16 | las espinas del amor

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a veces, para muchos, el amor es posesión,

de echo, el propio nombre lo indica

"te quiero" del verbo querer, poseer.

Deseo del tener, el amor se ha interpuesto en nuestra vida, como algo inseparable de nuestro ser (por mucho que se intente desecharlo) y se le ha dado una connotación muy distante de lo que realmente significa.

Muchas personas tienen un pensamiento erróneo sobre lo que el amor representa, de echo, si preguntases, muchas de las respuestas serían parecidas a esta (ojo, la muchas) :

"El amor es pasión"

"El amor es voluntad"

"El amor es indescriptible"

"El amor es...."

Y es que sí, nadie sabe lo que es el amor. Tan confuso suena lo que nos enseñan de él que cuando realmente lo experimentas, vives la contraposición más grande de tu vida, llevándote a replantearte, (si no quieres mirar hacia otro lado y dejarte llevar por lo que en su día te impusieron) tus bases del todo.


Realmente, el amor tiene una sencilla explicación, como todo, solo que se nos ha impuesto esa condición llamada "idealización amorosa" haciendo que este sentimiento sea percibido por las personas como posesión, como si de tener a un objeto en med de una persona se tratase.


La temible verdad sobre las relaciones tóxicas es algo que no está al margen de la sociedad pero que la misma ignora. 


Y es que sí, estas relaciones forman parte del día a día de nuestro sistema contemporáneo, ocultos a través de cada astilla que sobresale en las puertas de millones de casas, una astilla que no debe quedarse clavada por mucho tiempo si no quieres que te infecte.

Esa astilla necesita salir de ahí, escapar, ser libre de esa relación que le ata. 

Esa astilla no está hecha para permanecer en tu piel, desgarrándote cada centímetro de pasión hasta dejarte vacío.

Lo más trágico de este asunto es que, esa persona, solo cuando se libera, puede ver a toda la madera que tenía detrás de ella  y toda la abismal construcción que se había formado alrededor.

Todo esto se forma por causa de la falsa percepción que la población tiene sobre lo que hoy en día se conoce como "querer", muchas veces perpetuada desde nuestro nacimiento.

El verdadero amor es libre, de dos o más personas, y no sigue unos esquemas generales que dictan su funcionamiento. Lo único que sabemos a ciencia cierta de él, es que, para que funcione, tiene que ser recíproco.

Si uno decide mantener una relación, el amor no es lo único que se necesita para conformarla. De echo, por muy fundamental que sea, no tiene ni mínimo porcentaje de importancia en comparación con el entendimiento, la conexión. Aunque sientas un amor indescriptible hacia una persona, y ese amor sea recíproco (factor importante, ya que, como he mencionado hace tres líneas, el amor, exceptuando el propio, es algo de dos) nunca funcionará si no existe una conexión junto con una comunicación fluida que os correlacione y os una de manera real y sana. Recuerda que, si mantienes una relación, estarás con esa persona durante extensas duraciones de tiempo, e incluso, lo más común en un amorío avanzado, es que acabéis residiendo en el mismo hogar. Por ello, necesitarás entenderte con la persona con la que pasarás idílicos momentos de vida si realmente quieres disfrutar de la experiencia. 

En cambio, la desesperación abundará constantemente en dos personas condenadas al fracaso en una situación de desentendimiento absoluto.

No olvides que tu mayor sueño se puede transformar de un día para otro en lo que te lo quita.

Así funciona nuestra existencia, no todo iba a ser tan fácil, de echo, muy pocas cosas lo son.

 creo que es hora de que se replantee en qué vida está usted viviendo.

La vida son meras decepciones y realidades ficticias que nunca se llegaron a materializar.

La corona siempre lleva espinas y antifaz,

si se escoge ciegamente.



pensamientos a floteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora