criminal's daughter || Lee Know

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–Abuela, ¿Quiere que apagué la television?– miré a mi abuela algo distraída con el hilo y la tela que sostenía entre sus arrugadas y temblorosas manos pero me miró negando de inmediato.

–No, quiero seguir escuchando a los jóvenes apuestos de la television– mi abuela últimamente disfrutaba mirar a los cantantes que estaban de moda y salían en la televisión, me presumía que mi abuelo era idéntico a ellos. –Mira, ese chico se parece a tu abuelo de joven, pero claro que el era más guapo.

–Claro abuela, mi abuelo era el más guapo del mundo.– asentí sentándome a su lado y acercando un pedazo de pera a su boca, que ella abrió su boca y tomó la fruta entre sus dientes para después comerla.

–¿Sabés quién es guapo también?– la mire dándole mi atención –Yongbok, ese chico es guapísimo.

–Abuela, tienes un muy notorio favoritismo a Felix.– reí ante el comentario y ella siguió trabajando en la tela. La puerta de la casa se escuchó y me pare a ver quién era, abrí la puerta encontrándome con Minho mirándome con una hermosa sonrisa y un girasol en sus manos, sonreí mirándolo. –Minho, llegaste.– tomé el girasol sonriendo, era muy bonito. –Gracias.

–Aigooo, miren a quién tenemos aquí.– mi abuela se paró de su silla y se acercó a Minho mirándolo –El chico más apuesto que mis viejos ojos vieron.

–Hola abuela– Minho sonrió y le dió un beso en la mejilla a mi abuela –Lo siento, debo llevarme a Daewoon hoy, está bien?.

–Llevatela, quédatela y no me la regreses, es mucho problema para mí, llévatela ahora mismo.– mi abuela movió sus manos como si estuviera corriéndome y se volvió a sentar en su silla. –Diviertanse y cuídense.– ambos nos despedimos de la abuela, dejé el girasol en un jarro con agua para que se conservará y salí de casa con Minho.

–¿Dormiste bien?.– miré al chico a mi lado, recibí su dulce mirada y asintió con una sonrisa tomando mi mano, me sorprendió un pero correspondí al agarre de inmediato.

–Dormi bien, aunque estaba emocionado, ¿Qué tal tú?– charlamos cosas trivales y nos pusimos un poco al día el uno con el otro, habían muchas cosas nuevas que saber del otro. Llegamos a una cafetería llena de libros, mangas, y con algunos gatos, escogimos algo para leer, Minho tomo un manga de terror y yo tomé un manga de romance que llamó mi atención. Pedimos un café y entramos a un pequeño cuarto los dos donde habían dos gatos peludos.

–Oooh, no, aléjate, no puedes tomar, awwwwww, eres muy bonito.– Minho se derretía por los gatos del lugar, era demasiado adorable mirarlo acariciar y darle pequeños besitos a los gatos cada dos segundos. Terminó el manga al igual que yo, las bebidas terminaron vacías al instante pero seguíamos pasando el rato jugando con los felinos en el cuarto.
–Oh, a este gatito no lo había visto, que bonita eres, eres muy bonita.– el comenzó a acariciar mi cabello mientras abrazaba a uno de los gatos haciendo que lo mirara confundida y con el ceño fruncido –Oh, no te enojes, no voy a lastimarte.– Minho se acerco a mí y depósito un beso en mi mejilla acariciando mi cabello y haciéndome enrojencer un poco –Eres adorable– el se lanzó a mis brazos cuando solté al gato que estaba en peligro se ser aplastado por el chico y yo fui víctima de sus manos acariciando mi cabello y aplastando mis mejillas.

–Lino, vas a arrancarme los cachetes.– aparté como pude al contrario y el me miró con una sonrisa. El simple hecho de mirarlo sonreír logro que el ambiente se vuelva aún más cálido ahí.