Capítulo 5. Parte 1

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Luego de llorar por un par de horas de la nostalgia al recordar muchas cosas, me levanto de mi antigua cama para lavarme la cara y arreglarme el maquillaje. Miro el reloj y me doy cuenta que son las 7:50 pm y que mis amigos deben estar por llegar.

Bajo al primer piso para asear un poco y terminar de ordenar unas cosas que compré cuando venía de camino. Escucho el sonido de dos autos llegar. Voy hacia la entrada de la cabaña para recibir a mis amigos y para mi sorpresa no vienen solos. Del primer auto bajan Laura, Ricardo, Lena y Carlos con muchas bolsas. Del segundo bajan Nicole, José Andrés, Eva y... mis ojos no lo pueden creer, May viene con ellos. «¿por qué la invitan si saben lo que me hizo?» pienso.

No necesito decirles a mis amigos que estoy furiosa por invitarla a ella, ellos entienden con solo notar mi expresión, ingresan todos a la cabaña. Lena se queda de última para darme la explicación que estoy esperando.

―Lo siento, amiga. No me odies, la invité porque creo que ella también necesita una noche de relajación y un par de tragos. Creo que la está pasando mal ―me dice Lena al oído y en un tono que solo yo escuche.

―Te estoy odiando, pero tienes razón. No debe ser nada lindo tener a tu hijo en el hospital y sentirse responsable e impotente por no poder ayudarle, más aún siendo doctora ―le digo con menos molestia de la que sentía.

Una vez dentro de la cabaña, los chicos guardan la comida y las cervezas que traen. Laura me pide permiso para conectar su celular con la planta de sonido. Escoge una de mis canciones favoritas, "something just like this" de The Chainsmokers y Coldplay. Sé que era su forma de disculparse por haber permitido que Lena invitara a Laura. Sin embargo, nunca le conté que esa canción era de mis preferidas porque May me la dedicó cuando intentaba decirme que también se había enamorado de mí. Mi amiga me mira buscando aprobación y yo solo asiento.

―¡Una de tus favoritas! ―me grita Lena desde el otro lado de la sala.

Puedo sentir la mirada de May sobre mí. Y no me equivoco, volteo a mirarla y ella tiene los ojos clavados en mí con una sonrisa que expresa algo similar a la nostalgia.

Después de llevar un par de horas bebiendo, sin hablar y tarareando las canciones que Laura escoge. Decido ir por un trago a la cocina, estoy tomando cerveza, pero quiero algo más fuerte y me decido por un shot de tequila, tomo la botella para servirme y siento a alguien detrás de mí.

―¿Acaso no sabes que el tequila es una bebida para beber en compañía, así como el vino? ―me dice May y acerca otro shot para que le sirva uno a ella.

―Claro, lo sé. Pero noté a todos muy ocupados con sus bebidas que no quise preguntar si alguien más quería algo fuerte ―le contesto mientras sirvo ambos tragos. Tomo el mío y cuando lo llevo hacia mi boca, la mano de May me detiene.

―Otro factor importante al tomar tequila, es que debes brindar por algo, de lo contrario no tendrá el mismo efecto ―me dice aun sosteniendo mi brazo para evitar que lo beba. Le frunzo el ceño.

―Nunca acostumbro brindar con tequila, para eso utilizo el vino, el champagne o el ponche, pero no a Don José ―digo señalando la marca de la bebida.

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