HUNGER GAMES: THE OLD VICTORY

Chapter 6

Los Vigilantes aparecen nada más comenzar el segundo día. Son unos veinte hombres y mujeres vestidos con túnicas de color morado intenso. Se sientan en las gradas que rodean el gimnasio, a veces dan vueltas para observarnos y tomar notas, y otras veces comen del interminable banquete que han preparado para ellos, sin hacernos caso. Sin embargo, parecen no quitarnos los ojos de encima a los tributos del Distrito 2. A veces levanto la cabeza y veo a uno de ellos mirándome. También hablan con los entrenadores durante nuestras comidas y los vemos a todos reunidos cuando volvemos.

Tomamos el desayuno y la cena en nuestra planta, pero a mediodía comemos los veinticuatro en el comedor del gimnasio. Colocan la comida en carros alrededor de la sala y cada uno se sirve lo que quiere. Los profesionales, solemos reunirnos y comer juntos, platicar entre nosotros, me sorpende que cuando llegó con Mailey la acepten rapidamente en nuestro cerrado circulo.

-Cuantanos Mailey, ¿De que Distrito vienés?-le pregunta Rapder metiendose una cucharada de pudín a la boca

-Soy del Distrito 4-responde ella con simpleza

-El Distrito pesquero, que lindo-comenta Cassius sin quitarle la mirada de encima, le esta coqueteando, de una manera muy mala a decir verdad. ¿Cómo lo se? Su mirada, yo la he ocupado varias veces. Solo funciona si sabes como usarla, claramente el no tiene ni la menor idea de lo que hace.

Juzgue mal a mis compañeros de alianza, bueno, no a todos. Rapder es muy amable y algo timido a decir verdad y Jean es molesta pero graciosa. Comienzo a preocuparme porque parece que no me desagradan del todo, bueno, Cassius es un grano en el trasero, pero no siento odio o repulsion hacia los demás.

-Sabes, tal vez pueda enseñarte algún que otro truco-le dice Cassius poniendo su mano en la pierna de Mailey.

Noto como al instante, ella se incomoda y de repente su sonrisa desaparece. A Cassius no parece importarle su incomodidad porque sigue tocándola. Así que con el cuchillo de plastico que nos dan con la comida, lo golpee en la mano de tal forma que dejara de hacerlo, en un arrebato de celos.

-¡No me provoques, Montgomery!-dice amenazante

De repente, la comida se tensa y dejamos de hacer bromas y reír entre nosotros, cuando se termina nuestro tiempo de comida, decido dedicarme en cuerpo y alma a las lanzas y las espadas.

Cuando llego al puesto, sorpresivamente solo estoy yo, así que me enseñan de todo. La brutalidad de mi fuerza deja soprendido al instructor y me pregunta como es que no sabia hacer esto antes, la respuesta es muy simpre, de los 12 años que llevo en la Academia, solo habia podido ir a todas las clases hasta que Greg cumplio 3 años y dejo de ser menos dependiente de mi.

Se une a mi Mailey despues de unos minutos. Tiene su cabello anaranjado atado y sus ojos verdes se ven mas relucientes que ayer. Es muy buena en esto, demasiado buena a decir verdad. De repente, todo esto me aterroriza. Todo se vuelve mas real de lo que quisiera y por alguna razon, me estoy apegando demasiado a estos chicos.

-Sabes, te ves muy linda cuando me ves con tus ojos azules-dice sacandome de mis pensamientos-Pero te ves aun mas linda cuando piensas, ¿En que estas pensando?

-Pensaba en lo que pasara en unos dias-le confieso-Te sere honesta, tengo un poco de miedo.

Estaba apenada, mis mejillas se ruborizaron y baje la mirada. Ella rio por lo bajo y tomo mi mano obligandome a verla a los ojos. Sus hermosos ojos verdes y brillantes penetraron mi mirada. Es increible como una persona a la que conoci hace un dia, tenga mas influencia en mi que todos mis compañeros de alianza, solo gracias a ella, puedo seguir con mi entrenamiento sin que una ola de nervios y miedo me invadan.

