Especial: Cena Malfoy

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Las veces que había estado con Narcissa Malfoy, no habían sido las mejores y en ese momento, la conocería como la madre de su novio, vaya que tenía miedo. Sus manos temblaban al igual que sus piernas. Él no tuvo pena de demostrar su nerviosismo. Sintió un poco más de tranquilidad cuando Draco lo tomó de la mano y entrelazó sus dedos. Suspiró. 

Al llegar al lugar, sintió un nudo en la garganta. De verdad se preguntaba cómo es que podía seguir caminando. Caminó junto a Draco, prestando atención a absolutamente nada, lo único que daba vueltas en su mente era "mucho gusto, señora Malfoy. Soy Harry Potter" No, ella ya sabe quien eres, idiota. Pensaba. "es un placer para mi estar con usted". No, demasiado extraño. "Debo decirle que hizo muy bien a su hijo" ¿Qué? NO. NO DIRÉ ESO.

-Buenas tardes, señor Potter. Me alegra poder verlo de nuevo. Mi hijo me ha hablado muchas cosas de usted- Dijo Narcissa cuando ambos chicos ya estaban frente a ella. 

-Tardes buenas- Respondió. ¿Qué acabo de decir?

Narcissa soltó una risita y Draco cubrió su cara con la mano que tenía libre.

-Discúlpeme, la verdad estoy un poco nervioso al tener frente a mí a alguien tan importante como lo es usted, señora Malfoy. La verdad que tanta belleza me deslumbra, puedo notar de quién lo sacó Draco- Dijo, con una pequeña sonrisa. 

-Muy halagador de tu parte. Llámame Narcissa- Respondió. Draco sonrió hacia Harry y este hizo lo mismo. 

Los tres se sentaron y comenzaron a cenar tranquilamente. 

-Dígame, Potter ¿Tiene algún trabajo ahora?- Preguntó Narcissa rompiendo el silencio. 

-Trabajo con mis amigos en una librería- Respondió. 

-Oh, ya veo, interesante- Susurró la mujer, notando que no había algo con lo que podía hacer conversación y conocer al novio de su hijo. 

En eso, un golpe como de cristal se escucha en el restaurante. Cuando los tres voltean, era una persona que había dejado caer un florero. 

-Vaya desperdicio de tulipanes- Susurra Harry. 

-Y que lo digas. Aquellas pequeñas gardenias también fueron desperdiciadas- Respondió Narcissa, regresando su mirada al plato. 

-¿Notó las hortensias que estaban en la entrada? Definitivamente le dan vida al lugar. 

Narcissa miró al chico con una pequeña sonrisa. 

-De hecho, Harry, en la parte de atrás hay unas pequeñas Albizias julibrissin que impactan más- Susurró. -Es bueno que tengan un cuidado hacia ellas. 

-Hay algunas plantas que son juzgadas por su apariencia como... las Allagopappus canariensis, muy poca gente las conoce por lo mismo pero en lo personal, es una de mis favoritas- Recalcó con una suave sonrisa. 

-Las favoritas de mamá son las Aeschynanthus radicans- Dijo Draco con una excelente pronunciación que erizó la piel de Harry. 

-¿Las conoces, Harry?- Preguntó Narcissa. 

-Oh, claro. Las he visto más en imágenes que en persona pero cuando las presencié, realmente es admirable la forma tan elegante que tiene. 

Y así, la conversación se volvió más interesante, haciendo que Narcissa riera con algunas anécdotas de Harry al igual que Draco. Pasaron una buena tarde y los nervios que en algún momento sintió, se esfumaron y disfrutó la compañía de su ahora suegra y novio. 

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Hola:) Este capítulo lo publiqué como un especial ya que quería que terminara la historia con Harry descubriendo a Draco con las historias y no sabía dónde agregar la cena de Narcissa conociendo a Harry. Espero que les haya gustado mucho. 

He estado pensando en publicar más historias ya que tengo varias en borrador pero no me atrevo a subirlas. Si les gustó esta historia y les gustaría que publicara más, díganmelo y veré que otra se me ocurre. 

Debo decir que subí una llamada "¿Qué mierda con los Gryffindor?" y en lo personal me encanta como quedó la historia, además la subí completa, ya está disponible en mi perfil.

Sin más que decir, espero que la hayan disfrutado tanto como yo lo hice al escribirla :D




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