación y supe que nuestras vidas no se habían unido por casualidad. Entonces los cinco fui...