De vuelta en la planta del Distrito 2, Brutus y Lyme nos acribillan a preguntas durante el desayuno y la cena sobre todo lo ocurrido a lo largo del día: qué hemos hecho, quién nos ha observado, cómo son los demás tributos. No estan los estilistas con nosotros asi que la humanidad entre Lyme y Cassius se pierde despues de unos minutos. Interrumpo su horrible pelea anunciando que ambos estamos en una alianza con los chicos del 1 y la chica del 4.

-No soy muy fan de Montgomery, pero has encontrado una mina de oro-dice Cassius-Esa chica del 4 es increible, ademas de ser una belleza.

Tiene razon, Mailey es increible y es bella. Pero por alguna razon, la manera en la que lo dice, causa que se me revuelva el estomago y me dan ganas de golpearlo fuertemente en su perfecto rostro.

El tercer día de entrenamiento empiezan a llamarnos a la hora de la comida para nuestras sesiones privadas con los Vigilantes. Distrito a distrito, primero el chico y luego la chica. Cuando pasa Rapder, nos sonríe a los 5 que conformamos su alianza y se va con toda la confianza del mundo a su sesion privada, creo que de todos, soy la más asustada del mundo. Trato de quitarme los nervios viendo a los demás tributos: Los chicos del 3 tienen unso 15 o 14 años y ambos tienen el cabello castaño y son un poco palidos. Cuando veo al lado de Mailey, hay un chico alto y de ojos negros. Asi me la paso con todos los tributos hasta que llego con la pareja del 12, ambos son tan parecidos que podrian ser hermanos, cabello castaño y ojos grises, muy delgados, tan delgados que temo que se rompan con solo dar un paso. Ambos me ven con preocupacion y desvian la mirada al instante, con total miedo, están aterrorizados, como yo, pero poco puedo hacer con ellos si es que quiero regresar a casa.

-Hey, tranquila-dice Mailey tomando de mis manos, es la primera vez que lo hace frente de todos los tributos-Kayler, mirame.

Me obligo a mirarla, otra vez sus penetrantes ojos verdes.

-Kay, eres increible, eres magnifica, eres la mujer más hermosa que he visto-dijo tomando mi mandubla- Brillaras haya dentro, serás como una estrella, ya eres una estrella, solo tienes que hacer que te vean brillar.

Posó su mano en mi cuello y me atrajo hacia ella, por un momento creí que fuera a besarme, pero no lo hizo. De repente, senti su respiracion en mi cuello y pronuncio las palabras que siempre habia querido escuchar de mi familia.

-Kayler, yo confio en ti-

Después de quince minutos, me llaman. Me aliso el pelo, enderezo los hombros y entro en el gimnasio. Todos están centrados en mí cuando me ven llegar, escucho a varios murmurar ante mi llegada. Tengo masomenos una idea de lo que haré este día: planeo mostrarles mis nuevas habilidades con los nudos y la lanza, si me da tiempo, mostrar mi hablidad con la espada.

Hay un campo de tiro que me parece demasiado limitado, dianas estándar y siluetas humanas. Me dirijo al centro del gimnasio y escojo el primer objetivo: el muñeco de las prácticas de cuchillo. Cuando me pongo a 10 metros del primer objetivo, lo ensarto a la primera en el corazón o lo que supone simular un corazón humano. La sala se llena de aplausos, pero quiero mas, asi que me muevo y me pongo a 20 metros del objetivo, me sorprendo incluso yo misma de haberlo ensartado en el mismo punto que hace rato, 30 metros, lo mismo, segui, segui y segui hasta que llegue a los 60 metros, estaba tan cansada que ya no veia factible ensertar la lanza, pero queria intentarlo. La lancé, con toda mi fuerza, cuando vi la silueta, estaba ensartado, justo ahi como en las otras veces, los vigilantes aplaudian y chiflaban todos sorprendidos, no podian creerlo, ni yo misma.

-Muchas gracias por la increible presentacion, señorita Montgomery. Puede restirarse-Abrieron una puerta para que saliera y me fui

¡Lo habia logrado! ¡Los habia sorprendido! Y no solo a ellos, me habia sorprendido yo misma de mi fuerza, nunca imaginé que podria hacerlo. Cuando llego, estoy tan emocionada, que no me importan las miradas de Cassius, o los comentarios de Lyme sobre mi actuacion, la cual, ella asegura, fue un desastre total. ¡Que piense lo que quiera! Pero quiero ver su rostro cuando den las calificaciones esta noche.

¡No puedo esperar!