―A lo que más le tenía miedo era a enamorarme, pero los miedos toca enfrentarlos y algunas veces no es por decisión propia, al menos en mi caso no lo fue, mi corazón decidió hacerlo por mí. El problema de enamorarse no es que no te correspondan porque al menos desde el inicio sabes que no hay un "nosotros" para ti y la persona que amas. Lo que sí es un problema es vivir ocultando lo que sientes, enamorarte de una persona que también te ama, pero de una forma distinta ―hago una pausa para beber un trago de mi cerveza y observo como todos ponen atención a mis palabras y sobre todo miro como May tiene cara de quien no entiende nada, pero a la vez lo entiende todo y sabe que hablo de nosotras―. Decides entonces que para no perder a esta persona lo mejor es guardar tus sentimientos, tanto que te toca incluso ayudar a tu mejor amigo a llegar al corazón que tú deseas enamorar. De pronto un día te das cuenta que debes alejarte porque tu persona ya encontró a su persona, y necesitas olvidarla. Pero cuando encuentras las fuerzas para hacerlo, el destino decide joderte la puta existencia y tu persona te confiesa de una forma muy romántica y original que está enamorada de ti. Tu sueño se hace realidad, no te importa perder a tu mejor amigo, ni que muchas personas se vayan a molestar por lo que sienten, porque para ti es amor y lo vale todo. Todo es mariposas y magia, entonces, ¿Cuál es el jodido problema? Despertar y darte cuenta que no era cierto, que no te eligieron a ti que solo fue un espejismo confabulado por esa persona y por el maldito destino ―termino y me levanto rápidamente del suelo. Necesito aire porque siento que me voy a asfixiar. Laura hace el intento de levantarse también, pero con una mirada le digo que necesito estar sola.
Me recuesto a un árbol de la parte trasera de la casa y comienzo a recordar cada una de las canciones que me dedicó para terminar con un discurso perfectamente imperfecto del amor y de cómo se dio cuenta que me amaba. Escucho unos pasos y volteo a mirar quién es, porque le dije a Laura que no me siguiera y si lo hizo me voy a molestar mucho.
―Te faltó agregarle algo a tu respuesta ―Escucho la voz de May que sale de las sombras.
―¿Tu nombre? ―le respondo y antes de que me pueda decir algo, continuo―. No, hay cosas tan obvias que no necesitan decirse. Eres la última persona que deseo ver en este momento. ¿Te vas? ―le digo sin levantarle la voz y ella solo niega con la cabeza.
―Entonces me voy yo ―le digo secamente.
Me despego del árbol para dejarla sola y me empuja hacia atrás, así que le devuelvo el empujón, no soy una persona violenta, mi reacción fue por inercia. Veo como levanta su mano para pegarme una cachetada. Le tomo la mano en el aire, la acerco hacia mí y la beso. Empiezo con un movimiento lento y luego mi lengua irrumpe en su boca lo que hace que el beso se torne intenso, lo noto sobre todo porque May me toma de la cintura y es ella quien ahora se pega más a mi cuerpo. Coloco una de mis manos en su nuca y la otra la deslizo hasta llegar a su cadera y con mis dedos empiezo a levantar levemente su blusa. Con la yema de mis dedos empiezo a acariciar su piel y ella se estremece, continuo con el jugueteo y decido subir mi mano hasta encontrarme con el borde de su sostén, ella se estremece aún más y mi deseo aumenta, quiero escucharla gemir, así que introduzco mis dedos en su sostén y me doy cuenta cuán excitada está cuando siento su pezón, empiezo a acariciar todo su seno, la tomo fuerte del cabello para que su boca se pegue más con la mía y un gemido sale de ella dentro de mi boca. Cumplo mi objetivo, la hice gemir y aunque deseo hacerla mía, me detengo. Estando segura de que está tan mojada como yo, me despego de su boca, quito mi mano de su pecho, pero mantengo la otra sujetando su cabello y voy a hacía su oído.
―Te advertí que la anterior era la última cachetada que me dabas, hoy decidí pagar con un beso tu intento fallido de golpearme, pero la próxima vez que lo hagas lo que vas a recibir de mí será un cachetada igual o más dolorosa que las tuyas ―le digo y me voy hacia el interior de la cabaña. Ella se queda inmóvil, no sé si por el beso o por lo que le dije.
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Punto de Quiebre
Fiksi RemajaCuando Sam cree que todo en su vida se estabilizó llega el caos. Debe entender que no podemos culpar de nuestro sufrimiento a los demás porque cada quien es libre de tomar sus decisiones y nosotros somos quienes permitimos si estas nos afectan o no...